El Banco Central recortó este jueves en 10 puntos la tasa de interés de referencia para ubicarla en el 70% nominal anual. Como esta tasa de política monetaria se transmite a todo el sistema financiero, es de prever que los bancos aplicarán un recorte de similar proporción en las tasas pasivas, es decir aquellas que aplican para remunerar los depósitos a plazo fijo de sus clientes.
Entre el 12 de marzo hasta este jueves la tasa de política monetaria alcanzaba el 80% nominal anual, mientras que en promedio, las tasas de plazos fijos en bancos promediaban el 68,2% nominal anual, según el último dato del BCRA, actualizado al 9 de abril.
En el mismo sentido, el recorte de la tasa de política monetaria al 70% llevaría a la tasa de los plazos fijos a la zona del 60%, ya que una caída de la tasa a nivel sistema suele ser acompañada gradualmente por los bancos minoristas.
Si bien es cierto que las tasas se mantienen en zona negativa si se las compra con la inflación, el rendimiento se sostiene muy por encima de la suba del dólar, tanto oficial -que avanza a un ritmo del 2% mensual. como de los dólares paralelos. Ejemplo de ello es el dólar “blue”, que en $995 para la venta experimenta un descenso de 15 pesos en lo que va de abril, en su tercer mes consecutivo de caída nominal de precios.
Una tasa nominal anual (TNA) del 70% se traduce en una tasa efectiva anual (TEA) del 97,5%, producto de la reinversión del capital más los intereses generados mes a mes a lo largo de un año. Es lo que se llama interés compuesto. Si el plazo fijo se asienta en el 60% de TNA, la TEA alcanzaría el 79,6 por ciento. En base a esto, el ahorrista deberá sopesar cuál es la inflación esperada para los próximos doce meses, así como cuál sería la tasa de devaluación en el mismo período. Una TEA del 79,6% anual equivale a un 5% mensual; que este rendimiento sea positivo en los meses venideros estará supeditado a la velocidad del proceso bajista para la inflación al que está comprometido el Gobierno.
En este aspecto, las consultoras privadas ubican la inflación de marzo apenas por encima del 10% -este viernes 12 el INDEC brindará la cifra oficial-, en un sendero declinante por tercer mes consecutivo tras el pico de 25,6% de diciembre de 2023. Para abril las estimaciones apuntan a quebrar el piso de los dos dígitos por primera vez desde octubre de 2023 (8,3%).
El 12 de marzo el Banco Central dispuso la desregulación de tasas mínimas de interés, lo que implicó la eliminación de la tasa mínima de plazo fijo que establecía la entidad para minoristas, por lo cual los bancos pueden fijar su propio rendimiento de estos instrumentos. En un comunicado de prensa el BCRA indicó que entre las razones del recorte de tasas se encuentran los factores de equilibrio monetario y cambiario y de reducción de la inflación.
“Con la inflación proyectada a doce meses entre el 120% y 130% anual según el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central, las tasas pasivas que ofrecen los bancos son muy negativas. Está claro que el plazo fijo UVA es mejor opción que el plazo fijo tradicional. La tasa de caución a plazos inferiores a los 30 días se ubica en el 72% anual. La caución es una colocación que se hace en el mercado de capitales a plazos cortos y que hoy rinde más que la tasa de plazo fijo. Consultar a un agente de Bolsa”, indicó el analista y asesor de negocios Salvador Di Stefano.
La reducción de la tasa de interés también favorece las cuentas del Banco Central ya que pagará menos interés por los pasivos remunerados, una de las principales preocupaciones del presidente Javier Milei y su equipo económico. A la vez a baja de la tasa de interés puede estimular la aparición del crédito en momentos en que se agudiza la recesión.