Con una fuerte autocrítica respecto a lo que ocurrió durante la gestión de Alberto Fernández, el exministro de Economía Martín Guzmán aseguró hoy que el Gobierno de Javier Milei ya comenzó a dolarizar la economía, que ese es el único plan que tiene y advirtió por las consecuencias que eso tendría para el futuro del país.
Además, analizó que las medidas que ha tomado el Poder Ejecutivo en las primeras semanas no están funcionando y dijo que, aunque el plan funcione, la inflación se va a estabilizar en lo niveles más altos de los últimos meses de 2023.
En una extensa entrevista con el periodista Ernesto Tenembaum en Radio Con Vos, Guzmán dijo que lo que más le preocupa “es algo de lo que no se habla en estos días. Creo que el Gobierno ya ha comenzado a dolarizar la economía, y nada sería tan grave para la Argentina como acción del Gobierno actual el dolarizar la economía. Eso sería que el país abandone el camino del desarrollo”.
Guzmán explicó que ese plan está explicitado en la emisión del Bopreal, el bono en dólares con el que se busca poner fin a las Leliqs y a los pases del Banco Central. “Es un conjunto de operaciones para convertir el pasivo remunerado del Banco Central en pesos en un pasivo en dólares”, explicó.
“Si uno quisiera quebrar el Banco Central, es hacer lo que se está haciendo esto. Nunca el Banco Central emitió deuda en dólares, porque no emite dólares. Sus pasivos están en la moneda que emite. Puede tener efectos inflacionarios, pero no quiebra. Ahora, por primera vez, tenemos deuda del Banco Central en dólares. ¿Qué pasa si el día de mañana no tiene los dólares para pagar la deuda? Es una situación novedosa en la Argentina. Y no hay ningún país serio que dolarice. A los países que pierden su moneda abandonan el camino del desarrollo”, añadió.
Guzmán admitió que desde hace años el país tiene “un problema fenomenal con la moneda, con la falta de confianza en la moneda”, pero advirtió que “eso no significa que haya que abandonarla”.
Si bien dijo que ese esquema de cambio de pasivo en pesos a pasivo en dólares del Banco Central “es algo que hoy es muy chico y no está funcionando”, aseguró que “es parte de un esquema mucho más general que tiene el Gobierno, que además es el único plan que tiene”.
Asimismo, afirmó que la inflacuión “puede bajar respecto al valor de diciembre altísimo por el salto devaluatorio, pero el piso de la inflación mensual se va a parecer a las tasas más altas de los últimos meses del Gobierno anterior, que fueron por encima del 10%”.
Al analizar el plan que lleva adelante el Gobierno y el ministro de Economía, Luis Caputo, Guzmán afirmó que “el ajuste lo paga principalmente la clase media, la población de trabajadores informales que no tienen hijos y los jubilados”, aunque aseguró que “es iluso creer que eso termina allí” porque esos sectores van a pujar por recuperar parte de los ingresos perdidos.
“Reducir el déficit es, básicamente, administrar el conflicto distributivo, quién paga el ajuste. Y eso va a volver a generar presión en los precios. Y va a ir apreciando el tipo de cambio real oficial”, explicó.
“(Milei) Venía diciendo que el plan era dolarizar y uno no ve que sea otro el plan. Y hay tantas cosas ocurriendo que es muy difícil priorizar. Para mí, lo más importante es esto, no lo único, pero sí desde una perspectiva de desarrollo histórico como Nación. Debemos entender a qué nos estamos exponiendo. Cada vez se vuelve más factible hacerlo sin un salto cambiario. La relación entre los pasivos en pesos y los dólares con los que cuenta el Banco Central va modificándose de modo tal que cada vez es más fácil llegar a un punto donde no necesitás un gran salto cambiario. La dolarización se hace más tentadora para el Gobierno, pero a un costo enorme para el país a futuro”, añadió.
Las consecuencias de la dolarización y autocrítica
En la extensa entrevista, Guzmán dijo que las consecuencias que traería en el futuro la dolarización de la economía argentina van a ser peores que lo que ocurrió con la salida de la convertibilidad.
“La convertibilidad generó crecimiento al principio de una forma desigual y, al final, tuvimos la peor crisis económica y social de la Argentina. No es un ”, recordó Guzmán, quien además advirtió que pese a que era más sencillo salir de ese plan que una dolarización, igual no se hizo por el éxito que había tenido para frenar la hiperinflación.
“Esto es aún peor, hoy tenemos una crisis de inflación y de poder adquisitivo de los ingresos. Con la dolarización, vas a ver una crisis del sistema productivo, no hay trabajo, no hay ingresos para mucha gente. El gran problema pasa a ser el desempleo. Pensemos si vamos a poder tener un país competitivo cuando el valor de la moneda lo determine EEUU”, resaltó.
Guzmán igual admitió que los problemas que existen en la economía argentina el Gobierno de Alberto Fernández no pudo resolverlo, y que esa es una gran ventaja para que la actual administración lleve adelante su plan.
“Claramente hubo problemas y todos somos parte de esos”, dijo el exministro, quien volvió a marcar como un punto de inflexión la carta pública que la entonces vicepresidenta Cristina Kirchner publicó en septiembre de 2021 con críticas al plan económico que llevaba adelante en aquel momento.
“Lo que hubo fue la imposibilidad de continuar con un programa económico que era el que tenía sentido y le estaba dando progreso a la Argentina. Al haber sido eso dinamitado, el Gobierno actual tiene una ventaja porque no es que hoy está ordenada la oposición sobre la idea de un programa y eso le permite avanzar de la forma que avanza generando el daño que considero que le está generando a la sociedad argentina, convirtiéndola en una sociedad más partida”, sostuvo.
Entre otras cosas, Guzmán reconoció que cualquier Gobierno debe tener como prioridad bajar el déficit fiscal. Además, cuestionó la baja del impuesto a las Ganancias que aplicó Sergio Massa durante la campaña electoral, algo que el actual Gobierno anticipó que buscará revertir.
“Eso se hizo con el voto de Milei, que era diputado, y uno puede mirar el discurso y la incongruencia de lo que hoy plantea. Si vos vas a reducir el impuesto, te cae la recaudación y eso alguna consecuencia va a tener. Si bajás un impuesto y no subís otro o bajás gasto, lo vas a financiar con emisión, y eso va a ir a inflación. Vas a financiar la baja de un impuesto con inflación. Hoy, el piso a partir del cual tributarían con el impuesto que se eliminó sería de casi un millón de pesos. Como no hago otra cosa, el impacto es inflacionario. El resto de los trabajadores va a tener impacto. Es una medida regresiva. Todos tienen que ser parte de la discusión porque es muy fácil decir bajo un impuesto, le mejoro la vida a toda esta gente. Pero se la empeoro a un montón de otra gente, y eso en la Argentina pasa mucho. Se llama restricción de presupuesto. De la nada, nada viene, decía un profesor. Nadie te regala nada”, subrayó.
Guzmán también dejó un elogio para Juan Grabois, quien días atrás había admitido que se equivocó con sus críticas durante la gestión en el Ministerio de Economía y reveló que lo llamó para pedirle disculpas: “Creo que está teniendo un rol muy valioso para el espacio, hablando con mucha gente”, señaló.