La inflación está desacelerando, pero los precios siguen avanzando y cada vez se debe ganar más para no caer bajo la línea de la pobreza. Según un informe elaborado por la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires (CABA), una familia tipo debe ganar $890.590 por mes para cubrir el 100% de sus necesidades básicas y no caer bajo la línea de la pobreza. El valor medido por el organismo, que corresponde a la Canasta Básica Total (CBT) del mes de junio, muestra un incremento de $30.490 (3,5% de aumento) en relación al mes anterior.
Asimismo, el estudio indica que la misma familia debe tener un ingreso mensual de $496.898 para cubrir el 100% de sus necesidades alimenticias (Canasta Básica Alimentaria). Los hogares con ganancias mensuales inferiores a ese valor son técnicamente consideradas “indigentes”. En ese caso, se registró una suba de $10.830 en comparación al mes de mayo.
Es importante aclarar que el grupo familiar que se toma como referencia para determinar la CBT y la CBA está conformada por una pareja compuesta por una mujer y un varón de 35 años de edad, ambos económicamente activos y propietarios de la vivienda, con dos hijos varones de 9 y 6 años.
Si en cambio se evalúa la situación de otros grupos familiares, las cuentas son lógicamente diferentes. Una pareja de adultos mayores, ambos económicamente inactivos, deben alcanzar un ingreso mensual de $250.893 para no caer en la indigencia y una suma de $442.857 para no caer en la pobreza.
Es menor aún la exigencia para un hombre adulto que vive solo, es económicamente activo y es dueño de su hogar. En ese caso, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) es de $162.917 y la Canasta Básica Total alcanza los $314.801.
El organismo de estadísticas considera también el caso de una pareja jóven sin hijos, con y sin vivienda propia. En ambos casos la CBA alcanza un valor de $301.397, pero la CBT difiere de acuerdo a si la pareja es propietaria o no. Si son propietarios, la CBT alcanza un monto de $511.743, pero si deben alquilar, la CBT asciende a $597.175, de acuerdo a la medición oficial.
Cómo ser de clase media
Como se mencionó, los hogares con ingresos inferiores a $890.589 son considerados pobres, pero tener un salario superior a ese monto no garantiza ser ser de clase media. Para eso, se debe ganar bastante más.
De acuerdo a las mediciones de la Dirección de Estadística, las familias que ganan entre $890.589 y $1.112.737 son consideradas “no pobres vulnerables”. Por encima de ese nivel y hasta $1.390.921, pasan a ser del “sector medio frágil”. Recién a partir de $1.390.921 y hasta los $4.450.950,03 se es de clase media en la Ciudad de Buenos Aires.
En tanto, los hogares que tienen ingresos por encima de $4.450.950 pertenecen al “sector acomodado”.
Ahora bien, así como existen diferentes parámetros de medición de la CBT y la CBA, también la línea de la “clase media” se mueve de acuerdo al grupo familiar. Según el organismo de estadísticas, una pareja de adultos mayores, propietarios de su propia vivienda, necesitan ganar $576.603 para pertenecer al “sector medio frágil”. La suma es menor para el hombre adulto solo ($374.186) y mayor para la pareja de adultos jóvenes ($646.179 con vivienda y $802.763 sin vivienda propia).
Como queda claro en los números, en términos de vivienda, la situación se vuelve más complicada para quienes deben alquilar. La carga del alquiler sobre el presupuesto familiar incrementa significativamente el costo de vida, afectando a los ingresos necesarios para no caer en la pobreza. Además, la inflación ha tenido un impacto desigual en diferentes sectores, con productos y servicios esenciales aumentando a tasas más altas que el promedio. Esto pone una presión adicional sobre las familias de ingresos bajos y medios, que deben destinar una mayor parte de su presupuesto a estos gastos ineludibles. En consecuencia, la brecha entre los ingresos y el costo de vida continúa ampliándose.