El flamante ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro, tiene desde este lunes bajo su órbita las áreas de Transporte, Comunicaciones y Obras Públicas, ya que tanto Energía como Minería finalmente continuarán bajo el mando del Ministerio de Economía. En línea con la visión de Javier Milei, la nueva cartera tendrá como enfoque central “reducir la participación del Estado en la economía para darle espacio al sector privado” mientras que se buscará avanzar en un proyecto para modificar la Ley de Concesiones de la cual dependen, entre otros, ferrocarriles, puertos, centrales hidroeléctricas y corredores viales.
Hay otros desafíos en los que, según pudo reconstruir Infobae, Ferraro buscará avanzar: habrá una revisión en los contratos de obra pública, de los subsidios al transporte y las regulaciones del sector de las telecomunicaciones. Si bien no se oficializaron las designaciones de sus secretarios, hay algunos nombres que ya se encuentran confirmados.
La secretaría de Transporte que comandaba Diego Giuliano con el Frente de Todos quedará a cargo de Franco Mogetta, quien ocupaba esa misma cartera en Córdoba y fue el primer hombre del ex gobernador Juan Schiaretti en sumarse oficialmente a La Libertad Avanza. El abogado, que proviene del Partido Justicialista, tuvo en su gestión provincial los programas de gratuidad en boletos para jubilados, pensionados y estudiantes, el reclamo por los subsidios al transporte y la extensión del sistema SUBE.
Uno de los principales puntos de tensión en esa área serán los subsidios, algo que generó en las últimas semanas interrupciones en los servicios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Las erogaciones sumaron $1,2 billones, según se desprende de los datos de ejecución presupuestaria de Hacienda.
Por otro lado, el sector de Comunicaciones quedará a cargo de Tomás Sutton, socio del estudio MCA abogados y especialista en la industria de telecomunicaciones. Esa área que dependía del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), hasta el 10 de diciembre a cargo de Claudio Ambrosini, deberá pasar por un proceso burocrático para volver a ser Secretaría de Estado, ya que el ente nació por una ley votada en el Congreso. Allí habrá influencia en la regulación, las inversiones, las tarifas y las licitaciones de licencias de negocios vitales, como son la provisión de internet y la telefonía móvil.
La expectativa está puesta también en quién se ocupará de Obras Públicas, que hasta el 10 de diciembre era un Ministerio conducido por Gabriel Katopodis. Fuentes oficiales indicaron a Infobae que se transformará en una Subsecretaría dependiente del propio Ferraro. La semana pasada Luis Giovine, actual funcionario de la empresa eléctrica EPEC de Córdoba, se presentó ante empresarios como el futuro jefe del área, aunque no hubo confirmación oficial todavía.
Ahí se abrirá un frente de conflicto para el nuevo Gobierno sobre cuál será el futuro de las obras públicas. El mantra es claro: “No hay plata”. Pero actualmente hay unos 2.308 proyectos en ejecución a nivel nacional, por una inversión de casi $310.000 millones. Desde el equipo designado para el área aclaran que habrá una revisión integral pero que la premisa es “respetar contratos”. En el sector de la construcción advierten que una eventual paralización generará pérdidas millonarias para las empresas, caída del empleo, consecuencias sociales y un freno para la actividad económica.
Cambio de planes
Finalmente, Minería y Energía continuarán bajo la órbita del Ministerio de Economía de Luis “Toto” Caputo a diferencia de lo que estaba previsto originalmente. En La Libertad Avanza aseguran que Ferraro mantendrá el control de todo lo que respecta a infraestructura, pero que Caputo necesita avanzar rápidamente en los recortes de subsidios para llevar adelante el “ajuste de shock” del que habló Milei este domingo en su discurso.
Para la Secretaría de Energía está confirmado el abogado Eduardo Rodríguez Chirillo. En cambio, para Minería no hubo confirmaciones: la transición estuvo a cargo del abogado especializado Sergio Arbeleche, con gran conocimiento entre las empresas del sector, y la salteña Flavia Royón, quien se desempeñaba hasta el 10 de diciembre como secretaria de Energía.
Ley de Concesiones
Según adelantó, el equipo de Guillermo Ferraro trabaja en una reforma de la Ley de Concesiones sancionada en 1967 bajo la presidencia de facto de Juan Carlos Onganía. La norma faculta al Poder Ejecutivo a realizar obras públicas mediante su concesión a particulares, sociedades mixtas o entes públicos por el cobro de tarifas o peajes.
“Vamos a tratar de incentivar al sector privado para su inversión, tenemos un atraso de más de 20 años en infraestructura. La inversión necesaria según los organismos multilaterales es de 15 puntos del PBI, algo imposible de dar desde el Estado”, explicó el nuevo ministro de Infraestructura en una entrevista radial a pocos días de ser designado.
“Por desidia casi todas las concesiones se hicieron con una ley votada en los 60´ (ferroviarias, energéticas, centrales hidroeléctricas, corredores viales), tienen contratos desde los 90′ y vencieron en los últimos ocho años. Las últimas administraciones no generaron nuevas condiciones, por lo cual todas esas obras están en un porfolio de precariedad. Desde mediados de 2018 que no se hacen inversiones porque los privados no saben si van a continuar. No hubo mantenimiento y hay una enorme cantidad de reclamos porque no se respetaron las tarifas”, sostuvo Ferraro.