El sector minero sigue creciendo en el norte del país y las proyecciones de reservas anticipan que el rubro seguirá en alza en los próximos años. Las buenas expectativas empresarias se reflejan en varios aspectos, como el aumento de las explotaciones y la incorporación de mano de obra, pero se ve con mayor claridad en los niveles de inversión.
Más allá de los millones invertidos en la actividad en sí, hay compromisos de las empresas de hacer desembolsos para mejorar la infraestructura de la zona de explotación. En concreto, el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, anunció que la obra de la ruta 43 en Antofagasta será financiada por las empresas del sector minero. “Próximamente se abrirá la licitación para la ejecución de la obra básica y pavimentación del tramo que conecta al departamento con el límite con Salta”, precisó el mandatario en su cuenta en la red X (ex Twitter).
La primera etapa de la obra será financiada por las empresas Livent, Allkem y Galan Lithium, y la segunda por el fideicomiso minero. “Además, en reunión con Zijin Mining (empresa minera china), acordamos avanzar con la línea de Alta Tensión para Fiambalá, con un aporte de 24 millones de dólares. En total, las empresas aportarán 57 millones de dólares para el plan de infraestructura vial y servicios en las localidades de influencia”, explicó Jalil.
Infraestructura
Las inversiones del sector minero apuntan a favorecer la explotación y exportación del litio mediante mejoras de la infraestructura de la zona. Se trata, precisamente, de una limitante al desarrollo de la minería, que necesita rutas, transporte, energía y comunicaciones en locaciones aisladas y carentes de esos servicios.
A principios de agosto, en Salta, en el evento “Litio en Sudamérica”, al que asistieron 1.800 ejecutivos, analistas, inversores e interesados en el potencial litífiero argentino, uno de los principales atractivos fue la presentación de Joe Lowry, conocido mundialmente como “Mister Lithium” y fuente de consulta de empresas como Tesla. En una exposición de tipo magistral, Lowry observó que en la Argentina hay demasiada ansiedad por producir baterías. “Mi consejo -dijo- es que piensen en eso cuando lleguen a producir 500.000 toneladas anuales de carbonato de litio” (más de 15 veces el nivel de producción actual). Y dijo que en conversaciones que mantuvo con Fernanda Ávila, la secretaria de Minería, y Flavia Royón, de Energía, les dijo a ambas: “antes que preocuparse por fabricar baterías, construyan más rutas, más redes eléctricas y de comunicaciones, más infrastructura”. Es lo que ahora Livent, Allkem, Galan y Zijin, todas involucradas en la producción de litio, decidieron impulsar con sus aportes.
Potencial exportador
El economista investigador en Conicet, Martín Trombetta, aseguró que Jujuy, Salta y Catamarca tienen potencial para exportar USD 10.704 millones anuales por sus productos mineros.
“El potencial exportador minero del NOA para 2030 es de 10 mil millones de dólares, más de tres veces lo que exportamos de carne vacuna y casi la mitad de la soja. El otro Vaca Muerta. Diversificación y federalización de la canasta exportadora”, señaló.
Trombetta explicó que los datos fueron calculados en función del desarrollo de la minería litífera y cuprífera en el Noroeste Argentino. De acuerdo a su estimación, para el 2030 habrá 11 proyectos de litio y 2 de cobre entres las provincias.
En relación a la valuación, el economista tomó como base un valor de litio estable a USD 30.000 por tonelada y para el cobre un precio de USD 8.906,66 por tonelada. De todas formas, es importante aclarar que otros economistas consideraron “demasiado optimista” un valor de USD 30.000 por tonelada para el litio. “Es más factible una proyección de USD 15.000 a USD 20.000 para 2026 o 2027″ aclararon en redes.
En tanto, un informe de CRU, una consultora internacional con cabecera sudamericana en Chile y especializada en minería, afirma que la Argentina, gracias a sus tres operaciones activas y numerosos proyectos en desarrollo, tiene un potencial de crecimiento de la producción de litio del 50% anual, contra 16% en Chile y una expansión menos precisa, pero también inferior, en el caso de China, que es a su vez el principal destino de las exportaciones de carbonato de litio de la Argentina.
Descontento por el dólar
Con proyecciones más o menos optimistas, el panorama para el sector exportador minero es alentador. No obstante, aún hay varios aspectos del escenario económico que podrían mejorar.
Sin ir más lejos, desde la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) mostraron disconformidad por la norma que se dio a conocer ayer sobre el llamado “dólar minero”. El problema, aseguraron, es que la normativa deja afuera minerales relevantes, tales como la plata en bruto y el litio.
“Es fundamental subrayar que el atraso cambiario afecta a todas las empresas de nuestra industria. Por lo tanto, desde la CAEM abogamos por el acceso a un tipo de cambio que sea coherente con el otorgado a otras actividades exportadoras. La minería representa un componente fundamental de la economía nacional, siendo el sexto complejo exportador del país y una destacada fuente de divisas, gracias a su constante superávit en la balanza comercial”, reclamaron.
“Sería deseable que la medida contemple a rocas y minerales industriales, que abarcan productos como cal, boratos, bentonita, yeso, caliza, diatomita, dolomita, rocas ornamentales, cuarzo, entre otros, así como a los minerales metalíferos tales como zinc, plomo, hierro y cobre. Todos estos productos representaron un total de USD 132 millones en exportaciones generadas por las pequeñas y medianas empresas del sector en 2022″, agregaron desde la entidad.
Asimismo, indicaron que para continuar invirtiendo y mantener el ritmo de producción que caracteriza al sector, es esencial que el “dólar minero” sea accesible para todas las exportaciones mineras y no se limite únicamente a una parte de ellas. Además, comentaron que “es imprescindible que las Siras y Sirase que se encuentran pendientes sean aprobadas para continuar con los esquemas productivos”.