En medio de la crisis del sector, hay un nuevo récord en el mercado inmobiliario argentino. A 204 metros de altura salió en venta el departamento más elevado de la Argentina y de América del Sur, en el edificio residencial más alto del continente.
La vivienda por estrenar se encuentra en la Alvear Tower ubicada en Puerto Madero.
El techo residencial de América del Sur (la torre tiene 235 metros de altura y fue diseñada bajo la proyección y obra del estudio de arquitectura Pfeifer-Zurdo), sólo es superado por la Gran Torre Costanera ubicada en Santiago de Chile, con 300 metros. Sin embargo, esta edificación está dedicada al segmento de oficinas, hotelería y locales comerciales.
La propiedad que ahora se comercializa cuenta con 6 ambientes y dispone de 495 metros cuadrados.
Su precio de venta es de USD 6 millones y se trata de una de la propiedades más caros de las que se venden en la Argentina, detrás de algunas ubicadas en la Torre Viñoly (llamada así por el prestigioso arquitecto uruguayo Rafael Viñoly, que falleció en marzo último y diseñó varias construcciones icónicas en distintos rincones del mundo), en Palermo Chico, valuadas en USD 8,5 millones; otras en el edificio Le Parc, que cotiza en más de USD 8 millones; y algunas del complejo Forum Alcorta, que superan los USD 7,5 millones y algunas otras distribuidas en zonas súper cotizadas de la ciudad de Buenos Aires, como Palermo Chico (Barrio Parque) y Belgrano, que superan los 10 millones de dólares.
Pero además este departamento situado en el rascacielos residencial más elevado del continente también se alquila en USD 25.000 mensuales, uno de los valores más caros para renta de la Argentina. Esta cifra iguala a otras unidades que se ofertan en edificios situados en Puerto Madero.
Recorrida por la propiedad
Desde la salida del ascensor, ya se observa la calidad de los materiales en terminaciones y confort.
Martín Pinus, de Martín Pinus Real Estate, dijo a Infobae que “a la vivienda se ingresa por un hall privado donde encontramos una amplia recepción, y luego se pasa al living-comedor con salida al balcón que se compone con ventanales de piso a techo, pudiendo apreciar la excelente de vista de toda la ciudad y el río de La Plata”.
El diseño del interior del departamento es elegante y contemporáneo, con materiales importados de alta calidad.
“Los espacios son amplios y abiertos, creando una sensación de fluidez entre las diferentes áreas. El toilette de recepción está revestido en cuarcita de Sudáfrica con destello azul, seleccionada personalmente por el propietario en Italia, en donde lo adquirió”, dijo Sofía Moñino, de la firma comercializadora.
La suite principal, con 60 metros cuadrados, es más espaciosa que un monoambiente promedio de 40 m2. Se logró al unificar dos dormitorios y cuenta con un vestidor doble y un pasillo de circulación doble.
Otra particularidad es que posee 4 dormitorios y 4 baños, el principal se revistió en mármol importado de Italia. En el precio de venta están incluidas 4 cocheras.
“Los otros baños están revestidos en mármol de carrara y blanco griego”, amplió Pinus.
Las cortinas en living-comedor, dormitorios y cocina son automáticas y fabricadas por una empresa holandesa.
Moñino dijo que “la propiedad incluye un family para disfrutar en momentos libres, y su uso puede ser destinado a un microcine, escritorio, biblioteca o sala de TV. También cuenta con una dependencia y lavadero independiente”.
La cocina es espaciosa y cuenta con un comedor diario. Dispone de fregaderos, mesadas de alta resistencia y grifería importada. Todos los accesorios son modernos y los electrodomésticos son de última generación, algunos de ellos están empotrados en la pared.
Pinus acotó que “vivir en el departamento más alto de Buenos Aires puede ser una experiencia impresionante. Desde esa altura, se contemplan vistas panorámicas impresionantes de la ciudad y el río, y se disfrutará de una sensación de exclusividad”.
Vivir en un piso tan elevado, además de brindar una sensación de estar en la cima del mundo, también significa abundante luz en toda la planta, privacidad y tranquilidad.
Por cómo es la vivienda, es ideal para una familia amplia “con un alto nivel de ingresos que valoran la exclusividad, vistas panorámicas y comodidades de lujo”, dijo Moñino.
En la Alvear Tower, la mayoría de los dueños y quienes habitan las unidades son argentinos.
El departamento está en el piso 52 y en el 54 se encuentra el rooftop (bar en altura con vistas panorámicas de 360 grados), cancha de tenis, piscina cubierta y descubierta, gimnasio, microcine, sala de baño de mascotas, sala de ensayos para músicos, salón de fiestas, juegos infantiles, entre otras áreas comunes.
Desde este edificio se pueden observar hacia el horizonte la costa uruguaya y el Aeroparque Jorge Newbery, la cancha de Boca y la costanera sur. Es tan alto que también se llegan a ver otros estadios de fútbol, como los de Racing e Independiente, en Avellaneda.
Respecto a las perspectivas del mercado inmobiliario premium, Pinus concluyó: “Los valores han llegado a su punto más bajo, y a pesar de las turbulencias económicas eventuales, invertir en bienes raíces en el segmento de alta gama representa una oportunidad y ofrece un sólido refugio para el dinero en comparación con otras inversiones de mayor riesgo financiero, como títulos o bonos”.