El mercado inmobiliario confirmó su mejora con el reciente informe de escrituras del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires. Luego de más de seis años, en julio se registró un aumento significativo en la cantidad total de escrituras de compraventa de inmuebles.
En el séptimo mes de 2024, se efectuaron 4.946 actos, lo que representa una suba del 47,3% respecto al nivel del año anterior. Además, el monto total de las transacciones realizadas ascendió un 450,4%, hasta los 437.194 millones de pesos. Respecto de junio, los actos escalaron un 16,9% (ese mes, se habían realizado 4.232 escrituras).
El monto medio de los actos fue de $88.393.521 (USD 91.878 de acuerdo al tipo de cambio oficial promedio): creció 280,4% en un año en pesos, y en moneda estadounidense subió 10%.
Además, en julio se registraron 225 escrituras formalizadas con hipoteca, lo que representa una suba del 41,5% respecto al mismo mes del año pasado y del 95,6% intermensual.
Esto evidencia que, de manera tímida, empieza a notarse la presencia de los nuevos créditos hipotecarios que ya ofrecen más de 21 bancos y, tal como lo adelantó Infobae, en las inmobiliarias crecieron consultas y operaciones.
El mejor mes en seis años
Según Jorge De Bártolo, presidente del Colegio de Escribanos de la CABA, el mercado inmobiliario está en su mejor momento de los últimos 74 meses. Desde la última parte de 2023, los índices fueron crecientes, a pesar de la incertidumbre electoral.
“Históricamente, durante años electorales había una ligera retracción, pero el último trimestre mostró un empuje significativo. Este crecimiento se debe en parte a que venimos de años con niveles bajos, y cualquier movimiento hace que la comparación suba rápidamente. Cientos de familias aprovecharon los buenos precios del mercado y la percepción de que las propiedades habían llegado a un piso”, dijo a Infobae.
Otro dato que remarca la mejora del mercado inmobiliario es que las casi 5.000 escrituras de julio se posicionan como el mejor registro desde mayo de 2018, cuando se realizaron 5.944 operaciones. De los cuales, unos 1.639 fueron con las hipotecas de los créditos hipotecarios UVA de entonces
Las expectativas con el blanqueo recientemente reglamentado y los nuevos créditos también son altas.
“Ambas vertientes podrían hacer crecer aún más el mercado inmobiliario. Al cierre de julio de 2024, las escrituras de compraventa sumaban alrededor de 25.000, uno de los mejores años recientes. Sin embargo, para compararlo con años realmente buenos, en 2018 había casi 36.000 operaciones en el acumulado de los primeros siete meses; en 2007 casi 40.000 y en 1998 más de 42.000 debido al alto nivel de crédito hipotecario”, amplió De Bártolo.
Expectativas
Las expectativas sobre la disponibilidad y accesibilidad de créditos hipotecarios para los próximos meses son positivas.
“Siempre decimos que el crédito crea mercado. Esto fomenta que una familia que no tenía la totalidad del monto pueda ahora contar con la ayuda de un banco, generando más operaciones. En julio ya se percibía un crecimiento inicial con más de 200 escrituras formalizadas con hipoteca, un salto intermensual interesante. El desafío es agilizar el manejo de las solicitudes para que llegue rápido al escribano y se concrete la operación de manera segura”, sostuvo De Bártolo.
El último registro de una cantidad similar de operaciones se remonta al periodo 2018, cuando se alcanzaban más de 2.300 hipotecas en un solo mes, representando casi un 40% del volumen de compraventas. En contraste, en los últimos años, apenas se superaban las 100 hipotecas mensuales.
Factores de recuperación y voz inmobiliaria
El aumento en la cantidad de escrituras está también influenciado por la eliminación del Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI), un impuesto que gravaba al vendedor en un 1,5 por ciento.
El crecimiento en la cantidad de hipotecas indica que la rueda del crédito se está moviendo, aunque de manera incipiente. Según De Bártolo, “si la tendencia continúa, podría verse un aumento notable en las solicitudes de préstamos y la concreción de escrituras”.
Este incremento también se debe a varios factores, como el hecho de que el valor de las propiedades es el más bajo en los últimos 15 años, lo cual incentivó la compra de inmuebles. Además, la suba en los costos de construcción de nuevas obras hizo que las propiedades usadas sean más competitivas y atractivas.
Agustín Walger, director de Nuevos Emprendimientos de Lepore Propiedades, señaló que cada vez son más las consultas sobre operaciones inmobiliarias con créditos hipotecarios. “Este incremento debería continuar en los próximos meses. Las ventas, especialmente de unidades usadas, son beneficiosas porque generan movimiento económico”.
Explicó que las opciones más comunes son recomprar otra propiedad, invertir en maquinaria o ahorrar el capital. Las primeras dos generan dinamismo en la economía al impulsar la industria de la construcción y otros sectores.
Walger advirtió que la opción menos favorable es que el dinero quede inmovilizado o se exteriorice, “ya que esto no contribuye al movimiento económico”.
También el avance en el sector inmobiliario responde a factores políticos, económicos y de confianza macroeconómica.
Fernando Pérez, director de Coldwell Banker Desiderio Group, destacó que “comienzan a verse más escrituras a través de créditos hipotecarios, gracias a la importante cantidad de bancos que los están ofreciendo, aunque el mecanismo de otorgamiento aún necesita ajustes”.
Para el futuro inmediato, se espera que el blanqueo también influya en las compra ventas. Este marco y un leve incremento en los valores de las propiedades de forma prácticamente generalizada añade más confianza en el segmento.
La demanda aumentó tanto para propiedades usadas como para las nuevas, aunque las usadas llevan la delantera.
“Los tickets más bajos, por debajo de los USD 100.000, son los que tienen más movimiento, y los departamentos de dos ambientes encabezan las preferencias de los compradores”, concluyó Pérez.