Previo a la licitación de bonos del Tesoro de esta tarde, a través de la cual el Gobierno procura reabsorber a través de estos títulos de deuda soberana el desarme de pasivos remunerados del Banco Central, el Directorio de la entidad monetaria definió el marco normativo que promueve la administración de liquidez de corto plazo a través de títulos del Tesoro en reemplazo de esta deuda “cuasi fiscal” acumulada en el balance.
“Esa determinación contribuye al objetivo de darle eficiencia a las herramientas necesarias para el desarrollo de los mercados de liquidez y de crédito doméstico”, argumento el BCRA a través de un comunicado.
De esta forma, las Lecap quedan fuera de la contabilidad de la Responsabilidad Patrimonial Computable de los bancos, que establece límites a la exposición a deuda soberana.
“El cambio normativo es un elemento adicional del proceso de recuperar el control de la programación monetaria por parte del BCRA. El avance en reducir la creación primaria de dinero, a través del ancla fiscal, ha sido central en el inicio de un proceso de desinflación. Complementando este esfuerzo, el BCRA continuará reduciendo las demás fuentes de emisión que afecten adversamente la programación monetaria”, indicó la entidad que preside Santiago Bausili.
El BCRA estableció el marco normativo para el desarrollo de una curva de tasas fijas de referencia de liquidez de corto plazo
El Directorio estableció que “los títulos que sean adquiridos por suscripción primaria dentro del programa de licitaciones de Letras a tasa fija anunciado por el Ministerio de Economía no computarán a efectos del fraccionamiento crediticio del sector público, por hasta un monto determinado para cada institución. El monto se fija en relación con los saldos de Pases pasivos de cada institución al 15 de mayo de 2024″.
“Dejando atrás un esquema en el cual el BCRA era la principal fuente de remuneración de los saldos monetarios transaccionales, los cambios en curso contribuirán a afianzar la estabilidad y darán mayor espacio para el desarrollo del crédito privado. La asignación de recursos financieros a través de mecanismos de precios transparentes es esencial para la normalización de la intermediación financiera”, explicó el comunicado del BCRA.
Al flexibilizar el techo de títulos públicos que pueden tener en cartera las entidades, la nueva normativa les permiten a la vez desprenderse en la misma proporción de Pases pasivos colocados por el BCRA. Este cambio se dea en simultáneo con la reducción de la tasa de política monetaria -y que remunera los pases-, que esta semana se instaló en el 40% nominal anual, lo que consiste en un mayor incentivo para que los bancos capten bonos del tesoro en pesos y tengan menos interés en quedarse con Pases del BCRA.
“La reducción sistemática en la inflación esperada que anticipa el consenso de analistas de mercado (a través del REM) y la que se descuentan en los precios de instrumentos en el mercado financiero es evidencia de la actual convergencia al equilibrio macroeconómico”, indicó la autoridad monetaria.
“El BCRA anticipa que, como consecuencia de la mayor estabilidad macroeconómica, la recomposición de la demanda de base monetaria será un factor que contribuirá a este proceso de hacer más eficiente la intermediación financiera. Dado el impacto de la innovación financiera en los medios de pago es de esperar que la base monetaria incorpore, además de circulante, el dinero ‘digital’”, completó.