El Gobierno postergó la quita de subsidios de tarifas de gas y electricidad hasta junio o julio, lo que contribuirá a que la variación del Índice General de Precios al Consumidor del Indec (IPC) mantenga la tendencia descendente en abril.
Según pudo saber este medio, el atraso en el recorte de subsidios surge por dificultades en el entrecruzamiento de datos para determinar qué hogares continuarán recibiendo las subvenciones a la energía por su condición de ingreso y realidad socioeconómica, y quiénes seguirán con el cronograma de pérdida de ese beneficio.
Si bien en abril comenzó con aumentos de gas y electricidad, la postergación de la baja de subsidios le quitaría presión a la inflación.
La medida también prorratea las tarifas a partir de mayo con la suba de inflación y salarios para que no queden atrasadas (Glustein)
En este sentido, el economista Federico Glustein dijo a Infobae: “Sin lugar a dudas, si se postergaran los incrementos de tarifas ayudaría a que no se recaliente la inflación y que el proceso de desaceleración, prosiga. Un ejemplo claro es el aumento del gas del 300% que influye y representa un 3% del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes del incremento, junto a una segunda ronda donde los sectores productivos que usan este servicio trasladarán a precios finales este nuevo cuadro tarifario. A esto habría que sumarle un 0,2% de combustibles y un 0,8% de AySA. Sería un 4% total”.
“Sin embargo, la medida también prorratea las tarifas a partir de mayo con la suba de inflación y salarios para que no queden atrasadas, por lo que, postergar cierto incremento de tarifas también permitiría ayudar a la inflación en el corto plazo junto a la medida post tarifazo”, agregó.
Por su parte, Juan Truffa, economista de Outlier, precisó: “En realidad las tarifas aumentan, aunque mantienen subsidios a algunos sectores. Entonces, básicamente, lo que sucede es que el impacto es más gradual. La inflación igualmente está en franca desaceleración. La actividad ha bajado mucho y eso va a impactar”.
Al respecto, luego de haber marcado 13,2% en febrero, el consenso entre los economistas es que la inflación continuó desacelerando. Según C&T Asesores Económicos se ubicó en 12,7% y para la consultora de Orlando Ferreres 12,2 por ciento.
Si bien la fecha de incremento es a partir de abril, la suba se pagaría en la boleta de junio ya que el consumo se mide bimestralmente (Moreno)
Dante Moreno, economista de Epyca Consultores, sostuvo, en la misma línea, que “posiblemente en abril se registre una inflación qué continúe una tendencia de reducir la velocidad y/o mantener los niveles de precios, pero en mayo o junio eso se podría revertir y volvamos a una suba de los valores de bienes y servicios, con el añadido que otra modificación positiva del tipo de cambio, potenciaría la suba de los precios locales de bienes y servicios. Esto se debe a que si bien la fecha de incremento del gas es a partir de abril, la suba se pagaría en la boleta de junio ya que el consumo se mide bimestralmente”.
La cuenta de los subsidios
Según la Secretaría de Energía, encabezada por Eduardo Rodríguez Chirillo, el atraso en las tarifas generó un gasto en subsidios de USD 150.000 millones en los últimos 20 años, algo que el Gobierno pretende interrumpir a fin de sostener el superávit fiscal. El objetivo es recortar la ayuda estatal en 0,5% del PBI.
En este marco, según el Observatorio de Tarifas y Subsidios IIEP (UBA-Conicet), los principales subsidios económicos a los sectores de Agua, Energía y Transporte tuvieron en febrero una reducción nominal acumulada del 25,3% anual respecto de igual período del año previo y por lo tanto, la variación real mostró una caída del 79,8% anual.
Así, de acuerdo a CIPPEC, en el acumulado a febrero (último dato disponible), los subsidios representaron el 7,7% de los gastos primarios, 3,3 puntos porcentuales menos que en el mismo mes 2023. También, el peso promedio anual de las subvenciones sobre el gasto se ubicó 3,3 puntos por debajo del observado entre 2018 y 2023.
A moneda de marzo de 2024 los subsidios acumulan $10,4 billones en los últimos doce meses corridos. Esto implica una caída real del 25% respecto a igual tramo del año anterior
En tanto, con datos al 20 de marzo, los subsidios cayeron 69,9% anual en términos reales explicados por una reducción en transporte del 50% y en energía, que representa el 62% de las subvenciones totales, del 75,3% anual real. Las transferencias por subsidios al agua fueron nulas.
Por otra parte, “a moneda de marzo de 2024 los subsidios acumulan $10,4 billones en los últimos doce meses corridos. Esto implica una caída real del 25% respecto a igual tramo del año anterior (acumulados entre abril de 2022 y marzo de 2023) y del 43% respecto del pico observado en junio de 2022″, estimó el observatorio.