A casi quince días del balotaje, en el que se definirá quién gobernará la Argentina por los próximos cuatro años, las distintas entidades empresarias están agotando todas las instancias posibles con el fin de reunirse con los dos candidatos, Sergio Massa y Javier Milei, antes de esa fecha. Pero no todas están teniendo suerte; y menos con el libertario, que se rehúsa a reunirse con el círculo rojo por temor a que esas fotos le impliquen más costos que beneficios. El ministro de Economía y candidato oficialista, por el contrario, sí intenta acercarse al establishment y prometerles que, si es presidente, avanzará con un plan de estabilización.
Son pocos los eventos empresarios a los que asistió Milei en plena campaña. En la mayoría de los casos, no contestó las invitaciones o directamente las rechazó. Así ocurrió con la UIA, la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) e IDEA, por ejemplo. Sí había participado del clásico almuerzo del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp), a fines de junio, y ya confirmó, según varias fuentes consultadas, su presencia para la comida prevista para el 15 de noviembre en el hotel Alvear.
Massa podría ir al día siguiente, según se habló con los organizadores del Cicyp, que actualmente conduce el vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Marcos Pereda. “¿Cerraría allí la campaña?”, especulaban los hombres de negocios en las últimas horas, ya que justo es el día previo al inicio de la veda.
Milei también estuvo varias veces con directivos de la SRA en encuentros privados y dos veces en la Exposición Rural de Palermo. Pero el libertario es sumamente selectivo. No se expondría en reuniones en donde una amplia mayoría cuestiona sus ideas económicas, y menos frente a quienes él mismo considera prebendarios. En el caso de la central fabril, no hubo forma de que respondiera una invitación ni pos PASO ni ahora, de cara al balotaje.
“No contestó. Le mandamos invitación por escrito a los dos candidatos el mismo día. Massa respondió a las dos horas. Creo que no se quiere exponer, tal vez para no cometer un error”, analizó un miembro de la UIA en diálogo con Infobae. Lo mismo sucedió con la CAC. Fuentes de la entidad afirmaron que luego de las PASO se le envió una invitación a quienes eran los tres principales candidatos en ese momento (Massa, Bullrich y Milei) y el libertario fue el único que nunca contestó. Massa asistió y en lugar de Bullrich, fue quien era su referente económico, Carlos Melconian.
Cerca de Milei descartaron que exista algún problema puntual con las entidades empresarias y adjudicaron los rechazos a la mayoría de las invitaciones a que “se está concentrando en la campaña”. “Por otra parte, tampoco fue al evento de la DAIA”, agregaron las fuentes.
Pero la lectura que realizan en el establishment es que no quiere asumir ningún riesgo a pocos días de la definición electoral. De hecho, tenía agendado este jueves un almuerzo en la sede de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), integrada por los principales dueños de empresas del país, y lo canceló a último momento, según manifestó, “por problemas de agenda”.
Massa fue a la UIA esta semana. Se reunió con el comité ejecutivo y si bien asistió en “modo candidato”, la charla giró en torno a la principal problemática que atraviesa hoy el mundo productivo: la falta de divisas y las complicaciones que ello está generando en la relación con los proveedores del exterior y en los niveles de producción. Son muchas las plantas que están frenando líneas, anticipando vacaciones o pensando en suspender personal durante los próximos meses.
El ministro no tiene mucho para decirles; sólo pedirles confianza de que si él es presidente, “habrá organismos internacionales que apoyarán al país con créditos; seguirá vigente el swap chino, el campo rendirá sus frutos el año próximo y también generarán dólares la energía y la minería, especialmente el litio”, según transmitió.
“De Massa no vamos a esperar nada distinto. Lo conocemos hace mucho. Hay muchos sectores que están acostumbrados a su forma y ya saben cómo manejarse. La duda es Milei, de él asusta porque nunca gobernó y aparece como una persona inestable”, se sinceró un empresario del Grupo de los 6 (G6).
Desde el sector agropecuario, en tanto, creen que “las ideas del libertario son buenas y que lo que falla es la forma de plantearlas”.
“El plan de Massa es lo que está haciendo ahora. Proyectar lo que está haciendo hoy es disruptivo. Milei tiene que conseguir gobernabilidad. La alianza con Macri es una buena noticia, pero claramente el contexto es difícil y nadie está revelando cuál es su verdadero plan”, consideró un referente del sector.