Pese a la constante embestida política de Milei, el FMI no desplazará a su negociador oficial para la Argentina

(Desde Washington, DC) Javier Milei transformó a Rodrigo Valdés, director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), en un blanco móvil. El presidente considera que Valdés trabó la posibilidad del Gobierno de obtener un desembolso extra del Fondo por 10.000 millones de dólares, y juró que terminaría con su papel clave en las negociaciones permanentes que atan a la Argentina con el organismo multilateral de crédito.

Pese a la constante impugnación de Milei, el Fondo sostendrá a Valdés como negociador oficial ante la Argentina. “Es importante señalar que la Directora General (por Kristalina Georgieva) tiene plena confianza en Rodrigo Valdez”, señaló Julie Kozack -vocera del FMI- durante su última conferencia de prensa antes de salir de vacaciones.

Esa posición institucional de Georgieva continuaba firme el viernes pasado, cuando Milei cuestionó de nuevo a Valdés. “Avalaba todo el desastre de Massa y a nosotros nos hace los que nos hizo”, aseguró Milei durante un reportaje con Alejandro Fantino.

El programa económico de Luis Caputo sobrecumplió con todas las metas acordadas con el FMI, tras una intensa negociación que evitó la caída en default de la Argentina como consecuencia de los constantes incumplimientos del gobierno de Alberto Fernández.

En este contexto, Milei y su ministro de Economía solicitaron al Fondo un desembolso extraordinario por 10.000 millones de dólares para fortalecer las reservas del Banco Central y abrir el cepo financiero con suficiente respaldo en divisas para enfrentar una eventual corrida en el mercado de cambios.

Georgieva rechazó la propuesta del Presidente y Caputo. La directora gerente del FMI se movió con sutileza florentina, pero Milei asumió que Valdés había jugado en contra y exigió su desplazamiento inmediato.

La presión de Argentina fue ostensible en el staff del FMI y el directorio que controla Estados Unidos junto al Grupo de los 7 (G7). Sin embargo, el Fondo respaldó a Valdés -un economista conservador con prestigio académico- y transmitió con un backchannel que el negociador oficial para Argentina “era intocable”.

Pese a la inside information que maneja la Casa Rosada sobre Valdés, Milei cargó otra vez sobre el director del FMI. Durante una entrevista con Fantino el viernes pasado, Milei dijo:

“Hubo complicidad del jefe de la misión Argentina del FMI con el Gobierno anterior. Rodrigo Valdés tiene mala intención manifiesta. No quiere que le vaya bien a Argentina. Él tiene otra agenda. Nosotros somos sobre cumplidores con todos pero prefirieron apoyar el desastre de Massa. ¿Por qué el FMI le permitía todo a Massa? Nosotros sobrecumplimos todos y todo el tiempo están poniendo peros. Avalaba todo el desastre de Massa y a nosotros nos hace los que nos hizo”.

Y completó, el jefe de Estado:

“Es una decisión del FMI, vaya a saber uno porqué el FMI nos pone a un Foro de San Pablo ahí adentro. Nosotros sobrecumplimos todo y todo el día están poniendo peros. El FMI tenía un conjunto de metas, nosotros pusimos metas más fuertes y sobre cumplimos las nuestras”.

Frente a la posición oficial del FMI, Milei tiene definido cuáles serían sus próximos pasos ante la negociación que Argentina emprenderá en semanas. El acuerdo de Facilidades Extendidas se vence en diciembre, y el Palacio de Hacienda ya diseña una propuesta para los años que vienen, en un contexto de elecciones en Estados Unidos.

“Nosotros seguiremos adelante con el exterminio a la inflación. Si el FMI ayuda o obstaculiza con Rodrigo Valdés, no nos sacará de la mira el objetivo”, comentó Milei en Casa Rosada.

-¿Si por ahora Valdés sigue, igual empezás las negociaciones con el FMI?-, le preguntaron en su despacho.

-Mi desconfianza con Rodrigo Valdés no invalida que pueda continuar la negociación con el FMI.

-¿Imaginas en un escenario post elecciones en Estados Unidos, con la posibilidad del triunfo de Trump, que allí se decida el desplazamiento de Valdés?

-Los eventos exógenos, aún cuando sean positivos, no alteran nuestra forma de dar soluciones a los problemas. Esto es, hay una trayectoria definida; si el contexto ayuda, mejor.

Milei jamás lo dirá en público: cree que si gana Trump logrará el desembolso extra y el desplazamiento de Valdés. Todo en un movimiento de dos etapas que iniciaría en febrero de 2025 y culminaría tres meses más tarde.