Si marzo fue el peor mes para la venta de autos, razonablemente abril tenía que sentirlo en la producción industrial. Es matemática pura. Si se vende mucho menos de lo esperado, se debe adecuar el flujo de producción para no parar, con los costos y problemas asociados que tiene, y para no producir un stock que represente costos que no se recuperan.
Así, con la finalización del cuarto mes del año, la Asociación de Fabricas de Automotores (ADEFA), publicó este lunes su informe mensual de producción automotriz con las cifras de abril, en las que se vio reflejada la situación del sector, afectado no sólo por las ventas locales sino también por las exportaciones.
En abril se fabricaron en las 13 plantas de producción radicadas en Argentina, 42.974 unidades, que significan un leve retroceso del 0,4% en comparación con los 43.159 vehículos fabricados en marzo. Como dato adicional que sirve para la comparación de flujo industrial, en abril hubo 17 días laborales contra 18 del mes de marzo, lo que significa que no hay un efecto adicional por menos jornadas de producción.
Sin embargo, el número que siempre es conveniente usar para comprar un escenario con otro similar por cuestiones de estacionalidad y mercado, es de la comparación interanual, donde las cifras de abril representan una caída de producción del 21% respecto al mismo mes de 2023, cuando se fabricaron 54.399 automóviles y utilitarios livianos.
En el cálculo que acumula los primeros cuatro meses del año, las fábricas de autos argentinas produjeron 146.267 vehículos, lo que confirma una caída del 22,6% respecto a las cifras de referencia de 2023, que eran de 188.973 unidades.
A nivel de exportaciones, el volumen de vehículos que se vendieron en otros mercados fue de 20.611 unidades. Estos números son más preocupantes que los de producción para ventas locales, ya que ante la caída del mercado propio, las exportaciones son el salvoconducto para mantener la producción de una fábrica. La baja en comparación a marzo fue del 12,2%, y en relación con abril de 2023, la caída fue mayor aún, con un 32,9% menos de exportaciones.
En este ítem, el acumulado del primer cuatrimestre de 2024 arrojó un número de 82.981 unidades exportadas, que también es una baja considerable a nivel interanual que alcanzó el 15,7% menos que en 2023.
“Como lo veníamos anticipando, en el mes de abril las principales variables del sector continuaron mostrando una adecuación a la nueva realidad económica”, dijo Martín Zuppi, Presidente de ADEFA, en relación con las cifras del mes de abril para la producción y exportación de automóviles.
Sin embargo, los últimos anuncios del gobierno, por los que recupera el beneficio para las exportaciones incrementales, y se bajarán impuestos para producir como los referidos a las importaciones temporales y a los autopartistas, son señales que alientan a una recuperación del sector.
Al respecto, Zuppi expresó que los fabricantes están “muy conformes con las medidas promovidas por el Gobierno para mejorar la competitividad exportadora del sector y reducir el costo de las inversiones, ya que son fundamentales teniendo en cuenta el perfil productivo exportador de la industria y la importancia de captar nuevos proyectos en un contexto de alta competencia con otros países de la región”. Finalmente, el ejecutivo que a la vez es el de mayor jerarquía en Stellantis Argentina desde el pasado mes de febrero, dijo que “tenemos que seguir trabajando en la misma dirección para reactivar el mercado interno”.
Finalmente, en lo que respecta a ventas mayoristas, el sector automotor comercializó a la red de concesionarios 22.450 unidades en el mes de abril, otro número negativo ya que implica una baja del 25,6% menos respecto de las entregas de marzo y 33,6% por debajo del volumen del mismo mes del año pasado. Entre enero y abril se comercializaron a las redes de concesionarios un total de 101.802 unidades, un 18% por debajo de las 124.119 unidades del primer cuatrimestre del 2023.