El ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, se pusieron ayer al frente de un operativo para despejar dudas en el mercado en un intento por alinear la tendencia a la baja de los cotizaciones del dólar con la del riesgo país, que se resiste a anotar claras mejoras.
En una reunión con representantes de las principales agencias de bolsas, o ALYCs como se las denomina, los funcionarios pasaron varios mensajes en tren de asegurar la sostenibilidad del plan y, particularmente, la disponibilidad de dólares para hacer frente a los próximos compromisos.
En ese sentido, Caputo y Bausili aseguraron que en agosto las reservas internacionales acusarán una suba de entre USD 1.200 millones y USD 1600 millones en virtud del ingreso de dólares provenientes de organismos multilaterales y la mejora de la balanza energética. En ese sentido, afirmaron que el Banco Central retomará la dinámica compradora a fin de mes próximo, en cuanto se revierta la cuenta de energía por la que ahora salen más dólares de los que entran.
También volvieron sobre un tema central: los próximos pagos de la deuda. Caputo afirmó, según fuentes que participaron del encuentro, que esos compromisos ya están cubiertos por prácticamente el próximo año y medio. Fue uno de los datos que mayor sorpresa generó entre los convocados, donde la posibilidad de un crédito repo estaba en el radar pero en categoría de posibilidad. De acuerdo a lo que informó el ministro, esa línea, sobre la que no dio mayores detalles, ya está operativa. “Según dijeron, están asegurados los pagos de capital por 1.5 años de toda la deuda pública soberana en dólares, neteada del sector público”, detallaron las fuentes. Es decir, el Gobierno tiene los fondos suficientes para hacer frente al pago de la deuda en manos privadas, un detalle clave y que reduce de manera sustancial el volumen de vencimientos ya que entre 50% y 60% de los títulos están en manos del propio Estado.
De esa manera, estarían cubiertos los pagos de capital de enero 2025, julio 2025 y enero 2026, mientras que se aseguró que los dólares para los pagos de enero de renta, y los de julio de 2025 los comprarán durante el primer semestre de 2025. “Los pagos de capital se consiguieron con un REPO con bancos del exterior y, según dijeron, no está el oro de garantía sino títulos”, confió uno de los presentes.
En cuanto a la dinámica de las reservas, Bausili intentó llevar calma respecto a los contundentes saldos negativos que diariamente viene anotando el Banco Central en el mercado de cambios. Dijo que la cuenta comercial energética se dará vuelta a partir de agosto, y con fuerza a partir de septiembre. Aseguró, en ese sentido, que el déficit del sector energético, estacional de junio-julio, explica el 100% de la caída de las reservas, además del pago de la deuda. Por esa reversión de la balanza energética, esperan un saldo positivo de USD 400 millones en septiembre, mes en el que según Bausili, volverán a comprar reservas.
Los funcionarios también dejaron algunas definiciones clave respecto de la inflación, sobre la que anticiparon que este mes será el registro más bajo en lo que va del año pero que ya en septiembre bajaría a 1% y preparó el terreno para un dato clave: dados los pagos de deuda este mes, el Tesoro sólo registrará superávit primario y no financiero. En agosto, afirmaron, se retomará el resultado positivo.
También el blanqueo, para el que Caputo pidió colaboración a las AlyCs, y la moratoria fiscal -”la AFIP nos informa que viene muy bien, mejor de lo que esperábamos”- fueron parte de la conversación durante el encuentro, del que los invitados salieron con algo de entusiasmo. Estuvieron presentes representantes del Grupo IEB, Allaria, Max Capital, Grupo SBS, Alchemy Valores, PPI, Latin Securities, Cohen Aliados Financieros, Balanz Capital, Adcap Grupo Financiero, Cocos, Bull Market Securities, Consultatio Financial Services, IOL, Inviu, Puente Argentina y Bavsa. Queda ver en las próximas horas cuánto de ese ánimo se traduce a las pantallas del mercado.