El ex viceministro de Economía Gabriel Rubinstein, que ocupó la Secretaría de Política Económica durante el mandato de Sergio Massa en el Palacio de Hacienda, cuestionó el proyecto de ley aprobado en el Congreso que modifica la fórmula de actualización de las jubilaciones, mencionó que el costo fiscal es elevado y que no respeta la ley de administración financiera del Estado. “En esta la razón está del lado de Milei”, dijo.
El economista y consultor utilizó su cuenta de X para volcar su opinión sobre la sanción del proyecto, que tuvo lugar el jueves pasado y que será vetado, según anticipó el presidente horas después. “Doblemente preocupante que Congreso no haya presentado como financiar la Reforma de Movilidad Jubilatoria”, mencionó el ex funcionario, que ocupó el cargo de viceministro entre agosto de 2022 y diciembre de 2023.
En ese sentido, enumeró dos razones: “Costo fiscal anual, de 1,2% PIB (estimado x OPC), es una cifra muy elevada”, dijo al citar datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso para el ejercicio fiscal 2025. Y le sumó, como segundo motivo, “porque se incumple Ley Administración Financiera, que obliga a presentar fuentes de ahorro fiscal en caso de leyes que aumentan gastos”. “En ésta, veo que la razón está del lado de Javier Milei”, concluyó.
En intercambios con usuarios de X, Rubinstein abundó, sobre la Ley de Adminitración Financiera, que en esa norma “se establece que cada iniciativa que afecta recursos debe ser presentanda con propuesta de financiamiento . Y esta muy bien que así se haga. Si no es muy fácil ir subiendo gastos para obtener simpatía con votantes”.
En las últimas horas dos economistas que fueron, en mayor o menor medida, cercanos al presidente Milei, fueron críticos del veto presidencial y relativizaron el costo que tendría ese esquema jubilatoria nuevo para las cuentas públicas.
En ese sentido, el economista de UCEMA Carlos Rodríguez, que llegó a ser nombrado jefe de asesores económicos durante la campaña presidencial -puesto que dejó antes del cambio de Gobierno-, dijo también vía X que “la Comisión de Presupuesto del Congreso dijo que el costo era aproximadamente 0,4% del PBI. El Comunicado de Presideencia dice que el costo es 1,2% y lo lleva al 25% del PBI en Valor Presente descontando flujos al 5% anual. El Presidente Milei al poco tiempo mencionó un costo fiscal que llegaría a 60% del PBI en Valor Presente. Ese costo fiscal parece subir como una ‘flatulencia de buzo’ (parafraseando al Presidente) a medida que avanza la discusión política”, cuestionó.
“Elucubración”
“Quiero mencionar que el número que menciona Milei es una elucubración totalmente incorrecta ya que se basa en suponer salarios reales eternamente crecientes con recaudación del Anses independiente de ello. El Anses se financia en gran parte con impuestos/aportes sobre el salario de los trabajadores formales. Todo esto es muy poco serio. Los políticos deberían saber mejor cuánto cuesta lo que están votando y el Presidente debería calcular mejor el costo de lo que está vetando”, concluyó.
El ex director de Anses durante este gobierno, Osvaldo Giordano, aseguró que, en realidad, la medida implicaría un beneficio para el fisco y no un costo. El ex funcionario -y ex ministro de Economía del gobierno cordobés- le contestó por X al ministro de Desregulación Federico Sturzenegger respecto al cálculo oficial del costo fiscal. “Si se instrumenta bien, la ley aprobada es una oportunidad para darle sostenibilidad al superávit fiscal. El aumento de costos se puede compensar focalizando mejor el bono y se gana en seguridad jurídica”, dijo.
En declaraciones al canal Doce de Córdoba, amplió: “Estoy de acuerdo en que el presidente defienda el plan fiscal, pero no en que esto (por la ley del Senado) conspire contra el plan fiscal. Bien leída, es una gran contribución al equilibrio fiscal. Hoy estamos con un DNU, una situación atada con alambre. La movilidad, por la Constitución la tiene que fijar el Congreso, la Corte lo ha dicho varias veces. Hoy estamos en una situación precaria, muy propicia a algo que la Anses conoce de memoria, los juicios. Si a eso le agregamos que el empalme está mal hecho, porque se comió una parte de la inflación de enero. Es cierto que el gasto hoy está comprimido, pero estamos generando una bomba de tiempo a futuro”, señaló Giordano.