Desde Mar del Plata - Daniel Funes de Rioja, presidente de la Unión Industrial Argentina, visitó el stand de Infobae del 59 Coloquio de IDEA, el evento empresarial que finalizó ayer en esta ciudad.
El también presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), habló sobre empleo, uno de los temas sobre los que disertó en el evento -en el panel Generar empleo para una Argentina posible-, y también sobre las importaciones y el dólar en un contexto de tensión en medio del proceso electoral
— Durante el Coloquio se debatió mucho sobre empleo.
— Venimos trabajando con IDEA en este tema. Nos invitaron a participar a raíz del Libro Blanco de la UIA que tiene un capítulo muy importante, que es el de Nuevas realidades laborales. Hoy, sin formación y sin capacitación no hay empleo posible. Cambió la matriz. Es un mundo diferente que necesita nuevas capacitaciones. El tránsito de la educación al empleo, basado en un sistema de decimonónico de la educación, no sirve. Hay que ir al sistema de formación profesional, dual, como hicieron los alemanes. Con eso llegaron a tener 3% de desempleo y el nivel de productividad más alto de Europa. Argentina lo puede hacer, pero tenemos una realidad: hemos perdido en 10 años, en términos brutos, el 5,7% del empleo que había. Teníamos un millón y medio de empleos (en el sector industrial). Entonces, ¿a dónde deberíamos estar? Cerca de los 2 millones. ¿Por qué no los tenemos, es el fin del trabajo? No, (no los tenemos) porque no hay marco normativo. La gente tiene miedo a contratar porque la legislación es muy rígida, porque todos los días hay un ley nueva, les inventan más licencias y quieren restringir las jornadas de trabajo a 6 horas y pagarlas como si fueran 48. Todos esos factores, las multas laborales, la litigiosidad, no dejar que el convenio colectivo de la industria sea el que resuelva el problema .... Todo actúa en contra. Por otro lado, tenemos mucha gente bajo planes. ¿Cómo pasan al trabajo? Lo dijo muy claramente el Papa, cuando todavía era Jorge Bergoglio: el plan no es un fin, es un escalón, un intermedio, para llegar al trabajo. Es algo circunstancial, hay que preparar a la gente para que pueda trabajar y a la industria para que pueda generar más empleo.
— Hay muchas propuestas de cómo se pasa de los planes al empleo formal. ¿Qué opina?
— No hay que formar para cualquier cosa, hay que formar para lo que se necesita. Inglaterra hizo eso con los Consejos Empresarios Regionales. Que después no pueden decir ‘no los tomo’. Si hay una causa sí, pero tiene que ser seria. En segundo lugar, tiene que haber un mejor ordenamiento jurídico sobre las prácticas profesionales y la ampliación del periodo de prueba. Esos son los instrumentos que sirven.
— ¿Cómo analiza la actual coyuntura económica?
— Es compleja. El momento del dólar es consecuencia, fundamentalmente, de las incertidumbres: la macroeconomía que no es estable, y la electoral que está jugando a pleno. Las restricciones cambiarias que tiene el propio gobierno y la multiplicidad tipos de cambios son cuestiones que también están jugando.
— ¿Cómo están las importaciones?
— Estamos trabajando día a día para poder aguantar produciendo. Obviamente, hay demoras y restricciones de volumen que se producen por actitudes defensivas de las empresas, para no perder todas las líneas.
— ¿Cómo están las empresas alimenticias?
— Es uno de los sectores industriales que está más complicado, con contracción de nivel de actividad y preocupación por los insumos. No son grandes en montó pero son inexcusables desde el punto de vista de los componentes, hay muchos productos que responden a fórmulas concretas y necesitan esos insumos. La medida que veníamos propiciando desde 2015 de la reducción del IVA para los sectores de menores ingresos, para que se bancarice tanto la persona como a los negocios, es muy importante. Tiene que tener haber contrapartidas presupuestarias para que Argentina resuelva problemas fiscales, pero no a costa de mayor inflación sobre el 30% que contribuyen, sino sobre la sociedad en su conjunto. Menos informalidad, más formalidad, más producción y más exportación, eso son los objetivos. Y empleo, obviamente.
— Con respecto al panorama político, ¿cómo evalúa este proceso electoral?
— Tenemos mucha ansiedad y los tiempos los vemos largos, pero queremos definiciones y políticas de Estado. Cualquiera sea el que gane, va a tener que buscar acuerdos parlamentarios, que sean serios, sustentables, que miren las oportunidades que la Argentina tiene.