Cuando se habla de vistas, se suelen imaginar paisajes naturales, como plazas, jardines o frentes al río o ventanales en torres con panorámicas del cielo y el horizonte. Pero hay quienes prefieren vistas a edificios con valor patrimonial o arquitectónico, que conectan con la historia y la riqueza cultural de Buenos Aires.
Estas propiedades ofrecen una experiencia urbana única, que destaca dentro del mercado inmobiliario premium de la ciudad, conocida por su diversidad arquitectónica y rica historia.
Por ejemplo, un edificio en Luis María Campos, frente al Regimiento de Granaderos a Caballo General San Martín, estilo secesión vienesa, que es Monumento Histórico Nacional, ofrece vistas que cambian con la luz a lo largo del día, brindando un espectáculo único.
Martín Pinus, de Martín Pinus Real Estate, dijo a Infobae que la demanda por estas propiedades ha aumentado y elevado su valor hasta un 30% para compra y alquiler. “Las vistas a edificios históricos ofrecen una experiencia urbana distinta, conectando al residente con la cultura de Buenos Aires”, señaló
Varias personas consideran que las vistas a edificios con un estilo arquitectónico específico enriquecen su vida diaria, inspiran y crean una experiencia inmersiva, como si se viviera en otro lugar, pero estando en casa. En CABA hay construcciones centenarias de sellos europeos que realzan el paisaje urbano, único en el continente.
Pinus destacó que la arquitectura europea no solo embellece las vistas, sino que enriquece la experiencia de vida. En tiempos de home office, tener una vista inspiradora puede mejorar la calidad de vida. Las vistas a edificios históricos despiertan sentimientos de nostalgia y confort, subrayó. En particular, la arquitectura de estilo europeo genera un ambiente elegante y atractivo para quienes aprecian estas vistas.
Gabriela Cosovschi, de Inmuebles Comerciales, destacó el valor histórico de edificios que se convirtieron en tesoros patrimoniales.
“Palacio Estrugamou es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura de la primera mitad del siglo XX. Del mismo modo, el Palacio Los Patos refleja las influencias dominantes en la arquitectura y los gustos de la clase alta porteña. Estos inmuebles no solo poseen un valor estético y arquitectónico, sino que también cuentan historias y mantienen viva la memoria”, indicó a Infobae.
A menudo, lo más buscado es un balcón con vistas a espacios verdes o bulevares, valorados por la apertura que ofrecen, dando una sensación de mayor altura.
“Tener una vista hacia edificios de estilo inglés, francés o italiano puede impactar positivamente en la calidad de vida. Hay estudios que indican que la vista desde tu ventana puede mejorar la concentración y reducir el estrés. El sentido de pertenencia es crucial en los espacios donde residimos”, comentó Francisco Bosch, de Miranda Bosch Real Estate & Art.
Tasación alcista y demanda
Las vistas a edificios emblemáticos son atractivas y demandadas e influyen en la tasación del inmueble. Según el segmento, la vista puede incrementar la tasación de 20 a 30 por ciento. Según Cosovschi, la vista a esos íconos valoriza la propiedad.
Los compradores deben estar preparados para invertir en propiedades que ofrecen no solo una vista privilegiada, sino también características adicionales de lujo y comodidad
Bosch señaló que este público incluye altos ejecutivos, empresarios, inversores internacionales y amantes de la arquitectura e historia que buscan una conexión especial con el patrimonio cultural de Buenos Aires.
Valores
Los precios de departamentos con vistas a edificios emblemáticos varían según la ubicación y características del inmueble. El rango de precios de los departamentos con vistas hacia edificios emblemáticos puede variar mucho, dependiendo de la ubicación exacta, el tamaño del departamento y las características específicas del inmueble.
“En general, los precios pueden comenzar en el rango de los USD 2.800 por metro cuadrado y alcanzar cifras mucho mayores para propiedades que ofrecen vistas panorámicas exclusivas o ubicaciones especialmente codiciadas”, señaló Bosch.
Por ejemplo, frente a “La Colorada” en Palermo, un 3 ambientes cuesta desde USD 310.000, y el alquiler de un 4 ambientes ronda el millón de pesos al mes. Frente al Palacio Estrugamou en Retiro, los precios empiezan en USD 275.000 para compra y $700.000 para alquiler.
En la Isla de Recoleta, un 3 ambientes supera los USD 300.000 y en alquiler, los $680.000 mensuales. En avenidas como Figueroa Alcorta o Del Libertador, los precios suben un 20 por ciento.
Sobre avenidas Figueroa Alcorta o Del Libertador, esos valores se elevan un 20% más para el punto de partida de las cotizaciones.
En otras zonas como Villa Devoto, en donde también hay edificios icónicos, los precios son un 35% más bajos que en comparación con los de Palermo Chico (Barrio Parque) o Belgrano (sobre todo zona Barrancas).
En Palermo, cerca de lo que fue el Zoológico, los Palacios de los Gansos y Los Patos, separados por una cuadra, el precio de comprar un departamento de 3 ambientes cercano a esos íconos arranca desde USD 270.000, y un alquiler de un dos ambientes supera los $450.000 al mes.
Otros factores
Al elegir una propiedad en Buenos Aires, además de las vistas, es esencial considerar otros factores que pueden influir en la decisión de compra. Las prioridades varían según los intereses, necesidades y estilos de vida de cada persona o grupo familiar, o si se trata de un inversor.
Pinus indicó que para quienes buscan hacer del inmueble su hogar, elementos como el estilo, el diseño y la calidad de los materiales pueden ser excluyentes. “También son importantes la cantidad de ambientes y la distribución del espacio en la planta, así como la luminosidad y los amenities que ofrecen servicios adicionales sin moverse del edificio”.
La proximidad a lugares de trabajo, escuelas, y la facilidad de acceso son también variables críticas.
“Además, la atmósfera del barrio, con cafés, oferta gastronómica y actividades culturales y recreativas, puede ser un factor decisivo al elegir un lugar para vivir. Estos factores contribuyen a crear un entorno cómodo y atractivo que mejora la calidad de vida de los residentes”, concluyó Bosch.