A poco más de dos meses del último halving, consistente en la reducción a la mitad de la recompensa por su “acuñación” por parte de los criptomineros, el Bitcoin luce consolidado como especie cripto mundial. El último viernes cotizaba a poco menos de USD 61.000 por unidad, sumando una capitalización de USD 1,2 billones, poco más de 53% del valor global de las criptomonedas.
“Bitcoin es el emblema de una revolución tecnológica, el mayor y mejor exponente de un paradigma nuevo en el manejo del dinero, la información online y las relaciones entre personas en un mundo digitalizado. Además, es un activo de escala global: supera en capitalización a la plata y está solamente detrás del oro, Microsoft, Apple, Nvidia, Alphabet (la dueña de Google), Saudi Aramco y Amazon”, dijo Sebastián Serrano, cofundador, en 2013, de Ripio, una plataforma cripto con billetera, bolsa de operaciones, sistema de trading de bitcoins y un brazo corporativo de atención a empresas e inversores de alto poder adquisitivo, que en 2021 sumó como inversores a Marcos Galperin, cofundador de Mercado Libre, y Martín Migoya, cofundador y CEO de Globant.
Los halvings, explicó Serrano, reducen drásticamente la tasa de emisión de Bitcoins, cuya única fuente es la criptominería, mediante el pago del incentivo por cada bloque minado en su blockchain o cadena de bloques. Esa recompensa fue inicialmente de 50 BTC por operación y se reduce cada 210.000 operaciones: pasó a 25 BTC en 2012, a 12,5 en 2016, a 6,25 en 2020, y a 3,125 a fin de abril último.
A la mitad
“Con el mismo esfuerzo, tiempo e inversión, desde el 20 de abril se consigue sólo la mitad de nuevos BTC que antes. Esto genera una crisis en la oferta, que en este ciclo se cruza además con una de demanda derivada de la aprobación de los ETF spot de Bitcoin, que desde que están operativos están ingresando grandes capitales de empresas y particulares que deseaban exposición al BTC sin tener que custodiar cripto”, contó a Infobae Serrano.
La volatilidad no es una falla, sino una característica del BTC, que no tiene autoridad central, empresas ni gobiernos detrás (Serrano)
Halving y ETF (fondos cotizados en Bolsa) fueron y seguirán siendo clave. “Si se mira la experiencia previa de los halvings de 2016 y 2020, los movimientos de precio interesantes para el Bitcoin empiezan a darse entre 50 y 100 días después de cada halving, plazo que correspondería al invierno argentino, y mantienen la tendencia alcista, aunque con distintas intensidades, cerca de un año”, agregó el CEO de Ripio.
“La volatilidad no es una falla, sino una característica del BTC, que no tiene autoridad central, empresas ni gobiernos detrás”, explicó Serrano. “Es una blockchain distribuida donde los particulares pueden transferir valor mediante una criptomoneda que se negocia libremente, a un precio variable que se forma en base a oferta y demanda y que a diferencia de otros valores, bienes activos o monedas, tiene dos parámetros que lo regulan y contienen: la emisión por criptominería y el hecho de que el suministro máximo ya está determinado; serán 21 millones, de los cuales casi 94% (poco más de 19,7 millones) ya fue minado”.
Cinco semanas antes del último halving, el 14 de marzo, Bitcoin alcanzó un valor de 73.700 dólares. El 10 de enero había tenido lugar la aprobación de los ETF, o fondos cotizados en Bolsa al contado de Bitcoin. “Entre que la SEC dio luz verde a los ETF y Bitcoin tuvo su cuarto halving pasaron exactamente 100 días, que marcaron uno de los momentos más calientes de sus 15 años de historia”, dijo Serrano.
Madurez
La aprobación de los ETF fue una suerte de DNI emitido por los reguladores, un reconocimiento en el mercado financiero global. ¿Es acaso un signo de madurez? Si así fuera, ¿no debería reducir la volatilidad?, le preguntó Infobae.
“La aprobación de los ETF habla ya no solo de la madurez del ecosistema cripto sino también de que las finanzas tradicionales aún pueden dar pasos adelante. No es descabellado plantear que los ETF spot de Bitcoin son una de las mayores innovaciones en Wall Street en las últimas décadas. Quien compra un share en un ETF no está comprando directamente bitcoin sino obteniendo exposición a los cambios de precio de la cripto mediante un instrumento financiero ofrecido por un fondo que es el comprador y sí almacena bitcoins. Los propios fondos deben ampliar sus tenencias si quieren ofrecer mayor volumen”, respondió Serrano.
“Que se hayan aprobado los ETF -prosiguió- demuestra madurez, agrega visibilidad y subraya confiabilidad en Bitcoin. Y todo eso termina gatillando la compra directa de bitcoin, porque son eventos que reducen el FUD (sigla en inglés de Miedo, Inseguridad y Dudas) y alimentan en todo caso el FOMO (sigla en inglés que refiere el temor de “quedarse afuera”), pero sobre todo -y más allá de siglas- porque mucha gente a partir de los ETF pensó: ‘Ahora sí voy a comprar Bitcoin’, y se bajó su primera wallet (billetera digital). Fue un espaldarazo y sus resultados se van a seguir desplegando todo este ciclo y los posteriores”.
El impacto sobre los mineros de bitcoin es diferente. “Los halvings tienen muchos puntos de impacto y no todos son inmediatos. A gran escala, generan una reducción drástica de la oferta de nuevos bitcoins”, dijo el especialista.
Los halvings tienen muchos puntos de impacto y no todos son inmediatos. A gran escala, generan una reducción drástica de la oferta de nuevos bitcoins (Agustín)
Para los mineros el efecto fue adverso. Por el mismo trabajo, tiempo, costo e inversión, el día después del halving pasan a tener una recompensa la mitad de valiosa, de 6,25 3,125 bitcoins.
Como se suele decir, “los números no mienten. Y en paralelo el minero argentino carga con el aumento constante del costo energético para operar, que además muchas veces no va siendo progresivo, sino que de un mes a otro puede tener aumentos que en los últimos meses han sido en algunos casos devastadores, por encima del 400 o 500% de una factura a la siguiente. Sería necio negar que esta combinación hace que luego del halving y en función de qué pase con las tarifas, alguna parte de los mineros argentinos decidan abandonar la actividad, mudarse a otras redes, revender sus equipos o simplemente tomarse una pausa”, reconoció Serrano.
De hecho, el hashprice (término acuñado por Luxor, una página de seguimiento de la criptominería global), cayó para los mineros de bitcoin a un mínimo histórico. Se trata del valor esperado de lo que puede ganar un minero de bitcoin según la capacidad de procesamiento de sus equipos, cuyo despliegue exige a su vez un alto consumo de energía. En la Argentina, la pérdida de subsidios y el aumento del costo de la energía, sumado a la reducción de la recompensa, dejó a muchos mineros fuera de juego.
“Las economics de minar están en el peor momento de la historia. Nos llama todos los días gente para vendernos equipos de minado. Los que antes estaban a USD 3.000 hoy están a 300″, dijo a Tomás Ocampo, CEO de Unblock, empresa que mina bitcoins y hace procesamiento de inteligencia artificial al lado de equipos móviles de energía que monta en operaciones remotas y alimenta con gas asociado a extracción de petróleo.
Las economics de minar están en el peor momento de la historia (Ocampo)
A las petroleras les sirve para disminuir o eliminar el venteo y quema (flaring) de gas a la atmósfera y mejorar su reputación ambiental, y a Unblock para disponer de energía barata. Ocampo precisó a Infobae que el precio de los equipos de minado de cayó a hasta 3 dólares por TH/s (Terahash por segundo, una medida de capacidad de procesamiento) para equipos de 90 TH/s.
Momento darwiniano
Para la criptominería, es un momento darwiniano. “Está a la vista que, en los tres halvings anteriores, los mineros que tuvieron la capacidad de seguir acumulando pudieron capitalizar las fuertes subas que se dieron en los tres ciclos, que en general arrancaron unos pocos meses después del halving y duraron cerca de un año, en promedio”, dijo Serrano.
Hay que tener en cuenta, destacó el experto, que 6.25 bitcoins a un precio de USD 60.000 son USD 375.000, pero 3,125 bitcoin a un precio de USD 120.000 también son 375.000 dólares.
Así las cosas, los mineros que confíen en el desarrollo del precio del bitcoin en este ciclo y puedan asumir en lo inmediato la reducción de la recompensa y el aumento del costo energético, apuntan a seguir acumulando “porque más tarde o más temprano, en estos 15 años Bitcoin ha terminado superando el halving cumpliendo con una estadística espectacular, que es que llega a cada halving teniendo un dígito más: USD 12 en 2012, subió a USD 650 en 2016, se elevó a USD 8.800 en 2020 y a USD 64.000 en 2024″, detalló Sebastián Serrano.
Los precios futuros del bitcoin son, por supuesto, una cuestión abierta. Mientras tanto, a la criptominería le surgió un competidor de peso por la energía: la inteligencia artificial.
En estos 15 años Bitcoin ha cumplido una estadística espectacular, que es llegar a cada halving teniendo un dígito más: USD 12 en 2012, subió a USD 650 en 2016, a USD 8.800 en 2020 y a USD 64.000 en 2024 (Serrano)
“Evidentemente hay dos fuerzas de demanda de energía muy grandes, pero en todo caso si hay una competencia, parece estar mejor resuelta por las criptomonedas, que han ido virando a métodos de minado más ecológicos o han mantenido sistemas intensivos pero alimentados con energías verdes. Mientras que el grueso del consumo de las IA es de electricidad proveniente de combustibles fósiles. De esto hay estudios comparativos hechos por el MIT que son contundentes. Y si bien las empresas más grandes detrás de los modelos de IA están buscando implementar energía nuclear, falta para eso”, comentó Serrano.
Eso no quita, agregó, que haya una competencia entre la IA y el BTC por otras vías. “Muchos proyectos de IA están tokenizados, y esos tokens compiten por atención en el mercado cripto, sin dudas. Pero también pueden ser tecnologías complementarias. Es muy interesante la tensión o colaboración entre estos dos pilares de la tecnología de nuestros tiempos”.
Además, el experto concluyó sobre esa competencia, “mientras Bitcoin ofrece una alternativa electrónica y descentralizada al uso de dinero para transferir valor, con una red distribuida de nodos y un libro contable público, las IA necesitan del híper concentración de datos para poder ser funcionales”.
Por cierto, la etapa previa al “halving” de abril fue muy agitada. El BTC había comenzado 2023 cotizando a USD 16.600, pero hacia marzo de 2024, un mes antes del halving, había aumentado 350% para alcanzar un nuevo récord: USD 74.000, a lo que siguieron –dice Serrano- “tres meses de correcciones, oscilaciones y lateralizaciones -halving de por medio- en los que el BTC viene operando en la franja de 60.000 a 70.000 dólares”.
El mínimo del período fue de USD 58.250 el primero de mayo y picos post halving cercanos a los USD 71.500 en varias ocasiones. “Para todo este período de 60 días, la variación entre los precios más bajos y más altos rondó el 20%. Son cambios considerables, pero se dan en un panorama de soportes y resistencias que se han mantenido en valores “estables”; durante ya 9 o 10 semanas, acotó Serrano.
— ¿Por lo visto hasta hoy, a cuál post-halving podría terminar pareciéndose más el actual?, le preguntó Infobae a Serrano.
— Este halving es distinto a los anteriores, y hay consenso en que los ETF tuvieron mucho que ver con eso. El mercado viene lateralizando, con Bitcoin testeando soportes y resistencias en una zona de un 10% / 15% para arriba o para abajo de los USD 65.000. En los halvings anteriores, los despegues empezaron a darse dos, tres o cuatro meses después; el comportamiento por ahora parecería subrayar esa coincidencia en el ciclo de este cuarto halving también.
La impresión que tengo es que este ciclo va a ser muy fuerte; hace un año y medio que el mercado y la industria vienen recuperándose y alcanzando nuevos récords (Serrano)
“La impresión que tengo es que este ciclo va a ser muy fuerte; hace un año y medio que el mercado y la industria vienen recuperándose y alcanzando nuevos récords. Hay quienes piensan que post halving seguirá siendo un ciclo muy intenso, aunque tal vez más corto que otros (que tuvieron períodos bullish de hasta año y medio después), mientras que otros hablan de un súper ciclo que podría durar muchísimo. Lo iremos viendo. Es una de las características más excitantes de este ecosistema: la historia se escribe día a día”, respondió Serrano.
Y concluyó: “Tenemos la experiencia de halvings anteriores, pero nunca se puede saber con ciencia cierta qué pasará y cómo reaccionará un mercado que ya tiene un alcance de cientos de millones de personas y que ahora también cuenta con los ETF spot de Bitcoin y Ethereum”.