El banco de inversiones Goldman Sachs recomendó comprar bonos de la deuda argentina

Un informe de la entidad redujo las posibilidades de default de la Argentina y dijo que es clave la reestructuración de deuda con el FMI

La Argentina volvió al mapa de los grandes bancos de inversión globales (2023 Reuters/Andrew Kelly)

La sorpresa de los grandes inversores es que la Argentina apareció en los mapas de inversión del mundo. El reciente informe de Goldman Sachs, el líder global en banca de inversión y servicios financieros, incorporó en sus recomendaciones de compra los bonos de la deuda argentina. Estos son los datos sobresalientes del informe:

-”Hemos agregado a la Argentina a la canasta gracias a las expectativas de una mejor trayectoria política y nuestra opinión es que el crédito argentino aún proporciona una prima significativa a pesar del reciente repunte.”

-”Los bonos argentinos subieron 32% desde las elecciones de noviembre, un rendimiento superior de 24 puntos porcentuales comparado con pares calificados de manera similar. El rendimiento superior refleja la expectativa de que se produzca un ajuste fiscal muy necesario en el nuevo régimen, pero sin dolarización inmediata donde la retórica del Gobierno se ha suavizado.”

-”Desde esa perspectiva los recientes anuncios de la reforma fiscal y un significativo ajuste del tipo de cambio más los comentarios de apoyo del FMI han sido decisivos en nuestro panorama.”

-”Aún a 37 centavos de dólar, los bonos están significativamente por debajo de la par, sugiriendo que el mercado ve un alto riesgo de default y una relativamente baja recuperación de valor en el año próximo.”

-”Calculamos que las posibilidades de default se redujeron de entre un 70 u 80% a 60% porque carga sobre sus espaldas las bajas reservas.”

-”Para repuntar, el reciente ajuste cambiario tendría que provocar un cambio rápido en el saldo de la cuenta corriente y crear entrada neta de divisas. Se espera que esto suceda a través de una combinación de importaciones contenidas y más exportaciones competitivas.”

-”Para que esto suceda el reciente ajuste cambiario tendría que ir acompañado de una política monetaria y fiscal más restrictiva. Esta es la razón por la que los comentarios del FMI, tras los anuncios, fueron tan importantes. Es posible que el organismo se vea limitado a la hora de proporcionar más financiamiento a la Argentina, pero pueden proporcionar un alivio de liquidez en otras formas. Por ejemplo, renegociando el perfil de la deuda que el país mantiene con ellos.”

Aunque el informe es alentador, el mercado de bonos se mantuvo cauto y el riesgo país quedó casi sin cambios en 1.828 puntos básicos, con subas destacadas en los Globales 2041 (+5,95%) y 2038 (+2,79%).

En tanto, los dólares siguieron a la baja y circuló la sospecha de que el Banco Central había tenido una leve intervención con el AL30, a pesar de que habían prometido retirarse del mercado.

Según el trader Esteban Monte “el volumen de negocios fue elevado, pero no por intervención del BCRA sino por las cerealeras que cuando el CCL y el MEP llegan a la zona de $1.000 dejan de vender, para que rebote y volver a vender manteniendo a los dólares elevados para obtener una buena ganancia”.

Lo cierto es que el MEP finalizó con una caída de $33,75 (-3,2%) a $1.003,94 y el contado con liquidación (CCL) subió $5,72 (+0,2%) a $1.014,73. Poco a poco se va recortando la brecha con los dólares financieros que quedó en 25%. Si se lo compara con el “blue” que se derrumbó $80 (-7,4%), la brecha está en 20% y es una excelente oportunidad para los viajeros al exterior que deben pagar el dólar tarjeta a $1.312,99.

En el contado inmediato del Senebi, la plaza donde los negocios son bilaterales y no se publican en pantalla, el MEP cayó $5 a $1.010 y el CCL, $25 a $1.025.

Estos datos hacen que se acelere el avance del plan de ir a una liberación cambiaria sin sobresaltos, porque el ministro de Economía Luis Caputo, se propuso lograr el objetivo a través de una estabilización de la brecha y la reversión de la tendencia inflacionaria producto del sinceramiento de precios y del rezago monetario.

Para Salvador Vitelli, analista financiero y experto en agronegocios “hoy vimos un movimiento interesante de los bonos dollar linked (atados a la devaluación). El mercado está observando cómo se mueve el tipo de cambio real más allá del anuncio de un crawling peg (devaluación periódica regulada) de 2% mensual. El ancla fiscal va a tener que mostrar bastante contundencia para cambiar las expectativas. De todas maneras, el agro se está dinamizando más y hubo una buena compra de dólares por parte del Banco Central”.

Según Vitelli, si se mantiene el ritmo de 2% mensual de devaluación el tipo de cambio real a fin de diciembre sería de $647; en enero de $521 y en febrero de $426 debido a la elevada inflación que se espera.

En el mercado mayorista, la entidad se hizo de USD 236 millones elevando las reservas USD 368 millones a 21.499 millones. Este requisito que hizo notar Goldman Sachs a sus inversores para apostar a los bonos argentinos, parece ir cumpliéndose. Cuanto más alta sea la paridad de los títulos, mejor será el balance del Banco Central que los tiene valuados ficticiamente en una paridad de 100%, cuando apenas cotizan a 36% de ese valor.

El informe de la consultora F2 de Andrés Reschini señala que “tuvimos el primer movimiento del tipo de cambio luego del salto a $800. La cotización se deslizó 55 centavos equivalente a una tasa de 2% mensualizada. De mantenerse la tendencia a fin de mes terminaría en un precio cercano a $808,50 variando 362,5% en todo el año. En el MULC se operaron USD 378 millones que es menor a los 420 millones de la rueda anterior, pero sigue siendo mejor al volumen de la última parte de la gestión Massa. Cabe aclarar que el dato del último día hábil de la administración anterior al 7 de diciembre, proporcionado a través de canales informales, fue que el Central había vendido USD 119 millones cuando en realidad fueron USD 401 millones. El CCL repuntó algo al final de la rueda, pero la brecha con el tipo de cambio oficial sigue por debajo de 30% lo que representa un espaldarazo del mercado al plan de Caputo”.

Sobre el mercado de futuros la consultora indica que “luego de los rojos del miércoles, con un volumen mucho menor (319 mil contratos versus 928 mil) toda la curva ajustó en alza. Es probable que el mercado esté dudando del crawling peg a 2% con altos niveles de inflación esperando ya que erosionaría fuertemente la competitividad cambiaria conseguida por el salto del tipo de cambio. De todas maneras, sigue habiendo salidas netas y el Interés Abierto (contratos no cerrados) cayó 20,4 millones de modo que sigue sepultado en el nivel más bajo desde al menos 2021 hasta esta parte”.

La Bolsa, en tanto, tuvo una rueda negativa. Los negocios alcanzaron a $24.408 millones. El S&P Merval, el indicador de las líderes, no se contagió de la buena marcha de los mercados del exterior y perdió 1,25% en pesos y 1,9% en dólares.

Los ADRs -certificados de tenencias de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron toma de ganancias. Los más afectados fueron Telecom (-4,5%), Central Puerto (-4%) y Edenor (-3,8%).

Hoy es la última rueda de la semana y el mercado parece consolidarse alrededor de los bonos de la deuda en detrimento de las acciones. Hay tres datos que serán clave: la evolución del mercado de futuros, las acciones y los bonos. Del dólar no se esperan sorpresas.