Este lunes se observó una recuperación del monto negociado en el mercado mayorista, con USD 369 millones en el segmento de contado, unos USD 92 millones o 33,3% más que el viernes 2. El BCRA compró USD 99 millones, el 26,8% de la oferta privada. Por otra parte, las reservas internacionales del Banco Central experimentaron este lunes una caída leve de USD 22 millones para quedar en los 26.990 millones de dólares.
Tras una operatoria alcista por la mañana, con ganancia de cinco pesos, el dólar “blue” pasa ser negociado con caída de 15 pesos a las 15:30 horas, para ser ofrecido a $1.160 en el reducido mercado informal. Se trata de su precio más bajo desde el 15 de enero ($1.130). Con un dólar mayorista que ganó 1,70 peso a $829, la brecha cambiaria queda reducida a 39,9 por ciento.
Mientras los productores argentinos atraviesan una campaña agrícola con elevada incertidumbre por la cuestión climática y la política que se implementa para el sector desde el Gobierno nacional, los precios de los granos en el mundo se desmoronan. Este panorama también se transforma en un escenario de preocupación para la administración de Javier Milei, que aguarda un muy buen aporte de los dólares del campo mediante sus exportaciones, especialmente de soja y maíz.
Tras una operatoria alcista por la mañana, con ganancia de cinco pesos, el dólar “blue” pasa a negativo antes de las 14 horas y es ofrecido a $1.170 en el reducido mercado informal, con baja de cinco pesos respecto del viernes. Se trata de su precio más bajo desde el 15 de enero ($1.130). Con un dólar mayorista a $829,10, la brecha cambiaria queda reducida a 41,1 por ciento.
La primeras posturas de venta en el segmento mayorista del dólar marcan un precio de $829,10 por unidad o $1,80 por encima del cierre anterior. Desde que empezó el año el tipo de cambio oficial registra un incremento de 2,6% desde los $808,45 de finales de diciembre de 2023.
Ya avanza en el Congreso la aprobación de una nueva amnistía fiscal con blanqueo impositivo. Y eso, tan solo a semanas de que Javier Milei asumiera la presidencia de la Nación. A pesar del efecto negativo de estas políticas en la moral fiscal de la población, no hay dudas de su acierto en el contexto actual del país, pues recién se cierra un ciclo de cuatro años del más rancio populismo, donde se espantaron capitales y residentes fiscales y se provocó una de las crisis económicas más graves de nuestra historia. Por supuesto que esta situación se ha venido gestando desde hace mucho tiempo atrás ya que, salvo el interregno promercado del gobierno de Cambiemos, tuvimos doce años previos de gobiernos kirchneristas, cada vez más nocivos.
La Argentina aparece en el ranking de países relevados por el FMI para la elaboración de las perspectivas económicas para 2024 entre los que registrará más alta inflación y mayor recesión.
El acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que publicó en los últimos días el documento conocido como staff report, en el que se explicitan los compromisos consensuados con el Gobierno, despeja sin dudas para el equipo económico una parte del camino hacia el próximo mojón de la gestión: abril.
Algunos periodistas supuestamente versados en temas económicos repiten insistentemente que antes de dolarizar habría que hacer otras reformas, especialmente flexibilizar el mercado de trabajo. Caso contrario, sostienen, la economía no podría absorber shocks externos sin provocar una fuerte recesión.
Los analistas financieros, tanto en la Argentina como en el exterior, siguen de cerca la evolución de las variables de la economía local y efectúan sus proyecciones sobre el nivel que alcanzará el tipo de cambio al cierre del corriente año, tras la suba del dólar oficial a mediados de diciembre 2023, y teniendo en cuenta la espiralización posterior de la tasa de inflación.