El directorio de YPF resolvió desplazar a Alejandro Daniel Lew del cargo de gerente Financiero. En el Ministerio de Economía lo responsabilizaban por el faltante de combustible que hubo en el país las semanas previas al balotaje.
A la par, el director de General de Aduanas, Guillermo Michel, prepara una denuncia penal y presentaciones ante la Comisión Nacional de Valores y la SEC -organismo que regula los mercados en los Estados Unidos-.
Lew había sido designado a mediados de 2020. En aquel momento, tenía la tarea de desplegar la estrategia de la compañía para afrontar sus compromisos de deuda en dólares que tenía por delante tanto ese año como en 2021. Antes había trabajado en las empresas energéticas 360° Energy y Genneia, además de contar con experiencia en HSBC Bank Argentina y en el J.P. Morgan.
El ahora exfuncionario está sospechado por el entorno del ministro de Economía, Sergio Massa de maniobras de corrupción. Por eso, además de la denuncia ante la CNV se realizará la presentación ante organismos de Estados Unidos.
En medio de la crisis por la escasez de nafta y gasoil, donde a finales de octubre se registraron imágenes de largas colas en las estaciones de servicio de todo el país, el propio Massa acusó a las empresas petroleras por la “retención de stocks” luego de las elecciones. En aquel momento, y en diferentes entrevistas, señaló como motivos del faltante el temor a una devaluación, los rumores sobre descongelamiento de precios y los conflictos internacionales, entre otros.
Es más, el ministro, que en ese momento se encontraba en plena campaña de cara a la segunda vuelta electoral presidencial que lo enfrentó con el ahora presidente electo, Javier Milei, llegó a intimar a las petroleras con no permitir la exportación si no se garantizaba el abastecimiento de combustible interno.
Luego de la victoria del libertario en la segunda vuelta electoral, en el equipo de campaña del ex candidato de Unión por la Patria consideran que el faltante de combustibles fue determinante en el humor social y posterior resultado.
Una industria récord
Otro de los argumentos que planteaban desde Economía era que el desabastecimiento era una situación anómala porque la producción petrolera actual está en un récord histórico y el sector petrolero argentino es uno de los de mayor crecimiento a nivel global, además de que el Gobierno aplica reducción de impuestos para poder mantener los precios congelados en los surtidores y que también facilita la importación de combustibles mediante reducción de impuestos.
Así, durante los primeros seis meses del 2023 se produjeron 17.982.610 m3 de crudo en la Argentina, un valor que marcó una mejora del 10,24% con relación al mismo período del 2022, cuando se extrajeron 16.312.629 m3 de petróleo en todo el país.
Además, el resultado del primer semestre de este año es el mejor registrado desde 2009 hasta hoy. Para encontrar un nivel de producción más alto en el sector petrolero hay que remontarse al 2008, cuando se produjeron 18,9 millones de m3 en el total del territorio nacional.
Por otro lado, las estadísticas muestran una notable recuperación del sector petrolero desde el piso alcanzado en 2017. Ese año, de acuerdo a las estadísticas publicadas por la Secretaría de Energía, se obtuvieron 13.686.833 m3 de crudo en el período enero-junio. A partir de entonces la actividad comenzó a mejorar, siempre impulsada por las inversiones realizadas en Vaca Muerta.