El segundo trimestre del año arrancó con números en rojo para un puñado de sectores clave de la actividad económica, mientras el Gobierno todavía señala que abril debería ser el piso antes de que comience el rebote, apalancado de manera inicial en la desaceleración de la inflación y la reactivación del crédito.
Por lo pronto, indicadores de la economía real reflejan aún un escenario de recesión persistente. Algunos datos anticipados de abril -elaborados por consultoras privadas- dan cuenta de esa dificultad que atraviesa la economía para encontrar una chispa de arranque. Esta semana el Indec dará a conocer el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) de marzo, que cálculos privados estimaban, en términos interanuales, con un desplome cercano al 10 por ciento, como marcó Orlando J. Ferreres.
Con alguna aproximación mayor, consultoras privadas recogieron la primera información consolidada de abril para analizar si en marzo tuvo lugar el piso de actividad o el cuarto mes del año la tendencia será de desmejora. Analytica, por un lado, tomó en consideración la actividad industrial medido a través del consumo de energía eléctrica mayorista, lo que puede ser un indicador aproximado de su nivel de producción.
Esta semana el Indec dará a conocer el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) de marzo, que cálculos privados estimaban, en términos interanuales, con un desplome cercano al 10 por ciento
“En abril la variación interanual fue de -11,7% y de -19,2% en lo que va de mayo. Estimando un modelo de predicción para explicar la actividad industriad a través de la demanda de energía sectorial, la caída en la producción durante abril llegaría al 18,4% y se profundizaría a 21,7% en mayo”, anticipó la consultora que dirige Ricardo Delgado.
“La industria manufacturera refleja muy bien la recesión económica. En marzo el sector tuvo una caída mensual de 6,3% e interanual de 21,2% y alcanzó su peor nivel, exceptuando la pandemia, desde 2017. El sector es sumamente relevante dentro de la estructura productiva y social. Teniendo en cuenta los datos de empleo registrado, entre 2009 y 2023 representó el 19,7 por ciento. A su vez, su tasa de informalidad se encontró en el cuarto trimestre del año pasado en 43,3%, por debajo del total de la economía de 45,3%. Los salarios en el sector son 12% mayores que en el promedio de la economía”, planteó.
Invecq, por su lado, realizó una radiografía completa con todos los sectores que tienen en abril información disponible. “Algunos sectores comenzaron a mostrar una recuperación en términos interanuales con respecto al mes previo, pero aún continúan en terreno negativo: los despachos de cemento cayeron un 42,9% en marzo frente a un -35,6% en abril en términos interanuales; el índice Construya pasó de tener una variación interanual de -40% en marzo a -33,2% en abril”, enumeró.
“La caída en la producción (industrial) durante abril llegaría al 18,4% y se profundizaría a 21,7% en mayo”, anticipó la consultora que dirige Ricardo Delgado
“Patentamiento de autos: -35,3% en marzo vs -5,9% en abril; patentamiento de motos: -43,3% en marzo a -4,4% en abril; producción de autos pasó de -29,4% en marzo a -21,0% en abril y el índice de ventas minoristas de CAME: -12,6% en marzo vs -7,3% en abril”, indicó. Serían cinco sectores, así, con números negativos pero menos graves que en marzo.
Por el contrario, nombró otros tres que empeoraron: “Las liquidaciones de divisas del agro el mes de marzo habían logrado un aumento de 22,2% interanual, mientras que, en el mes de abril esa variación fue negativa de 21,6%; algunos impuestos relacionados directamente con la actividad también sufrieron un empeoramiento en términos interanuales y reales como, por ejemplo, créditos y débitos en cuenta corriente pasaron de -11,7% en marzo a -16,4% en abril al igual que las contribuciones patronales con una variación de -15,9% en marzo a -17,0% en abril y finalmente los pasajeros de cabotaje en el mes de marzo habían tenido un crecimiento anual de 8% mientras que en abril esa variación fue negativa en -1,4%”, concluyó.
Como conclusión, la consultora que dirige Esteban Domecq apuntó que “el inicio del segundo trimestre llega con una morigeración de la intensidad de la caída de la actividad económica en gran parte de estos sectores, demostrando así que marzo podría haber marcado un piso de la recesión. Aún quedan sectores e indicadores que muestran un empeoramiento en términos interanuales, por lo que aún no hay señales de que se comience a dar la tan anunciada ‘salida en V’”.
¿Cuál será la foto que mostrará el Gobierno esta semana? El EMAE de marzo se anticipa con los números de contracción económica más altos desde el inicio del gobierno de Javier Milei. En diciembre el EMAE interanual cayó 4,5%, en enero el retroceso fue de 4,3% y en febrero, de 3,2 por ciento.
“Indicadores líderes de marzo muestran que la economía no habría tocado piso aún. Datos de la actividad industrial y de la construcción confirmaron caídas notables”, dijo LCG. “A esto se sumaron otros varios indicadores sectoriales con rojos en las variaciones mensuales. Por esto esperamos una nueva contracción en marzo (mayor a la de febrero). Para abril, algunos indicadores de avance sí habilitan a pensar en un freno de la caída”, consideró.
El efecto persistente de la recesión empezará a reflejarse, estiman en el mercado, en los indicadores laborales. “Es difícil encontrarle antecedentes, por su velocidad y su profundidad”, dijo Vectorial sobre el desplome de la actividad económica. “Todavía lejos de pegar la vuelta, lo que se empieza a notar es cada vez mayores expresiones del alcance de la recesión, que amenaza con llevarse puesta capacidades y unidades productivas que luego son difíciles recomponer y reconstruir”.
“Es inevitable que esta caída no empiece a tener impacto sobre el empleo, más allá de la construcción, que fue la primera en mostrar una caída de casi 50.000 puestos de trabajo”, concluyó. La Secretaría de Trabajo mostró, por lo pronto, desde fines de noviembre, el último dato “completo” del gobierno de Fernández hasta fines de febrero, se perdieron 63.000 empleos asalariados privados.