La principal empresa transportista de electricidad de alta tensión del país, Transener, advirtió este miércoles a sus inversores que se encuentra en problemas financieros ante la falta de transferencias del Tesoro Nacional y que, de continuar así, no podrá hacer frente al pago de sus obligaciones operativas y salariales en término.
Tal como había publicado Infobae, el Gobierno mantiene pisadas partidas claves para el sector energético en medio del ajuste con el que el ministro de Economía, Luis Caputo, alcanzar el superávit fiscal en 2024. Esta situación puso en alerta a los operadores del mercado eléctrico. En este caso, Transener, cuyo principal accionista es el Estado Nacional, anticipó que analiza reclamos administrativos y judiciales para perseguir el cobro de las deudas que reclaman a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa).
En concreto, las generadoras y transportistas de energía reciben por sus servicios pagos a través de Cammesa, que actúa como intermediario con las distribuidoras, las cuales son las encargadas de cobrarle a los usuarios y que mantienen deuda con la administradora. Las deudas se acumularon desde finales de 2023 y el Gobierno de Javier Milei aún no definió una hoja de ruta para la normalización de esos compromisos.
A través de un documento difundido por Transener, firmado por su responsable de relaciones con el mercado, José Santiago Refort, la transportista comentó que tomaron conocimiento de que se había celebrado una reunión del comité ejecutivo de Cammesa en la que se trató la situación de mora en el pago a sus acreedores.
“En la mencionada reunión, ante el pedido concreto de precisiones, no se obtuvieron certezas sobre los futuros pagos que aseguren recibir en marzo al menos el ingreso de una remuneración mensual. La falta de recursos en Cammesa para atender los compromisos habituales es consecuencia de la demora en los pagos por parte de los distribuidores -que a la fecha han cancelado solamente el 49% de lo adeudado, conjuntamente con la falta de los necesarios aportes del Tesoro Nacional para cubrir los subsidios otorgados”, consignó el texto.
“A la fecha está pendientes de pago el 50% de la factura de los servicios prestados en noviembre y el total de la de diciembre 2023, por un total de $11.900 millones más intereses, estando próxima a vencer la factura de enero 2024, y sin certeza respecto a los futuros pagos. Teniendo en consideración que el 95% de los recursos financieros de TRANSENER S.A. provienen del pago de Cammesa, este incumplimiento se traduce en el desfinanciamiento de la Sociedad”, agregaron.
Si bien la empresa reconoció que con el aumento en su tarifa que le habilitó la Secretaría de Energía tiene sus necesidades “razonablemente” cubiertas, alertaron por posibles dificultades en el servicio: “Es indispensable el cumplimiento por parte de CAMMESA del pago en término, de lo contrario obliga a la sociedad a mantener los egresos reducidos a un mínimo operativo que solo es aceptable en un muy corto plazo; de mantenerse tendrá impacto en la normal capacidad de atención del Sistema de Transporte, con el consecuente riesgo operativo”.
“Sobre lo descripto habiendo notificado al ENRE, Cammesa y Secretaría de Energía de la Nación sobre la situación mencionada, no hemos recibido certezas y por lo tanto, hemos puesto en conocimiento de las autoridades que de no cobrar al menos una transacción completa durante marzo, Transener no podrá cancelar sus obligaciones operativas y salariales en término. La sociedad controlada, Empresa de Transporte de Energía Eléctrica por Distribución Troncal SA (TRANSBA), se encuentra atravesando el mismo escenario debido a la falta de pago por parte de CAMMESA”, advirtieron.
“Es importante mencionar que la situación crítica a la que se ve expuesta la Sociedad corresponde a menos del 2% del total de los costos del MEM que administra Cammesa, o sea unos 20 millones de dólares mensuales y representa aproximadamente 150 pesos en la factura de un cliente residencial”, concluyó el comunicado.
La pregunta que surge ahora desde estas compañías y cámaras sectoriales es hasta cuándo podrán aguantar. Hay varias grandes, con más espaldas, y otras que sólo soportan retrasos de un mes y dependen 100% de lo que les pague Cammesa.
¿Hasta cuándo?
Las generadoras y las transportistas, las más complicadas financieramente en este momento, advierten que no saben por cuánto más podrán sostener el negocio.
Son las que cobran 100% de Cammesa, que a su vez recibe pagos de las distribuidoras, las encargadas de cobrarle a los usuarios. Con tarifas pisadas por años, esas distribuidoras se “financiaron” no pagándole a Cammesa y acumularon una deuda total de más de $400.000 millones que era solventada mes a mes con aportes del Tesoro. Con la política de “no hay plata” esos fondos se cortaron, Cammesa no recibe dinero –los privados tampoco transfieren su parte– y, por lo tanto, no paga.
“Los transportistas aguantan cero, no tienen otro ingreso. Los generadores, si tienen contratos con privados, quizás estén un poco mejor”, resumió un experimentado ejecutivo del sector. Dos datos que grafican con crudeza el contexto: este mes, Transener, la transportadora de alta tensión que es mitad de Pampa Energía y mitad del Estado, por medio de Enarsa, pagó los sueldos en dos partes, y febrero fue el primer mes en 15 años en el que no se le pagó a las empresas la cuota del Fondo para Inversiones Necesarias que Permitan Incrementar la Oferta de Energía Eléctrica en el Mercado Mayorista (Foninvemen).
“El Gobierno nos dice que se arregla en unos meses porque la suba de tarifas hará que las distribuidoras empiecen a pagar, pero con mucha suerte podrían llegar al 70% del total. ¿Quién va a poner el otro 30%? No me parece mal tener el ancla política y macroeconómica en el superávit fiscal, pero no está bien que no nos llamen para resolver este tema. Es un agujero que hay que tapar y tiene alternativas para hacerlo, pero el mensaje es ‘no te pago y no te pago’. Veremos cómo sigue”, se preguntó el ejecutivo.