La recesión actual es una de las más grandes de la historia en términos sectoriales, seguida por la de 1975-1978, repartiéndose las pérdidas de forma equitativa, según un estudio del Instituto Interdisciplinario de Políticas Públicas de la Universidad de Buenos Aires y el Conicet (IIEP UBA-Conicet).
“Al igual que en el período 1975-1978, la propagación de la recesión es de las más altas de la historia. Este es un evento moderado y simétrico entre los distintos sectores productivos”, señaló Damián Pierri, investigador y economista del instituto.
Sucede que el IIEP cuenta con una apertura sectorial del producto desde 1950 y lo que observó Pierri es que, similarmente a la del período 1975-1978, la actual crisis es la más uniforme entre sectores y el ritmo al que caen es parejo. “Si bien hay recesiones más grandes como la de 2020 o 2002, esta recesión es la más grande en términos de difusión, en el sentido de que todos los sectores están igualmente afectados”, aseguró el investigador.
“La anatomía del ajuste se parece y las consecuencias son similares. Al igual que en 1975-1978, vemos un ajuste fiscal y monetario junto con apreciación del tipo de cambio. Los instrumentos de política económica van en la misma dirección. La diferencia es el lapso de tiempo (y el régimen democrático)”, dijo el especialista y recordó que en dicho periodo el déficit fiscal bajó 9 puntos del PBI, el M2 (dinero en circulación y depósitos) cayó 4 puntos del producto y el tipo de cambio se apreció 65% luego de una de las devaluaciones más importantes de la historia.
Todos ponen
“Son muchas coincidencias con la situación actual”, sostuvo Pierri. “Lo malo es que el ajuste tiene un precio. Lo bueno es que, al menos desde el punto de vista de los sectores productivos, todos ponen un poco. Es un ajuste macro del que se sale con políticas macro. La ‘micro’ es de segundo orden”, consideró.
En números, el Índice de Producción Industrial manufacturero (IPI) del Indec registró en abril una caída de 16,6% interanual. De esta manera, el acumulado del primer cuatrimestre del año presenta una disminución de 15,4 por ciento.
Todas las divisiones de la industria manufacturera presentaron descensos interanuales. En orden de incidencia en el nivel general, se registró una baja en “Alimentos y bebidas” del 9%; “Maquinaria y equipo”, 29%; “Productos minerales no metálicos”, 35,2%; “Industrias metálicas básicas”, 19,3%; “Sustancias y productos químicos”, 10,2% y “Muebles y colchones, y otras industrias manufactureras”, 35 por ciento.
También, se desplomaron los rubros de “Otros equipos, aparatos e instrumentos”, 35,5%; “Madera, papel, edición e impresión”, 13,7%; “Productos de caucho y plástico”, 22,9%; “Productos de metal”, 18,9%; “Prendas de vestir, cuero y calzado”, 15,4%; “Vehículos automotores, carrocerías, remolques y autopartes”, 13,6%; “Productos textiles”, 26,2%; “Productos de tabaco”, 26,0%; “Refinación del petróleo, coque y combustible nuclear”, 3,3%; y “Otro equipo de transporte”, 4,7 por ciento.
A su vez, el Indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC) se contrajo 37,2% en abril en comparación con el mismo mes del año pasado. En el acumulado del primer cuatrimestre muestra una caída del 32%.
PBI y actividad económica
Asimismo, el Indec informó este viernes que la actividad económica registró en el cuarto mes del año una baja del 1,7% interanual y de 0,1% en términos desestacionalizados. Así, la contracción acumulada en el primer cuatrimestre alcanzó el 4,2%. En tanto, 8 de los 16 sectores de actividad presentaron fuertes retrocesos, 4 mostraron leves subas y 3 crecieron.
Entre las mayores caídas se destacan la del sector de la construcción (-24,8% interanual) y la de la Industria manufacturera (-15,7% interanual). “Junto con comercio mayorista, minorista y reparaciones (-13,1% interanual) aportaron 5,2 puntos porcentuales a la caída interanual del Estimador mensual de actividad económica (EMAE)”, precisó el Indec.
En contraposición, el sector de Pesca avanzó 197,1% interanual, Agricultura, ganadería, caza y silvicultura, 70,3% y Explotación de minas y canteras, 9,4 por ciento.
Por su parte, el Producto Bruto Interno (PBI) cayó un 5,1% interanual en el primer trimestre de 2024. La retracción fue del 2,6% respecto al cuarto trimestre del año pasado.
De los cuatro componentes que integran el indicador, solamente las Exportaciones mostraron un crecimiento interanual del 26,1% y del 11,1% respecto del trimestre anterior, por el impulso del sector agropecuario.
El resto mostró caídas muy fuertes. En la comparación interanual, el Consumo privado se desplomó 6,7%, el Consumo público, 5%; la Inversión, 23,4% y las Importaciones, 20,1 por ciento. Con respecto al cuarto trimestre del 2023, el Consumo privado se retrajo 2,6% y el público, 0,8%; la Inversión (formación bruta de capital fijo), 12,6% y las Importaciones bajaron 12,1%.
Hacia adelante, las proyecciones no muestran un repunte: el Fondo Monetario Internacional (FMI) empeoró su pronóstico en su último staff report y estimó una caída del PBI del 3,5% para este año. Además, advirtió que “la actual recesión económica podría prolongarse más y el proceso de desinflación podría resultar más persistente, provocando penurias prolongadas e intensificación de las tensiones sociales, incluso con el refuerzo del gasto social”.