Los freelancers latinoamericanos están ganando cada vez más protagonismo y generando impacto en el mercado global. En particular, Argentina emerge como potencia entre los autónomos, ocupando el segundo lugar de la región tanto en número total como per cápita.
Según un informe de Nebeus, una plataforma global de pagos, la exportación de servicios al mundo por parte de los freelancers de América Latina adquirió relevancia en la mayoría de los países en 2020, durante la pandemia.
Sin embargo, Argentina, Colombia, México y Venezuela son los más experimentados ya que ingresaron al mundo freelance en 2017, lo que los ubica más cerca de sus contrapartes internacionales como filipinos, pakistaníes e incluso indios, que están en el mercado, en promedio, desde 2015.
A pesar de una llegada más tardía al sector, los autónomos de la región se convirtieron en fuertes competidores, ofreciendo precios competitivos por un trabajo de alta calidad.
La tarifa media por hora de los freelancers latinoamericanos es de USD 17, con Colombia y Perú como las opciones más rentables.
Los argentinos se posicionan como los más caros de la región con una tarifa media por hora de USD 25. No obstante, sigue siendo un promedio muy inferior al costo de contratar freelancers de Estados Unidos o el Reino Unido, cuya remuneración por hora es de 40 dólares.
El costo más elevado de los profesionales independientes argentinos se relaciona con la calidad de sus servicios: tienen una calificación media de 4.97 sobre 5, superando a sus pares regionales y compitiendo a nivel global. De hecho, la de los freelancers argentinos es la calificación más elevada de todos los países relevados y empatan el primer puesto con Bangladesh. Además, tienen una puntuación levemente superior a la de sus pares de EEUU y el Reino Unido.
En cuanto a las especializaciones de los freelancers latinoamericanos, Nebeus destacó diseño, informática, profesionales administrativos y de entrada de datos, y redactores de contenidos.
La mayoría de los autónomos trabajan en diseño (40%), centrándose principalmente en el diseño gráfico y el modelado 3D. Argentina, Brasil y Venezuela tienen el mayor número de diseñadores gráficos.
En Argentina, el 62% de los freelancers se dedican a esta categoría, tienen un precio medio por hora de USD 20 y una puntuación de 4.97.
Los profesionales informáticos, web y software también se destacan, representando el 20% del total. Aunque cabe mencionar que en esta categoría Argentina es el país con menor porcentaje de la región. Sin embargo, la tarifa media por hora es la más alta (USD 30) y su puntuación alcanza las 4.98 estrellas, solo por detrás de Guatemala, con 4.99.
Los motivos del fenómeno freelance en Argentina
Ariel Sujarchuk, ex secretario de Economía del Conocimiento, dijo a Infobae que el fenómeno de los freelancers en el área del conocimiento se debe a que los expertos pueden generar una rentabilidad extraordinaria frente a otras actividades de su rubro. El segundo motivo es que hay mucha demanda.
En la misma línea, Enrique Carrier, analista del mercado de telecomunicaciones y nuevos medios, aseguró que la pandemia contribuyó al fenómeno porque instaló el concepto de trabajo remoto y las organizaciones se acostumbraron a esa modalidad. Esto se combinó con la posibilidad para los freelancers de cobrar en divisas y la alta demanda de servicios vinculados a la tecnología, principalmente programadores, así como también diseñadores.
De acuerdo a una encuesta de WebSite Planet, realizado por el experto Adam Warner; los principales motivos para elegir la vida de freelancer a tiempo completo se relacionan con una mayor flexibilidad horaria (79%) y convertirse en su propio jefe (77%).
En el caso de los autónomos a tiempo parcial, la razón más popular (75%) es ganar un dinero extra.
Respecto a los principales países que buscan profesionales argentinos, Sujarchuk mencionó Estados Unidos, México y la Europa hispana. Hacia adelante, “Argentina tiene potencial porque tiene buena cantidad de recursos humanos y tiene más potencial si sigue formando”, aseguró.
El problema de la facturación
Si bien el hecho de que haya una gran cantidad de argentinos que exporten servicios al exterior y cobren en dólares genera un impacto económico positivo, Sujarchuk señaló que hay un elevado nivel de evasión impositiva ya que el Estado Nacional no provee una herramienta legal para facturar los ingresos.
El gobierno anterior había impulsado en el Congreso el Régimen Simplificado y Cambiario para Pequeños Contribuyentes Tecnológicos, más conocido como Monotech. Este permitía, a cambio del pago de una suma impositiva integrada, cobrar hasta USD 30.000 por año en concepto de exportación de servicios sin obligación de liquidarlos en el Mercado Único de Cambios.
El proyecto tuvo media sanción en Diputados por amplia mayoría en marzo de 2023 pero luego no prosperó.