El presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed), Jerome Powell, afirmó este martes que su confianza en que la inflación norteamericana caiga se ha reducido ante su repunte en los últimos meses, lo que alejaría el horizonte temporal de bajadas en los tipos de interés.
En un evento celebrado en Ámsterdam -Países Bajos- Powell indicó que en el primer trimestre la economía de los EEUU ha experimentado un importante crecimiento que no se vio acompañado de progresos en materia de inflación.´
“No esperábamos que fuera un camino de rosas, pero estos datos han sido más altos de lo que creo que nadie esperaba”, reconoció Powell. Aunque añadió que aún cree que la inflación volverá a tasas mensuales contenidas en sintonía con las del año pasado, su confianza en que esto ocurra “ya no es tan alta como antes”, según informó Europa Press.
¿Qué le espera a la economía argentina?
El pasado 1 de mayo el Comité Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal de los EEUU (Fed) concluyó este miércoles su reunión de política monetaria de dos días, en la cual mantuvo su tasa de interés oficial sin cambios en el rango de entre 5,25 a 5,50 por ciento, el nivel más alto de los últimos 23 años. ¿Qué significa este escenario de tasas de interés globales elevadas para la economía de la Argentina?
- Actividad económica global sostenida. La decisión de la Fed confirma que la actividad económica en los EEUU está suficientemente robusta como para resistir por más tiempo a las tasas altas, que siempre son contractivas pues encarecen al crédito. En este aspecto, los analistas coinciden en que la Fed buscará evitar una recesión en los EEUU en un año electoral, y si la actividad económica norteamericana se mantiene sostenida, beneficiará a la demanda global, de la que dependen las exportaciones argentinas.
- Dólar fuerte en el corto plazo. Si las tasas de referencia en los EEUU se mantienen en el nivel presente -el más alto desde 2001- más allá de lo previsto, esto condicionará a una mayor valuación del dólar respecto de otras monedas duras. También afectará a la cotización de los commodities agrícolas que Argentina vende al mundo, pues sus precios medidos en dólares podrían debilitarse. En este aspecto no pasa desapercibido que un precio central para las ventas externas, el de la soja, que experimenta un descenso de 5,8% en lo que va de 2024, a USD 455,70 por tonelada.
- Buen momento para los mercados. Wall Street sostiene ganancias en este 2024, con un índice tecnológico Nasdaq que avanza un importante 11,3 por ciento. El Dow Jones de Industriales gana 4,4% y el promedio S&P 500, un 10,2 por ciento. Un panorama con baja de tasas garantizaría liquidez a los mercados y le da más impulso al apetito al iesgo y a la demanda por bonos y acciones de países emergentes como la Argentina.
Autumn Graham, analista de crédito de Schroders, explicó que “la deuda de los mercados emergentes suele tener un buen desempeño en los años posteriores al pico de un ciclo de aumento de tasas de la Reserva Federal de Estados Unidos. Históricamente, el final de un ciclo de aumento de tasas de la Fed ha sido el escenario para un fuerte desempeño de los bonos de países emergentes. Ya existen señales de que los mercados actuales podrían seguir este patrón. En términos de retorno en moneda fuerte, la recuperación en la deuda emergentes parece haber comenzado, mientras que en términos de retorno en moneda local, la recuperación aún no se aceleró, pero los retornos salieron de territorio negativo”.
“A pesar de que la Reserva Federal le quitó peso a la idea de subir tasas, el dólar volvió a fortalecerse en el último mes, poniendo presión sobre el resto de las monedas a nivel a global. La moneda estadounidense cuenta con los vientos de cola que le aportan las altas tasas de interés y un sólido crecimiento de la economía”, aportaron los expertos de Balanz Capital.
Los conceptos de Powell
- Presiones inflacionarias. Jerome Powell constató que se revirtió la mayor parte de los efectos pandémicos sobre la oferta, “pero no todos”, ante lo cual la inmigración contribuyó a reducir la escasez de mano de obra con su consiguiente efecto positivo sobre la inflación a corto plazo -menor presión por aumentos salariales-, pero de signo neutral a largo plazo.
- Equilibrio de tasas. Asimismo, Powell auguró que la tasa de interés natural, esto es una tasa neutral “que no aumentaría ni reduciría la actividad económica en un hipotético escenario de pleno empleo, inflación del 2% y ausencia de crisis”, podría alcanzarse en unos “cinco o seis años”.
- Banca y riesgos financieros. El presidente del banco central norteamericano aseguró que el sector bancario estadounidense está en “buena forma”, especialmente las grandes entidades, que son “fuertes, están bien capitalizadas y son muy competitivas a nivel internacional”. Así, sostuvo que uno de los motivos detrás de la rápida recuperación postpandémica fue la fortaleza de la banca. No obstante, avisó que el “muy, muy rápido crecimiento” de la actividad de entidades financieras no bancarias suscita preocupaciones desde el punto de vista de la estabilidad financiera ante la posibilidad de que se convierta en una “burbuja”, y, a su vez, por los crecientes lazos que estas firmas tienden hacia el sistema financiero tradicional. “Para mí no es evidente que en este momento conlleve una pérdida neta para la estabilidad financiera, pero yo diría que nuestro deber es supervisarlo con mucho cuidado y reflexión y entender todas las implicaciones”, afirmó Powell.
- Independencia de la Fed. Después, el “guardián del dólar” se mostró convencido “sin lugar a dudas” de que la Fed cuenta actualmente con todas las herramientas necesarias para preservar su independencia respecto de injerencias de otros poderes del Estado. En este sentido, manifestó que cuenta con un “amplio respaldo” desde ambos lados del espectro político para llevar a cabo su labor y, de hecho, reconoció que está “menos preocupado” por esta cuestión de lo que pudiera parecer ante las informaciones aparecidas en los medios.
- Política fiscal “insostenible”. Igualmente, el banquero central calificó de “incontrovertible” que la política fiscal de Estados Unidos es “insostenible” ante los “grandes déficit estructurales” existentes, que coinciden con una situación de pleno empleo. Powell instó a los poderes ejecutivo y legislativo a que aborden esta problemática cuanto antes, “y mejor si es antes que después”.