El presidente de YPF, Horacio Marín, presentó este jueves en una conferencia con inversores su “Plan 4 X 4″ para cuadruplicar el valor de la empresa estatal en los próximos cuatro años. Allí anunció la inversión más grande de su historia en Vaca Muerta por USD 3.000 millones según informaron, para aumentar la producción en un 24 por ciento. La intención de la nueva gestión de la empresa es concentrar mayores esfuerzos en la explotación de los combustibles no convencionales donde, entienden, habrá mayor rentabilidad. El desembolso total para este año será de USD 5.000 millones, teniendo en cuenta todas las operaciones.
El dato se conoce luego de que la petrolera presentara este miércoles su balance correspondiente al 2023 en el que se consignó una pérdida de USD 1.277 millones tras el revalúo contable de 55 campos maduros de convencional que esperan vender próximamente que restó USD 1.800 millones, menor venta de gas y el impacto de la devaluación.
El año pasado la compañía invirtió USD 5.700 millones, un 36% más que en 2022 pero una cifra mayor a la de 2024 cuando se reducirá la inversión en torno al 12 por ciento. La actividad de “no convencional”, llamada así por tener un alojamiento distinto en el suelo y un proceso de extracción más sofisticado, fue el principal eje de crecimiento de YPF. El equipo de Marín considera que YPF debe enfocar sus esfuerzos en el petróleo y gas no convencional de Vaca Muerta para generar mayor rentabilidad.
Los detalles del plan fueron presentados por Marín en una conferencia con inversores al igual que sus cuatro ejes:
- Aceleración de la producción de petróleo en Vaca Muerta: “A partir de los niveles de competitividad y eficiencia alcanzados en los últimos años, YPF espera un crecer a partir del desarrollo de Vaca Muerta, al pasar de una producción de 97 mil barriles de petróleo por día en 2023 a 250 mil barriles de petróleo por día en 2027. Como resultado, el 80% de la producción total de petróleo de la compañía será no convencional”.
- Disciplina financiera en la gestión de inversiones: “La compañía priorizará las inversiones de mayor rentabilidad, buscando maximizar el valor para sus accionistas. En este sentido, en febrero de 2024, el Directorio de la compañía aprobó un plan de optimización de yacimientos convencionales maduros. El plan contempla la salida de más de 50 bloques convencionales, que representan el 60% de la producción de petróleo convencional y el 40% de la producción de gas convencional y menos del 1% del EBITDA de la compañía. De esta forma, YPF busca racionalizar significativamente sus costos operativos, reduciendo un 50% el lifting cost en los próximos 2 años y redirigir alrededor de 800 millones de dólares de inversiones al desarrollo de Vaca Muerta”.
- Maximizar las eficiencias operativas en los negocios: “En el negocio del Upstream, YPF aspira a continuar mejorando las eficiencias operativas en la perforación y fractura de pozos entre un 10% y 15% en los próximos 2 años mediante la automatización, estandarización de procesos y la incorporación de nuevas tecnologías. Adicionalmente, en el negocio del Downstream, la compañía apunta a crecer un 10% los niveles de procesamiento de sus refinerías y reducir costos operativos que le permitan mejorar los márgenes del negocio hasta 3 dólares por barril en 2027″.
- Proyecto de LNG en Argentina: “El cuarto y último pilar del Plan se basa en la construcción de la primer planta de licuefacción para exportar GNL en Argentina. Se trata de un proyecto transformador para la compañía en el mediano y largo plazo, que le permitirá al país exportar anualmente unos 15 mil millones de dólares de gas a partir 2032. YPF espera liderar el proyecto en conjunto con otros socios de la industria”.
Según explicaron desde la petrolera, el “Plan 4 X 4″ se basa en cuatro pilares fundamentales de corto, mediano y largo plazo bajo la premisa de concentrar los esfuerzos en las actividades más rentables. En base a esos ejes, las nuevas autoridades proyectan que el valor de YPF supere los USD 25.000 millones para finales de 2027.
De la mano de ese crecimiento esperan que las exportaciones de hidrocarburos del país alcance para 2030 cerca de USD 30.000 millones y permita un superávit en la balanza comercial de unos USD 28.000 millones. “Tenemos que trabajar en la productividad. Para eso como compañía debemos generar procesos de trabajo desde la conducción”, habían expresado recientemente fuentes de YPF a Infobae.