El secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, uno de los funcionarios que más tempranamente se incorporó a los equipos técnicos de La Libertad Avanza y a la campaña electoral de Javier Milei, hizo hoy una dramática descripción del estado del sistema eléctrico de la Argentina.
En un hilo de 5 posteos en la red social X (ex Twitter), Rodríguez Chirillo afirmó que el sector eléctrico de la Argentina “está al borde del colapso luego del intervencionismo aplicado durante los últimos gobiernos. Los valores bajos de las tarifas llevaron al alto consumo”.
El funcionario, que ya defendió ante las comisiones de la Cámara de Diputados la parte energética del proyecto de ley ómnibus y que en el dictamen alcanzado en la semana que pasó (del que ahora habrá que quitar la parte fiscal, como anunció el ministro de Economía, Luis Caputo), suministró gráficos y tablas de datos para respaldar su mensaje.
“Ahorro” engañoso
“Las tarifas -dijo- no reflejan el costo real y cubren apenas el 45% del mercado mayorista. Muchos argentinos creían que ahorraban con esos precios artificiales, pero lo pagaban a través de subsidios del presupuesto del Estado argentino. Eso se acabó en noviembre pasado”.
El gráfico que el funcionario agrega a ese comentario muestra incluso que en 2014 la situación había llegado a un extremo aún peor: las tarifas cubrían apenas el 14% del costo del servicio y el 86% restante era cubierto con subsidios. En los cuatro años siguientes la proporción de subsidios se fue reduciendo, hasta lograr que en 2019 las tarifas cubrieran el 64% del costo. Pero desde 2020 el porcentaje de subsidio volvió a crecer, hasta el 55% el año pasado,
Y prosiguió: “El problema es real. No se recauda y los servicios están en mal estado”.
Chirillo remontó la causa de la crisis a las políticas aplicadas en los últimos 20 años. Durante ese período, explicó, “el Estado argentino compensó a CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA, la empresa mixta que maneja el sistema e insume una enorme porción de la masa de subsidios) con el envío de 104 mil millones de dólares. ¿Dije bien? Sí. Esto es tan increíble como desconocido por los argentinos”.
Zonas frías versus canasta básica energética
Una de las dificultades que surgieron respecto de las propuestas de reforma del sector energético en general es, precisamente, la resistencia a la eliminación de regímenes como el “zonas frías”, que originalmente incluyó a la Patagonia pero en 2021 el Congreso, por iniciativa de Máximo Kirchner en la previa de las elecciones legislativas, el Congreso extendió a zonas de clima templado, hasta llevar el número de beneficiarios a más de 4 millones de hogares.
Hay que enfocar los subsidios hacia los sectores más vulnerables, estableciendo volúmenes indispensables de consumo de energía a ser subsidiados, por zona bioambiental”
Para reducir el monto de subsidios, además del aumento de tarifas (en distribución de electricidad, por caso, Edenor pidió un aumento promedio del 83%) el gobierno propone establecer una “canasta básica energética” para atender a los sectores más pobres.
Así lo dijo Chirillo en su posteo en X: “Hay que enfocar los subsidios hacia los sectores más vulnerables, estableciendo volúmenes indispensables de consumo de energía a ser subsidiados, por zona bioambiental. Asegurando que el subsidio llegue a quien lo necesita”.
Políticamente leal, el secretario de Energía cerró su hilo reivindicando las instrucciones del presidente de la Nación. @JMilei, dijo, arrobándolo, “marcó el rumbo correcto, pidiendo que las tarifas cubran los costos reales y se eliminen las transferencias del Estado. Así, vamos a ampliar y mejorar los servicios de electricidad y de gas, para que la energía se convierta en motor de crecimiento en la Argentina”.