Lejos del panorama incierto que brinda el negocio de los alquileres, la compraventa de inmuebles en Ciudad de Buenos Aires (CABA) sigue dando indicios de recuperación. Esta vez el repunte fue leve, pero sirvió para mantener la tendencia y generar buenas perspectivas de cara al futuro. Según datos publicados por el Colegio de Escribanos, en enero de 2024 se realizaron 1.882 actos de escrituras en CABA, un valor que marcó una mejora de 1.8% en relación al mismo mes del año pasado.
En comparación con diciembre de 2023, los actos bajaron un 58,7% (en el último mes del 2023 se hicieron 4.560 escrituras), pero se trata de un decrecimiento estacional. Cuando se observa únicamente lo ocurrido durante los meses de enero, se encuentra que el resultado de 2024 es el mejor de los últimos cuatro años.
No fue tan positivo el resultado en términos de valor. De acuerdo al estudio del Colegio de Escribanos, las 1.882 operaciones involucraron un monto total de $143.030 millones en forma conjunta, lo que representó una mejora del 244,4% en comparación a enero de 2023.
Cabe recordar que la inflación registrada durante ese período fue de 254,2%. Por lo tanto, el incremento nominal de la facturación no fue lo suficientemente alto como para contrarrestar el efecto negativo de la inflación. Dicho de otra forma, el monto de las transacciones cayó en términos reales.
El monto medio de los actos fue de $75.999.357 (90.710 dólares de acuerdo al tipo de cambio oficial promedio): creció 238% en un año en pesos, pero en moneda estadounidense mermó 23,5%.
Por otro lado, la entidad destacó que en enero hubo 69 escrituras formalizadas con hipoteca, lo que dejó como resultado una caída del 11,5% respecto al mismo mes del año pasado.
Las perspectivas para 2024
Como se mencionó, la transacción de 1.882 propiedades en CABA implicó una mejora en comparación a los eneros anteriores, pero a su vez, marcó el nivel de operaciones más bajo desde marzo de 2023, lo que invita a una lectura positiva pero cautelosa por parte de los referentes de la actividad.
“El dato de enero no refleja grandes variaciones: hay una ligera alza, pero no son porcentajes altos. Y quizá en algún mes se vea alguna leve baja interanual. De todas formas, como todo comienzo de año, genera alguna expectativa por si se genera en el orden macroeconómico algún estímulo para el sector”, analizó Jorge De Bártolo, presidente del Colegio de Escribanos de CABA.
“Si hacemos un análisis de los valores históricos se evidencia que -cuando hay crédito hipotecario- el mercado inmobiliario se duplica. Si en enero 2018 hubo 4500 operaciones, casi 1900 fueron con hipoteca. En 2024, el total de operaciones no llega a 1900, pero menos de 70 fueron con crédito. Es decir, una herramienta así ya pone de base lo que es el total de la actividad hoy”, apuntó De Bártolo.
Alquileres en alza
En la otra cara del negocio el panorama es bastante diferente. No solo sigue la escasez de oferta, sino que además los inquilinos tienen cada vez más dificultades para pagar la renta. Los contratos de alquiler establecidos previo a la aplicación del DNU del Gobierno siguen siendo válidos y, en su mayoría, experimentan ajustes anuales. En el próximo mes de marzo, se anticipa un aumento sin antecedentes del 165,50% marcando un nuevo récord. Esto implica que aquellos inquilinos que abonaban $100.000 por un departamento de tres ambientes ahora deberán destinar $265.500 mensuales hasta febrero de 2025.
Estos ajustes en el costo del alquiler se determinan mediante el Índice de Contratos de Locación (ICL), cuya elaboración está a cargo del Banco Central. A pesar de la derogación de la normativa creada en junio de 2020, ésta aún conserva su vigencia para los contratos ya firmados.