La falta de lluvias y las heladas que se registraron en los meses anteriores siguen pasándole factura a los cultivos de invierno, en especial al trigo y la cebada. Tal es así, que la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) recortó en un millón de toneladas la estimación de producción de estos dos granos, por lo que la cosecha de campaña fina pasó a ser de 19,4 millones de toneladas.
El clima volvió a ser inclemente con el trigo, reduciendo drásticamente los cálculos de producción respecto a lo que se esperaba al principio del ciclo agrícola, que rondaban las 16 millones de toneladas. Si bien se sabía que los suelos no contaban contaban con la humedad suficiente en gran parte del área agrícola nacional, se apostó por la llegada de las lluvias de la mano del fenómeno climático de “El Niño”, pero las precipitaciones no solo se dieron tarde para el cultivo, sino que, además, vino acompañada por heladas.
Justamente, este fue el factor que determinó un nuevo recorte en la estimación de producción del cereal, que en esta ocasión fue de 700.000 toneladas hasta las 14,7 millones de toneladas. No obstante este ajuste negativo, vale decir que este cálculo se encuentra por encima de las 13,5 millones de toneladas proyectadas por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Si bien la reactivación de las lluvias, permitieron que parte del área comprometida se viera “favorecida durante el llenado” del grano, fue “la evaluación del impacto de las heladas las que arroja rindes por debajo de lo originalmente planteado”, que con poco más del 20% del área cosechada a la fecha arroja un rendimiento promedio a nivel nacional de apenas 16 quintales por hectárea (qq/ha).
En cuanto a la cebada, también fueron las bajas temperaturas de semanas atrás las que condicionaron al cultivo: “luego de evaluar los daños por las heladas ocurridas durante el mes de octubre, colaboradores informan heterogeneidad en las mermas de rinde, en donde se citan daños en la punta de espiga, principalmente sobre el Núcleo Sur, Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires y Centro de Buenos Aires, donde la helada ocurrida el mes previo encontró al cultivo transitando la etapa de espigazón”, detalló la entidad. Así, la Bolsa porteña recortó en 300.000 toneladas la proyección de cosecha hasta las 4,7 millones de toneladas.
¿El año de la soja?
Las buenas noticias, sin dudas, son para la soja, que gracias a las lluvias cuentan con un panorama totalmente positivo de aquí en adelante. De hecho, no solo las condiciones productivas son buenas, sino que la oleaginosa continúa sumando área. Así, la Bolsa porteñas incrementó la intención de siembra en 200.000 hectáreas hasta las 17,3 millones de hectáreas, la mayor superficie en siete campañas.
“La oleaginosa ha recuperado área, luego de que la falta de humedad durante la siembra de girasol y maíz temprano impidiera cumplir con los planteos iniciales, en el centro del área agrícola. En este sector del país, la reactivación de las lluvias desde fines de octubre ha modificado el panorama hídrico liberando cuadros para la siembra de soja de primera”, explicó la entidad bursátil porteña.
De hecho, la Bolsa rosarina sostuvo que en esta semana fue récord la incorporación de lotes en la región núcleo, que comprende las zonas del norte bonaerense y el centro y sur de Santa Fe y Córdoba. “El ritmo de siembra ha sido impresionante, tanto que marca un nuevo récord: se sembró en una semana 1,15 millones de hectáreas, cuando la máxima actividad de siembra registrada (en una semana) era de un millón. También es el mayor avance desde que comenzó la siembra en la región, totalizando casi dos millones de hectáreas sembradas”, dijo la BCR.
Por último, las 200.000 hectáreas que ganó la soja, lo hizo en detrimento del maíz, que perdió esa proporción y la estimación de siembra se reubicó en 7,1 millones de hectáreas. “La demora en la llegada de las lluvias primaverales que impidió cumplir la proyección de siembra inicial de maíz temprano, resulta en un aumento de la proporción destinada a siembras tardías, y determina una baja en la superficie total”, explicó la entidad.