El monto operado en el segmento de contado aumentó este miércoles en casi USD 130 millones (+48% respecto del martes), luego de un débil arranque de la semana, para alcanzar los USD 393,1 millones en el mercado mayorista. Esta mejora permitió al Banco Central alzarse con USD 198 millones por su participación cambiaria, el 50,4% del total ofertado.
Sobre el final de las operaciones el dólar libre descontó cinco pesos, para cerrar a $1.030 para la venta. El recorrido del billete negociado en la plaza informal interrumpió así una serie de tres ruedas seguidas en alza. Con un dólar mayorista que subió un peso a $869,50, la brecha cambiaria quedó reducida a 18,5 por ciento.
La cacería comenzó: antes del inicio del intercambio automático con Estados Unidos y del blanqueo de capitales, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) aceleró las intimaciones contra contribuyentes argentinos con cuentas bancarias en territorio norteamericano.
El dólar “blue” es negociado sin variantes este miércoles, a $1.035 para la venta en el reducido mercado informal, en un nivel máximo desde el 1 de marzo, cuando se operó a 1.050 pesos. En abril el dólar libre sostiene una leve ganancia de 25 pesos o 2,5 por ciento.
“Sigue en terrenos bajos el volumen operado en el Mercado Libre de Cambios considerando la estacionalidad. Aún la liquidación de dólares por parte del agro no se hace sentir, por lo que, ante una menor oferta de contado con liquidación y contexto global adverso, vimos subas en las cotizaciones de los dólares financieros”, puntualizó un reporte de Romano Group.
Las primeras posturas de venta en el segmento mayorista del dólar marcan un precio de $869,50 por unidad, un peso por encima del cierre anterior. En el último año el tipo de cambio oficial anota un ascenso de 301,8% desde los $216,38 del 17 de abril del año pasado.
Los dólares financieros tuvieron un aumento significativo en la jornada de ayer, impactados por dos situaciones diferentes. Por un lado, reflejaron las tensiones en los mercados internacionales y la caída de las monedas emergentes contra el dólar. Pero también jugó un rol importante la fuerte disminución de la liquidación de los exportadores.
Las adversidades del exterior siguen golpeando. La diferencia con la gestión anterior es que la Argentina ahora está acoplada al mundo y las siente a pleno. Por caso, el encarecimiento del dólar frente a las principales monedas del mundo derribó al real y también al yuan que subió a los valores del 15 de noviembre pasado. Las consecuencias directas son que Brasil toma ventajas sobre la Argentina porque su moneda devaluada hace más competitivas sus exportaciones y el yuan golpea directamente en las reservas, que están integradas por alrededor de USD 17.000 millones en divisas chinas. Y por si faltara una nota negativa, allí está la caída de la soja y la baja de los bonos soberanos.
El martes subieron todas las versiones de los dólares paralelos: el dólar libre a $1.035, el dólar MEP a $1.032 y el contado con liquidación $1.076 por unidad.
El Central compró USD 93 millones, el monto diario más bajo en lo que va de abril. Cayeron los bonos y el riesgo país se acercó de nuevo a los 1.400 puntos. Preocupa la apreciación del tipo de cambio.
El Banco Central efectuó compras de contado por USD 93 millones este martes, en una rueda mayorista con USD 265,2 millones, un monto bajo dado el período de mayores liquidaciones del agro. En este sentido, los analistas señalan que la sucesión de lluvias de las últimas semanas viene retrasando el ritmo de la cosecha, en particular de la soja y, por lo tanto la liquidación de exportaciones del sector. La compra del BCRA fue la más reducida desde el 27 de marzo (USD 29 millones).