El economista y miembro del grupo de asesores del presidente Javier Milei, Fausto Spotorno, aseguró que “ahora los errores se los van a facturar al gobierno” y que la decisión del ministro de Economía, Luis Caputo, de pase de deuda del Banco Central al Tesoro fue “un mal anuncio de una medida que no está mal”.
“El gobierno salió con un anuncio un viernes a la noche, en el mercado se esperaba algo más. Salió con un anuncio muy técnico, la medida no está mal, está correcta, pero un anuncio muy técnico sobre un canje del tipo de deuda de los bancos, y el resultado fue que caían las acciones de los bancos, sobre todo. Un muy mal anuncio, de una medida que no está mal, pero podría haberse hecho con un comunicado del Banco Central, o ni siquiera comunicado”, aseguró en diálogo con Radio Rivadavia.
“El del viernes fue un muy mal anuncio, de una medida que no está mal, pero podría haberse hecho con un comunicado del Banco Central, o ni siquiera comunicado”
Por otra parte, señaló que “hay una seria tensión sobre el tema del cepo cambiario y lo dijo el propio ministro, él lo dijo como que hay una ansiedad, lo cual es cierto porque hay muchas empresas que tienen que planificar su vida. Por otro lado, también es cierto que el Gobierno dice, mirá, ‘yo no tengo un Banco Central todavía preparado para salir del cepo’, tiene reservas netas en cero y todavía tiene este problema de la deuda que se trata de resolver con esta medida, por eso digo que la medida no está mal”.
“Mientras las reservas subían y la brecha se achicaba, el mercado decía es más fácil salir del cepo. En esas condiciones se facilita la salida del cepo. Y lo que está pasando desde mediados de mayo es que la brecha no se está achicando y las reservas están creciendo muy poquitito o nada, entonces ahí es donde el mercado se empieza a poner más nervioso”, agregó.
“Esa tensión entre el mercado, el sector privado y el gobierno empieza a marcarse cuando los números no parecen apuntar a salir del cepo”
“Me parece que esa tensión entre el mercado, el sector privado y el gobierno empieza a marcarse cuando los números no parecen apuntar a salir del cepo. Está claro que el programa económico, a partir de acá, entra en una etapa mucho más delicada de lo que fue el primer semestre porque en el primer semestre, como siempre pasa en cualquier gobierno que inicia, se le puede echar la culpa al gobierno anterior. Entonces, puede corregir, hacer grandes correcciones violentas y salir bien parado”, consideró Spotorno.
“Esto del viernes te demuestra que ahora los errores se los van a facturar al gobierno. Siempre pasó en toda la historia económica argentina que en los primeros dos o tres meses las culpas son del gobierno anterior y ahora te los pueden empezar a facturar a vos”, agregó.
Asimismo, el economista de la consultora Orlando Ferreres se refirió a la actividad económica: “Los datos venían siendo menos malos desde marzo para acá. Lo que nosotros estábamos entendiendo que estaba pasando con la actividad económica es que había llegado un piso en marzo y desde ese momento estaba reputando. Después de marzo ya la economía parecía que no seguía cayendo, pero todavía no se veía recuperación. Y este dato de junio parece indicar que va más o menos por el mismo camino la cosa. Yo creo que la recuperación, pensándolo como rebote, no como crecimiento económico, la vamos a empezar a ver en el tercer trimestre, si es que esta recesión sigue el camino más o menos de las últimas recesiones que ha tenido Argentina”.
“Por ahora se está viendo que dejó de caer la actividad económica y posiblemente hay algunos datos positivos en algunos sectores, vemos que cada vez hay más sectores que están mostrando alguna recuperación. Eso es una buena señal, pero todavía estamos en el piso de la actividad económica. No se nota todavía un rebote, pero sí que dejó de caer, lo cual es un anticipo de que posiblemente en algún momento empiece la recuperación”, agregó.
Al respecto, el informe de la consultora mostró un desplome industrial de 9,8% interanual en mayo. “La actividad industrial retrocedió en mayo, aunque no volvió a tocar el piso que había encontrado en marzo. Así, la serie desestacionalizada marcó una baja de 1,0% mensual, quedando 3,1% por debajo del nivel que tenía en diciembre. En la comparación anual, la caída fue de 9,8%, donde las mayores contracciones se produjeron en maquinaria y equipo (-23,8%), Minerales no metálicos (-25,8%), y metales básicos (-33,5%)”, indicó OJF. En los primeros cinco meses del año la contracción alcanzó el 9,2% en comparación con enero-mayo de 2023.