Un incesante movimiento de funcionarios nuevos comenzó desde las 7 de la mañana de este lunes en el primer día de gestión del nuevo equipo económico tras la asunción de Luis Caputo como jefe del Palacio de Hacienda. Sin medidas este lunes, Caputo reunió a su plantel de funcionarios varias veces a lo largo del día para terminar de ajustar el primer paquete de anuncios, que tendrá lugar este martes por la tarde, y las funciones de su gabinete recién conformado.
A las 15 de hoy, luego de reunirse con parte de su equipo, el ministro cruzó a la Casa Rosada junto a Pablo Quirno, nuevo secretario de Finanzas y su mano derecha. Allí se habrían encontrado con funcionarios de la CAF, Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe. Se trata del multilateral regional que se convirtió en uno de los prestamista de última instancia con Sergio Massa, a quien le prestaron USD 1.000 millones para completar un pago al FMI a mediados de este año. Pasadas las 16, regresó al Palacio de Hacienda con Quirno para continuar las reuniones de equipo. También se lo vio al designado presidente del Banco Central Santiago Bausili.
Primer día
Como en todo proceso de transición, el Palacio de Hacienda transitó esta primera jornada hábil del gobierno Milei con un reacomodamiento de los nuevos funcionarios en sus puestos, que en la mayoría de los casos todavía tienen designaciones oficiales pendientes. En un contexto, además, cargado de urgencias, en especial en el área económica.
Caputo llegó al Palacio de Hacienda minutos antes de las 11 desde la Casa Rosada tras la reunión de gabinete con el presidente. Salió por la puerta principal de la Casa de Gobierno, confirmó ante los medios que mañana martes anunciará un paquete de medidas e ingresó al ministerio por la calle Yrigoyen para dirigirse a su despacho. Antes de su llegada sus equipos técnicos estaban terminando de definir el alcance de los anuncios y cómo organizarán la presentación de esa primera oleada de iniciativas.
El Palacio de Hacienda transitó esta primera jornada hábil del gobierno de Javier Milei con un reacomodamiento de los nuevos funcionarios en sus puestos, que en la mayoría de los casos todavía tienen designaciones oficiales pendientes
Desde bien temprano el nuevo plantel tomó posesión de sus nuevas oficinas. El rediseño del gabinete económico que propició Caputo provocó algunas mudanzas internas en el Palacio de Hacienda, una suerte de rompecabezas de despachos. Uno de las oficinas más cotizadas, la que ocupaba hasta el jueves el ex viceministro Gabriel Rubinstein, quedará para Quirno.
La secretaría de Política Económica de Joaquín Cottani, así, pasará a tener lugar en el octavo piso de la sede de la cartera económica. Hasta el jueves tenía lugar la Secretaría de Relaciones Financieras Internacionales que encabezaba Marco Lavagna, un funcionario que continuará pero en la función de director del Indec.
En el cuarto piso, uno más abajo que Caputo, operará Carlos Guberman, experto en administración pública que pasó por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) y que ahora será el secretario de Hacienda, y encargado de supervisar el ajuste fiscal que buscará desde el minuto uno el nuevo gobierno. Aún no tienen lugar definido otros funcionarios clave del organigrama de Caputo como Pablo Lavigne (Industria y Comercio) o Juan Pazo, uno que podría tener varias áreas a su cargo.
Quirno y José García Hamilton, nombrado como secretario de Legal y Técnica, fueron los más activos en el ida y vuelta en los pasillos de Hacienda. También se lo pudo ver a Federico Furiase, uno de los designados en un consejo asesor que reportará directamente a Caputo.
Algunos detalles operativos traban la gestión en un momento de llegada de nuevas autoridades como el actual. Casi no hay funcionarios con firma habilitada por no estar todavía nombrados oficialmente en el Boletín Oficial. Sin esa autorización, hay decisiones administrativas, hasta las más elementales, que no se pueden tomar. Y, además, todavía existen casilleros de segundas y terceras líneas de cada secretaría que todavía están en blanco.
En la sede del Ministerio de Economía, aunque en los dos pisos más altos, también funcionará otra cartera con ese rango. Será la que encabezará Guillermo Ferraro, ministro de Infraestructura. Tendrá a su cargo Obras Públicas, Transporte y Vivienda. Esta mañana juntó bien temprano a su equipo, cerca de las 8, dio las primeras instrucciones para acomodar la gestión recién iniciada y cruzó a la Casa Rosada para participar de la reunión de gabinete.
Los secretarios para cada área tienen nombres aún no oficializados. El que tiene chances más certeras de ser secretario de Transporte es Franco Mogetta, que viene del gabinete de Juan Schiaretti en Córdoba. Obras Públicas no tiene candidato confirmado y Vivienda, tuvo dos nombres fuertes en esa danza: Ricardo Inti Alpert en primer lugar e Iván Kerr hasta este fin de semana. En los pasillos del ministerio aseguraban en estas horas que finalmente Kerr no formará parte del gabinete.
En Transporte habrá, al menos temporalmente, continuidad, como por ejemplo en las varias empresas que administran el transporte ferroviario. Por normativa, no pueden quedar descabezadas por tratarse de áreas relacionadas a los servicios públicos. Recién cuando tengan nombramiento los nuevos funcionarios podrán aceptarse esas renuncias.
Casi no hay funcionarios con firma habilitada por no estar todavía nombrados oficialmente en el Boletín Oficial. Sin esa autorización, hay decisiones administrativas que no se pueden tomar
La danza de nombres del equipo económico llegó también a Reconquista 266, la sede del Banco Central. Miguel Pesce, cuya renuncia todavía no fue aceptada, continuó en funciones este lunes mientras sigue la transición con Santiago Bausili. Pasa lo mismo con los directores. El BCRA no puede quedar acéfalo en ese órgano de decisión ya que la carta orgánica no permite que no haya quórum posible para sesionar.
Recién cuando se pueda alcanzar esa minoría operativa se podría aceptar las renuncias de todo el directorio antiguo. La mesa de dinero, por eso, todavía respondía formalmente a Pesce y por esa razón, ante la demora administrativa, el BCRA decidió aplicar la regla de “conformidad previa”, que prácticamente paralizó al mercado de cambios oficial. Los nombres que sonaron con fuerza para integrar el directorio de Bausili fueron Vladimir Werning (ex JP Morgan), Alejandro Lew, Verónica Holub y Agustín Pesce (no tiene relación con el todavía presidente), aunque en la autoridad monetaria no los confirmaron.