El monto operado en el segmento de contado de la plaza mayorista recortó un poco respecto del jueves, a USD 351,1 millones y el Banco Central fue vendedor de USD 25 millones por su intervención cambiaria.
Así, con cuatro ruedas de ventas sobre las cinco operativas, el BCRA terminó con saldo vendedor en la semana de 149 millones de dólares. Las compras del BCRA suman en el inicio de agosto USD 120 millones, para interrumpir una serie de dos meses con saldo negativo por la intervención cambiaria.
En este sentido, el saldo de julio resultó vendedor en USD 181 millones para el Central, tal como ya había ocurrido en junio por 47 millones de dólares. Además, el de julio fue el resultado más negativo para la intervención cambiaria oficial desde octubre de 2023 (-USD 227 millones).
En tanto, las reservas internacionales crecieron este viernes en USD 504 millones, a 27.569 millones de dólares. Fuentes del BCRA indicaron a Infobae que “la suba se debe a la acreditación de las compras de ayer (USD 145 millones), suba de cotizaciones de otros activos que integran reservas y movimientos estacionales de comienzo de mes en cuenta corriente de los bancos”. A lo largo de la semana los activos brutos de la entidad aumentaron en 262 millones de dólares.
El Banco Central acumula compras netas en el mercado de cambios por USD 17.178 millones desde el 11 de diciembre del año pasado, cuando asumió el gobierno de Javier Milei. A la vez, el stock de reservas internacionales mejoró en USD 6.360 millones o 30%, desde los USD 21.209 millones del 7 de diciembre de 2023.
“Siguen las preocupaciones por la dinámica de las reservas, a la espera de que el saldo negativo que dejó julio pueda revertirse en agosto a través de créditos de organismos multilaterales y menores pagos respecto al mes anterior. Ocurre que la expansión del volumen ha venido recientemente acentuando el resultado negativo para el BCRA, toda vez que el blend resta divisas en dicha plaza oficial aunque contribuye a la reducción de la ‘brecha’ cambiaria”, evaluó Gustavo Ber, economista del Estudio Ber.
En cuanto al blanqueo de capitales, el Banco Central informó que “las personas que tienen dólares deteriorados, manchados o de series anteriores tendrán más facilidades para depositarlos en cualquier cuenta en las entidades financieras porque el BCRA se encargará de enviar esos billetes a la Reserva Federal de los Estados Unidos”.
La venta oficial de USD 25 millones en el segmento de contado implicó una contracción monetaria de $23.375 millones a un tipo de cambio mayorista de 935 pesos. Con la vigencia del nuevo esquema monetario anunciado el 13 de julio, el Banco Central mantiene una absorción neta de pesos por sus compraventas en el mercado de cambios, pues lleva esterilizados desde el lunes 15 de julio unos $268.381 millones. Esto es un sobrecumplimiento del estricto del esquema de “emisión cero” al que se comprometió el Gobierno. Además, el Gobierno anunció la esterilización de pesos emitidos por la compra de reservas en el MLC desde el 30 de abril ($2,4 billones).
Los estrategas de UBS Alejo Czerwonko y Pedro Quintanilla-Dieck indicaron a Bloomberg que aunque el Gobierno argentino muestra una “alta disposición a pagar su deuda, la cuestión clave ahora sigue siendo si el país tendrá capacidad de pago”. La intervención cambiaria también es contraria a las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), reduciendo las perspectivas de nuevos fondos, según reportaron los analistas de Fitch Ratings Todd Martinez, Shelly Shetty y Mark Brown.
Los analistas citados por Bloomberg consideraron que la intervención no solo es cara, sino que también puede resultar inútil a largo plazo, dado que se considera que el peso está sobrevaluado y muchos analistas esperan una devaluación del tipo de cambio oficial.
El gobierno de Javier Milei descartó acelerar el ritmo de depreciación del peso, que actualmente es del 2% mensual, así como otra fuerte devaluación como la que realizó en diciembre. En todo caso, el mandatario ha dicho que pretende frenar el ritmo de caída al 1% mensual una vez que la inflación subyacente o mayorista alcance el 2%. Los precios mayoristas subieron un 2,7% en junio.