En Estados Unidos hay más de 59 millones de inmigrantes hispanohablantes, en su mayoría latinoamericanos, según las cifras oficiales relevadas por el último censo oficial de ese país. Entre esa enorme masa de personas, que supera incluso la población total de la Argentina, hay grupos que obtienen mejores resultados que otros al participar de la economía de EEUU.
De acuerdo a un estudio elaborado por la consultora Latinometrics -firma especializada en la visualización de datos sobre negocios, cultura y tendencia de países de América Latina-, Argentina es el país de origen de inmigrantes latinos con la mejor relación en el eje riqueza-educación.
Las diferencias que se encuentran entre los diferentes países son notables. “A menudo, cuando hablamos de hispanos y latinoamericanos en los Estados Unidos, se les percibe como un grupo homogéneo. La gente puede hablar de estos diversos grupos de personas como si fueran conocidos por su ética de trabajo o cocina, o más propensos a votar por un partido u otro, a pesar de las muy reales diferencias que enfrentan los guatemaltecos-estadounidenses y los cubano-estadounidenses”, señalaron a modo de ejemplo desde Latinometrics a través de su cuenta de X (LatamData).
Con esa introducción, la empresa dedicada a la elaboración de estadísticas confeccionó un estudio desagregando datos sobre los hispanos en los EEUU, dividiéndolos en dos ejes: ingreso medio del hogar y porcentaje que posee una licenciatura de cuatro años.
“A pesar de las percepciones regionales de que los europeos son más inteligentes o más ricos, varias poblaciones hispanas superan a los españoles en estas métricas. La mayoría de los venezolanos adultos en los EE.UU., por ejemplo, tienen una licenciatura (aproximadamente el 57% en 2021). Mientras tanto, los argentinos tienden a tener el ingreso medio del hogar más alto en general, demostrando una vez más que para muchos latinos son las circunstancias en su país de origen, no la pereza o la falta de ingenio, lo que los detiene”, remarcaron desde Latinometrics.
Asimismo, como demuestra el gráfico elaborado por la consultora, la colectividad Argentina está segunda en el eje de nivel de educación entre los migrantes latinos que habitan en suelo estadounidense. Más del 45% de los argentinos adultos que se encuentran en ese país tienen un título de grado. De esta manera, tomando ambos parámetros (educación y riqueza), los migrantes oriundos de la Argentina son los mej.
Contraste latinoamericano
La situación es bastante diferente para otras subregiones de América Latina. De acuerdo al informe elaborado por Latinometrics, los centroamericanos como guatemaltecos, hondureños y salvadoreños tienden a estar entre los más pobres y menos propensos a haberse graduado de la universidad, mientras que los mexicanos no están muy lejos.
“Evidentemente, las oportunidades profesionales y el acceso a recursos juegan un papel significativo en la determinación de esta disparidad entre países tan variados como Chile y Nicaragua”, señalaron desde la compañía.
Al momento de analizar los resultados, se debe tener en cuenta que los motivos de migración varían de un país a otro. La población argentina, por ejemplo, puede pertenecer a un segmento socioeconómico diferente al que migró de otros países, como Honduras y Guatemala.
Fuera de las comparaciones entre los diferentes países, desde Latinometrics señalaron que la situación general de los latinoamericanos ha mejorado en el tiempo. “Sin importar si estamos hablando de los dominicanos de Nueva York o de los mexicanos de Los Ángeles, observamos condiciones en mejora para todos”, aseguraron.
Por qué migran los argentinos
Latinometrics consultó a través de su cuenta de X por qué los argentinos deciden migrar a suelo norteamericano. El 51,1% respondió que se deben a cuestiones económicas (menor costo de vida) y el 36,9% aseguró que se debe a “atractivo cultural”, donde entra por ejemplo el concepto de “seguridad”. En tanto, el 2,8% aseguró que se debe a “vínculos históricos” y el 9,1% a “otros motivos”.
Como conclusión, la empresa encuestadora aseguró que los argentinos desean un cambio radical de una economía perpetuamente frustrante. “Las conversaciones sobre la moneda dejan poco espacio para que escuchemos sobre otro aspecto del país. Desde el año 2000 hasta el 2020, su población migrante aumentó 48%”, resaltaron.