La eliminación de subsidios energéticos que aplicó el Gobierno nacional en febrero en su plan para alcanzar el superávit fiscal generó un aumento mayor al 300% en las boletas de luz que reciben los usuarios residenciales de altos ingresos, pero también en no residenciales como pymes comerciales e industriales, edificios, hospitales, universidades y alumbrado público de los municipios.
Esto se debe a que la decisión del equipo económico fue mantener las subvenciones en los costos de generación de electricidad para los hogares de ingresos bajos, conocidos como Nivel 2, y los de ingresos medios, conocidos como Nivel 3, a partir de la segmentación tarifaria vigente. A eso se sumó el aumento tanto en el transporte como en la distribución del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y las provincias.
Un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de UBA-Conicet detalló que en el AMBA un comercio pequeño con una potencia contratada de 10 kw y un consumo de 1.200 kwh/mes pasó de abonar una factura de luz de $64.775 en enero a $266.213 en febrero incluyendo impuestos, que son las que comenzaron a llegar en marzo.
Por otra parte, resaltaron, una industria pequeña con una potencia contratada de 35 KW y un consumo mensual de 6.500 kwh/mes pasó de abonar una factura de $274.875 en enero a $1.060.187 en febrero. Esto es un aumento del 286% de un mes a otro.
“La evolución de las facturas de pequeñas industrias y comercios ha tenido un virtual congelamiento por un periodo prolongado. Hasta el mes de enero se observa, para las facturas de estos segmentos, incrementos inferiores a los principales índices de precios relevados por el INDEC desde febrero de 2019 a la vez que han mantenido un importante nivel de subsidios en el precio mayorista de la energía.
Bajo este análisis, en febrero de 2024 los comercios e industrias tendrán un incremento de sus facturas, incluido impuestos, del 2.102% y 2.113% respecto a febrero de 2019 mientras que los precios mayoristas y minoristas se incrementarían 1.920% y 1.689%, respectivamente, en igual periodo.
En el interior las subas también se sintieron con fuerza, como en el caso de un comerciante de chacinados cordobés de Huinca Ranancó. La historia de Darío Villaruel se hizo viral porque fue a pagar una factura de electricidad de su local, por $840.000, con el dinero dentro de una carretilla. Lo hizo a modo de protesta contra los aumentos en el servicio y lució una remera que decía: “Cuando vaya a pagar la luz, no diré nada pero habrá señales”.
Esta situación activó acciones de distintos gobernadores, en busca de paliar los efectos de los incrementos en sus territorios. El mandatario Martín Llaryora, de Córdoba, otorgó créditos para cancelar en tres cuotas la luz. En Tierra del Fuego y Misiones comenzaron a aplicarse planes de contingencia similares. Aunque es solo un parche porque las boletas deben pagarse todos los meses.
Para quienes viven en edificios los incrementos también son fuertes, ya que la electricidad en las zonas comunes no están subsidiadas y las subas se añaden a los valores de las expensas del consorcio.
En un edificio de 15 pisos en el microcentro de la Ciudad de Buenos Aires (CABA) en febrero había llegado una factura de $800.000 mientras que saltó a $2.300.000 a pagar en marzo. Para otro consorcio, ubicado en Palermo, la boleta pasó de $550.000 a $1.725.000 en ese mismo período. En ambos casos las subas superan ampliamente el 300 por ciento.
Esta situación golpea a los municipios por el pago del alumbrado público por luminarias de calles y avenidas. En ese sentido fue una denuncia del intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, cuando recibió una factura de luz que superaba los $270 millones.
EL MUNICIPIO DE ESTEBAN ECHEVERRÍA RECIBIÓ UNA FACTURA DE LUZ DE $270 MILLONES
— Fernando Gray (@fernandogray) March 19, 2024
Recibimos la factura de alumbrado público municipal por un monto de $271.114.175. En febrero, la tarifa había sido de $71.882.479, lo que significa un aumento del 382% en solo un mes.
En la factura… pic.twitter.com/0gKSzfEmQP
“Recibimos la factura de alumbrado público municipal por un monto de $271.114.175. En febrero, la tarifa había sido de $71.882.479, lo que significa un aumento del 382% en solo un mes”, apuntó Gray.
El defensor Adjunto del Pueblo de la provincia de Buenos Aires y ex interventor del ENRE durante la gestión de Alberto Fernández, Walter Martello, mostró en su cuenta de X un ejemplo de un centro de imágenes de salud: pasaron de pagar $1,8 millones en febrero a $5,5 millones en marzo, a pesar de haber tenido un menor consumo.
Ante las medidas que definió la Secretaría de Energía, a estos incrementos se sumarán las actualizaciones mensuales en el costo de distribución a partir de abril y el nuevo criterio de asignación de subsidios, la Canasta Básica Energética (CBE), para los residenciales.
Además, la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista Eléctrico (Cammesa) publicó su estimación de precio estacional de la energía para el período mayo-julio de 2024. Allí suele realizarse la proyección del costo de todo el sistema eléctrico nacional que compran las distribuidoras y grandes usuarios de la Argentina.
Los usuarios residenciales calificados como de altos ingresos, comercios, industrias, edificios públicos y universidades, entre otros, podrían recibir en breve un nuevo aumento en sus boletas de luz que se sumará al que se aplicó en febrero. Así, ese grupo pagará 100% más solo por el concepto del costo de la electricidad en sus facturas finales para el trimestre mayo-julio.