El director del Centro para la Libertad y la Prosperidad Global del Instituto Cato, Ian Vásquez, elogió en forma categórica al presidente Javier Milei por el cambio de rumbo en la Argentina, aunque sugirió que dolarice la economía de inmediato.
En una entrevista desde Washington DC con Infobae, Vásquez -cuenta con una maestría de la Escuela de Estudios Internacionales Avanzados de Johns Hopkins University- aseguró que el presidente debe eliminar de inmediato el Banco Central para que en el futuro no haya “populismo fiscal”. Además, cuestionó al Fondo Monetario Internacional (FMI) por actuar como rescatista de los países que no siguen políticas prudentes.
— ¿Cuál es su evaluación sobre los primeros siete meses de gobierno de Milei?
— Bueno, el balance es muy positivo, es impresionante lo que se ha logrado a pesar de 80 años de estatismo corporativismo y el peso del peronismo sobre el país que ha sido exactamente el problema con todos los grupos de intereses que se han formado durante esas décadas. Y esto sin tener una mayoría en el Congreso. Es formidable lo que se ha podido hacer con todo el dolor que implica y manteniendo una aprobación alta.
— En particular, ¿qué medidas fueron más positivas y negativas?
— Lo más importante es el cambio de paradigma que ha propuesto el Presidente y por lo cual ha obtenido un mandato popular, es decir, reavivar la tradición liberal que hizo de Argentina un país rico hace 100 años. Eso es un mensaje absolutamente novedoso en la arena política para Argentina; Milei no está simplemente proponiendo cambiar algunas políticas por aquí y por allá, sino deshacer el problema principal de Argentina, que es el sistema corporativista.
“Lo más importante es el cambio de paradigma que ha propuesto el Presidente y por lo cual ha obtenido un mandato popular, es decir, reavivar la tradición liberal que hizo de Argentina un país rico hace 100 años”
De lograrlo, soy optimista; nadie dijo que esto iba a ser una tarea fácil, quizás es muy idealista decir que va a lograr toda su agenda, pero está logrando cambios políticos, económicos y culturales.
La gente reconoce cada vez más qué papel juega la libertad para salir del pozo en que se ha encontrado el país por tantas décadas y eso es un logro enorme, incluso si no se puede pueden realizar todos los puntos en la agenda del presidente.
— ¿Tienen relevancia estos logros?
— Sí, el Presidente se ha convertido en un referente y un líder internacional, no solamente porque está proponiendo reformas liberales para Argentina, sino que está proponiendo que estas ideas sean valores universales que se pueden aplicar en el resto del mundo. Sobre todo en momentos en que tantos países en Occidente y en otras partes del mundo están marchando en la dirección contraria y eso es preocupante.
— ¿Cree que Milei debería avanzar en la dolarización que prometió en la campaña electoral?
— Sí, se puede empezar ahora y lo más importante en esa agenda es eliminar el Banco Central, porque ha sido ha sido la institución que ha fomentado los grandes problemas en Argentina porque ha financiado la irresponsabilidad política que caracteriza los últimos 80 años del país.
“El presidente Milei se ha convertido en un referente y un líder internacional, no solamente porque está proponiendo reformas liberales para Argentina, sino que está proponiendo que estas ideas sean valores universales”
— ¿No es prioritario ordenar en forma completa la política fiscal y monetaria antes de dolarizar?
— Es importante, pero sabemos que los peronistas siguen en pie, pueden llegar al poder y usar esa arma, como lo han usado en el pasado.
— ¿Dolarizar podría ser un “atajo”, como expresaron el FMI y varios economistas, en lugar de focalizarse en el ajuste fiscal y monetario? ¿No le saca herramientas al país para enfrentar shocks externos?
— Es verdad que el FMI no apoya esto, porque no es una institución liberal, sino que promueve aumentos de impuestos y otras políticas que con las cuales los liberales no estamos de acuerdo. Creo que el problema de los años 90 con la convertibilidad fue justamente que no se disciplinó el gasto público, ni tuvo credibilidad como una Caja de Conversión ortodoxa.
Por lo tanto, mantuvo los atributos de un banco central y es exactamente y así vulneró las reglas de ese sistema. Quienes abogan por la dolarización no dicen que va a resolver todos los problemas, ni siquiera la indisciplina fiscal, pero coloca ciertos límites al populismo a la irresponsabilidad fiscal como fue el caso, por ejemplo, de Ecuador. Es un país dolarizado que, bajo el populismo de Rafael Correa aumentó su gasto, pero hasta cierto límite; si no fuera por la dolarización estoy seguro de que Ecuador se habría transformado en Venezuela.
Por lo tanto, aunque no soluciona todos los problemas, la dolarización le pone límites al populismo fiscal. Y esto es importante en un país como Argentina, que tiene una historia complicada con el Fondo Monetario porque ha dependido excesivamente en toda su historia de sus rescates.
También hay que reconocer que el FMI ha dependido de su relación con la Argentina, un vínculo enfermizo, porque durante décadas ha financiado una y otra vez al país, inclusive a gobiernos con malas políticas aun cuando afirma que está tratando de disciplinarlos.
“El Fondo es una agencia gubernamental que tiene que gastar dinero, tienen incentivos para eso y los que toman préstamos de ese organismo saben que tienen que gastar dinero”
El Fondo es una agencia gubernamental que tiene que gastar dinero, tienen incentivos para eso y los que toman préstamos de ese organismo saben que tienen que gastar dinero. Por lo tanto, sus condiciones no son creíbles y se vulneran una y otra vez. Hay que acordarse que hace 20 años comenzaron los grandes rescates financieros y Argentina fue parte de esa corriente, porque el FMI decía que sino le prestaba habría una crisis, pero aún con el préstamo la Argentina entró en una gran crisis.
— ¿Cómo se puede cambia el carácter de este vínculo?
— Si el gobierno de Milei tiene credibilidad fiscal y hace un ajuste más ortodoxo que lo que pide el Fondo Monetario, y al anunciar la dolarización no logra apoyo del FMI, no importa, porque luego va a tener que apoyarla cuando sea exitosa.
— Dado este diagnóstico, ¿el Gobierno debería pedirle fondos frescos al FMI?
— No lo sé, porque, repito, gran parte de los problemas de la Argentina y de otros países es que siempre va a estar “papá FMI” para salir al rescate y eso crea un riesgo moral.
— ¿Por qué los inversores financieros mantienen su escepticismo pese al cambio de rumbo en la Argentina?
— Milei tiene claros cuáles son los problemas y cómo resolverlos, el problema es cómo lograr políticamente esa transformación que necesita Argentina. Creo que el resto del mundo y sobre todo los inversionistas de Wall Street están observando eso; si se elimina el Banco Central se generaría un gran shock de confianza.
— ¿Mejorarían las perspectivas bilaterales si en Estados Unidos gana Donald Trump?
— Las relaciones probablemente mejorarían, pero creo que ni los demócratas ni los republicanos creen en el libre comercio desgraciadamente. De hecho, Trump ya propuso imponer aranceles del 10% al resto del mundo, lo cual va a afectar a la economía mundial.
“Las relaciones probablemente mejorarían entre Argentina y Estados Unidos si ganara Trump, pero ni los demócratas ni los republicanos creen en el libre comercio desgraciadamente”
— En el Gobierno y varios economistas afirman que sin dólares no se puede dolarizar porque el tipo de cambio se podría disparar ¿Qué piensa?
— Creo que sería al revés; por supuesto que existe un riesgo, como en cualquier política que uno adopte. En el balance, la dolarización es la opción que minimiza los riesgos para Argentina. Cuando Ecuador la anunció, los dólares no se fueron, llegaron al país. Sería óptimo acompañarlo con una apertura de la economía, eliminar el cepo y dejar un libre flujo de capitales.
Creo que este gobierno tiene suficiente credibilidad para que el tipo de cambio encuentre su nivel de mercado y reciba dólares. Por supuesto que antes hay que resolver algunos temas importantes, como el de los puts.
-El Gobierno ahora dice que impulsará una competencia de monedas, como Perú o Uruguay…
-La Argentina no es Perú o Uruguay; tiene un historial y una reputación completamente diferentes y ha tenido un sistema político corporativista. Por lo tanto la confianza que va a haber en Argentina va a ser baja por largo tiempo. Hay que aclarar que gran parte del éxito de Perú se debe a su banquero central, Julio Velarde, quien está en funciones desde 2005 y encima entiende y apoya la economía liberal. De hecho, Perú va a tener un problema grande el día en que él se vaya.
— ¿Qué consecuencias tendría para el liberalismo global si Milei no tiene éxito en sus reformas?
— Esperemos que le vaya bien, pero claro, el éxito de Milei no solamente es importante para Argentina sino también para el resto del mundo.
— ¿Qué opina del estilo tan particular del Presidente?
— Uno puede diferir en algunas cosas respecto de su estilo, pero él es exactamente la persona que necesita Argentina porque no es un político normal; es una persona que realmente cree que Argentina va a lograr un cambio profundo y sabe lo que el país necesita. Eso le otorga una enorme credibilidad que otro tipo de persona no podría lograr.