Tras el mini veranito que generó el hot sale en mayo, que salvó el mes para muchos comercios, las ventas de junio estuvieron mucho más peleadas para los principales rubros de consumo masivo.
En los supermercados no se percibe una mejoría; en los puntos de venta de electrodomésticos aseguran que los volúmenes vendidos fueron inferiores a los del mes anterior, a pesar del Día del Padre; y en el rubro de indumentaria tuvieron que adelantar liquidaciones en muchos casos para cerrar el primer semestre sin tanta contracción.
El escenario no es, por ahora, el más auspicioso, pero en todos los sectores consultados creen que a partir de julio la situación debería comenzar, muy tibiamente, a mejorar, especialmente si la inflación sigue su camino descendente y ello ayuda a que el salario real continúe la tendencia de recuperación que inició dos meses atrás.
Fuentes del supermercadismo afirmaron que, hasta la tercera semana de junio, la tendencia era de caída de entre 10% y 11% en los volúmenes vendido
En lo que respecta al consumo masivo, fuentes del supermercadismo afirmaron que, hasta la tercera semana de junio, la tendencia era de caída de entre 10% y 11% en los volúmenes vendidos, en línea con los valores que viene registrando el canal moderno desde los últimos meses. En este caso, las promociones traccionan pero no son suficientes para que el sector perciba una mejora.
“Con respecto a mayo, se percibe un estancamiento en las ventas. No hay nada que hoy mueva el amperímetro”, dijo un referente del sector. “Nosotros estamos percibiendo una mejora y a la espera de que impacte el medio aguinaldo”, dijo, por su parte, Santiago Tarquino, comerciante mayorista.
En el rubro de electrodomésticos, por su parte, en junio se registró el descenso propio de haber tenido un evento como el hot sale tan fuerte, que superó en ventas al del año pasado, según datos del sector. De todos modos, en el rubro destacan que el escenario hoy es muchísimo mejor de que había durante el primer cuatrimestre del año, en el que las caídas interanuales rondaban el 45%. En junio la merma ronda el 20% con respecto al mismo mes del 2023.
“Por el hotsale, mayo anduvo muy bien, pero junio fue flojo, con muchas sucursales complicadas. Estamos traccionando con cuotas, siguen los 12 pagos sin interés y las promociones con algunos bancos, pero fue un mes duro”, dijeron en una cadena de retail. En otra firma coincidieron en que el sexto mes del año fue peor que mayo y que hay una curva descendente porque “la gente compró mucho en el hotsale” , pero también reconocieron que si bien el mercado sigue abajo (20%) respecto del año pasado, “la curva está empezando a darse vuelta” y las expectativas del sector para el segundo semestre son positivas.
La reducción de las tasas de interés contribuyó enormemente a que puedan volver las cuotas sin cargo para generar algo de venta, ya que la participación que tiene esa opción comercial en el total de operaciones es alta.
En una de las cadenas consultadas contaron que en junio funcionaron muy bien las categorías relacionadas con el Día del Padre, especialmente la de cuidado personal (como afeitadoras, por ejemplo) y que las ventas, en ese rubro, superaron a las del año previo, favorecida porque hubo mucha más oferta disponible debido a la liberación de las importaciones.
“Independientemente de que pudo haber una mejora por el Día del Padre y por los fines de semana largo, no vemos que eso sea un síntoma de mejora. El crecimiento mensual de mayo no indica que la economía esté mejorando. Sí, tal vez, muestra que se haya encontrado un piso, pero hay sectores que todavía están muy mal. Aunque se desacelere la caída y se estanque, igual nos quedamos en el fondo”, aseguró a este medio el secretario general de la Cámara de la Mediana Empresa (CAME), Ricardo Diab.
Aunque se desacelere la caída y se estanque, igual nos quedamos en el fondo (Diab)
Hacia adelante, el directivo se mostró pesimista: “Vemos difícil el despegue en los próximos meses. La inflación va cediendo por falta de consumo y eso puede ayudar, pero si después me aumentan las tarifas, se complica por otro lado”.
Vale recordar que según el Índice de Ventas Minoristas que realiza la entidad, hubo un retroceso interanual en mayo del 7,3% y acumulan una caída del 16,2% en los primeros cinco meses del año, pero el dato desestacionalizado fue positivo en 6,6 por ciento.
En cambio, el indicador de consumo que elaboran conjuntamente la Cámara Argentina de Comercio (CAC) y la consultora Ecolatina, reflejó una contracción del 7,7% interanual pero también una caída mensual de 2,2%. Estas diferencias indican que aún no hay una tendencia clara de recuperación del consumo.
Este índice se construye en base a algunos indicadores como el ingreso disponible, el IVA y la movilidad jubilatoria, y “estas variables todavía no muestran una tendencia clara a la mejora. El ingreso real está empezando a aumentar y en algún momento ello impactará en el indicador de consumo”, precisó el economista de la CAC, Julio Rodríguez Rabellini, quien agregó que si continúa esa recuperación del salario, podría esperarse para julio o agosto una mejora de los datos interanuales y mensuales.
Otro sector muy golpeado por la contracción del consumo es el de indumentaria, y el escenario corroborado por Infobae, tras la consulta en algunas marcas, es que durante junio debieron continuar con promociones agresivas, e incluso adelantar la liquidación, para cumplir con sus objetivos de venta.
“De un abril muy complicado, con caídas fuertes de ventas y un mayo que, merced a descuentos, promociones y cuotas, habíamos logrado que se pareciera bastante al mayo del 2023, ahora en junio observamos una leve declinación, pero reponiéndose merced al clima. Está claro que el consumidor, con su poder adquisitivo recortado, hace las compras por necesidad, y el hecho de haber tenido varios días templados en junio no ayudó a la venta de abrigos y camperas, que son el core de esta temporada del año”, dijo el directivo de una importante marca de ropa femenina.
Hacia adelante, en la empresa creen que “con un sale bien elaborado y atractivo, las ventas se normalizarán en julio y para la temporada de verano, esperan una tendencia en aumento, con precios más estables e ingresos comenzando a nivelarse”, agregó.
La gente está esperando el descuento. Y el mes lo estamos cerrando muy bien por esta acción, dijo un comerciante de ropa
En otra marca remarcaron que como venía muy tranquilo, se decidió adelantar la liquidación para el 19 de junio (estaba prevista para el 24), con descuentos de hasta 50%. “Ahí la venta se disparó. La gente está esperando el descuento. Y el mes lo estamos cerrando muy bien por esta acción”, explicaron desde la firma.
A su vez, en el sector de ropa de niños afirmaron: “Los consumidores pudieron foco en el Día del Padre y no gastó de más. De 10% positivos en mayo, en junio estuvimos 11% abajo interanual”, dijeron en una de las principales firmas del segmento. Pero hacia adelante, las expectativas son alentadoras, enfatizó el empresario.