A pesar de las expectativas de un incremento significativo de la producción, la caída de los precios internacionales limitaría el ingreso de dólares por las ventas de maíz. Si bien aún se advierte cierto retraso en las compras externas, el volumen de exportaciones para la campaña 2023/24 crecería un 53% interanual, lo que representa un incremento en valor de apenas el 20%, según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
El maíz es el segundo complejo exportador más importante del agro y el cuarto a nivel país. En 2023 aportó USD 6.409 millones en exportaciones, un 33% menos que el año anterior debido a la sequía. Este guarismo representó el 9,6% de las exportaciones argentinas totales el año pasado, que según el Indec, alcanzaron los USD 66.701 millones.
Sin embargo, las proyecciones para la campaña 2023/24 son más alentadoras y anticipan un incremento de 58% de la producción con respecto a la campaña pasada si efectivamente se alcanza una cosecha de 57 millones de toneladas.
Desde la BCR, indicaron que, considerando que el mercado internacional es la principal fuente de demanda para el cereal argentino, las estimaciones indican un repunte en las exportaciones del cereal. Aunque cabe destacar que el arraigado consumo interno de maíz en Argentina desempeña un papel crucial y representa un 29% del total proyectado a cosecharse para la campaña 2023/24.
Exportaciones en volumen
En cuanto a las ventas externas en volumen, los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) junto con estimaciones propias señalan que durante el ciclo 2022/23 se habrían exportado 25,5 millones de toneladas de maíz, muy por debajo del promedio de 34,3 millones de toneladas exportadas durante las cinco campañas previas.
“Sin embargo, con la recuperación de la producción, el volumen embarcado al extranjero lograría repuntar durante la campaña 2023/24 y alcanzaría 39 millones de toneladas. Todo esto en la medida en que el clima acompañe y la cosecha avance sin dificultades”, indicó la BCR.
En detalle, se prevén exportaciones por aproximadamente 14,3 millones de toneladas entre marzo y junio, que corresponde principalmente a la producción temprana. Así, casi que se duplicarían las 7,9 millones de toneladas exportadas en igual período del ciclo 2022/23.
Por otro lado, el pico de exportación podría alcanzarse en agosto, con un volumen importante de 5,1 millones de toneladas, por encima del pico alcanzado en dicho mes el año previo con 3,8 millones de toneladas.
Toneladas
De esta manera, entre julio y octubre, los envíos al extranjero podrían sumar 17,8 millones de toneladas, evidenciando el mayor peso de la cosecha tardía. “El volumen por exportar en la nueva campaña 2023/24 crecería entonces un 53% interanual, representando exportaciones adicionales de 13,5 millones de toneladas respecto del ciclo previo. Siempre aclaramos que hay que esperar a la cosecha y que el clima aporte al logro de estos objetivos”, señaló el informe.
“No obstante, la recuperación de las exportaciones se inserta en un contexto de precios internacionales del cereal a la baja. Proyectamos el valor de las exportaciones de maíz para todo el ciclo 2023/24 en USD 7.657 millones, un incremento de USD 1.289 millones en el ingreso de divisas por ventas del cereal respecto del ciclo previo. Así, el crecimiento estimado de las ventas externas en valor podría alcanzar el 20% interanual, siendo considerablemente menor que el aumento en el volumen. Todo esto si se mantienen los precios internacionales actuales”, agregó.
En tanto, el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central de la República Argentina (BCRA) indica que los despachos argentinos alcanzarían un valor total en torno a USD 82.875 millones, mientras que, según estimaciones de la BCR, el valor exportado por la cadena de maíz en el año calendario actual podría ascender a aproximadamente USD 7.896 millones.
Así, a pesar del sólido incremento de las exportaciones de maíz en volumen, se espera que el valor exportado por el complejo maicero disminuya levemente su participación respecto del año previo, alcanzando el 9,5% del valor exportado por Argentina en 2024, si permanecen los bajos precios actuales.