La Secretaría de Finanzas, a cargo de Pablo Quirno, informó que “la deuda pública bruta total de la Administración Central se elevó en junio en USD 6.831 millones, a USD 442.505 millones, de los cuales USD 440.062 millones se encuentra en situación de pago normal”, significó un aumento de 1,57% respecto del saldo de mayo.
La variación se explica por sendos aumentos de la deuda en moneda extranjera en USD 387 millones y de la asumida en moneda local por el equivalente de USD 6.453 millones, destaca el comunicado oficial.
Con semejante incremento, el stock de deuda bruta total de la Administración Central al cierre del sexto mes de 2024 fue USD 17.211 millones superior al anterior récord histórico de deuda pública total, equivalente a USD 425.294 millones, que había alcanzado en noviembre de 2023, último mes completo de gestión del gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, con el entonces candidato presidencial, Sergio Massa, al frente del Ministerio de Economía.
Por el contrario, se contrajo la denominada “deuda cuasi fiscal”, como es la del Banco Central con la colocación de instrumentos de regulación monetaria (Letras y Pases), en el equivalente a USD 15.213 millones -promedio del mes, al tipo de cambio oficial-, pese a mantener la entidad una tasa de interés de política monetaria muy superior al del crawling peg desde enero, porque Economía comenzó a absorber ese pasivo remunerado de la entidad colocado a un día de plazo con la emisión de deuda voluntaria en bancos (Letras del Tesoro entre 15 y 45 días de plazo), bajó al equivalente de USD 20.101 millones.
Se contrajo la denominada “deuda cuasi fiscal”, como es la del Banco Central con la colocación de instrumentos de regulación monetaria (Letras y Pases)
De ahí que, si a las obligaciones de la Administración Central se le agregan las del BCRA, y se descuentan los compromisos de la Tesorería con la entidad (Adelantos Transitorios que en el mes bajaron en USD 83 millones, al equivalente de USD 4.487 millones) surge un saldo de deuda neta conjunto de USD 458.119 millones, y una disminución en USD 8.299 millones.
Esta deuda consolidada resulta inferior a la heredada por la presidencia de Javier Milei del gobierno anterior en el equivalente de USD 18.930 millones.
La política de crawling-peg (minidevaluación diaria), con una regla fija de 2% por mes desde enero, mientras la tasa de inflación que gravita sobre los bonos ajustables por CER, pese a la desaceleración sostenida, se mantuvo muy por arriba, volvió a provocar que en junio las “diferencias de cambio” se convirtieran en un fuerte impulsor de los compromisos de la Administración Central equivalente en dólares, con casi USD 6.000 millones.
Flujo de créditos y pagos
Así, las operaciones de deuda de la Administración Central registraron “Financiamiento, canjes y emisiones” por USD 7.987 millones y de “Amortizaciones, canjes y cancelaciones” por USD 7.133 millones.
De ahí que para muchos economistas el atraso cambiario mes a mes respecto de la tasa de inflación, no sólo es una amenaza para la competitividad cambiaria de las exportaciones y de las expectativas de mercado, sino también para el recorrido de la deuda pública, pese a los esfuerzos de mantenerla contenida a partir del logro del superávit de las finanzas públicas y la emisión monetaria cero.
Aclara Finanzas que “la deuda pagadera en moneda extranjera incluye dólar estadounidense, euro, DEG, yenes y otras divisas, y la emitida en dólares, pero cuyo pago de capital e interés es en pesos, se clasifica como deuda en moneda local”.
El saldo de deuda con organismos internacionales subió en USD 440 millones, desagregado en USD 530 millones con el FMI y reducción en USD 90 millones con el resto (Banco Mundial, BID, CAF, entre otros), principalmente por el cambio en la valuación de las monedas.
El informe metodológico de la Secretaría de Finanzas aclara que “por recomendaciones de manuales estadísticos y a partir de definiciones internacionales, utiliza el dólar oficial mayorista como unidad de cuenta para dar comparabilidad y estandarizar las estadísticas”.
En perspectiva
El equipo económico deberá afrontar mañana el último pago de amortización del programa vigente con el FMI que vence en noviembre de 2024.
El Gobierno anunció que girará al exterior USD 1.528 millones para pagar a bonistas los intereses que vencen en enero de 2025
Por otra parte, el Gobierno anunció que girará al exterior USD 1.528 millones para pagar a bonistas los intereses que vencen en enero de 2025. Para eso, el Ministerio de Economía informó el fin de semana que procederá a comprarle al Banco Central de la República Argentina los dólares que necesite para hacer frente al pago total de intereses de los bonos Globales y Bonares, de modo de contribuir a despejar las dudas que se despertaron tras los anuncios del sábado.
Esta operación, anticipada por el presidente Javier Milei en la red social X, se dijo se concretará con el superávit fiscal financiero acumulado desde el inicio del año, neto de cancelaciones anteriores.
Y el 31 de julio tendrá que cancelar USD 167 millones del primer vencimiento del Bopreal por la deuda heredada con importadores.