Desde Mar del Plata - La baja de impuestos, como reclamos recurrente, fue uno de los temas que concentró la atención en la mañana del último días del 59 Coloquio de IDEA.
“La presión es insostenible y el incremento no genera mejoras fiscales”, resumió en la apertura del panel Fernando Cóccaro, de EY.
Los expositores fueron Santiago Bulat, Matías Olivero Vila (Lógica), María Inés Del Gener (Deloitte), Juan Martín Jovanovich (KPMG), Mariela Compagnucci (Ledesma), Roberto Murchison (Grupo Murchison), César Litvin (Lisicki, Litvin & Asociados), Guillermo Pérez (Grupo GNP), Martín Berardi (Ternium), pusieron foco en las distorsiones de la estructura tributaria.
El panel repasó que existen 148 diferentes tipos de tributos y tasas a lo largo del país, de los cuales solamente 10 significan el 91% de toda la recaudación, “mientras que el resto solo le quita competitividad a la economía”. Entre los 10 mencionados se encuentran el IVA, el impuesto a las ganancias, los aportes a la seguridad social, el impuesto a los ingresos brutos, los derechos de exportación e importación, el impuesto a los débitos y créditos, tasas de seguridad e higiene, el impuesto a los combustibles y los impuestos internos coparticipables (como el impuesto al tabaco o servicio de telefonía celular, entre otros).
También se recalcó que los impuestos que mantienen gran preponderancia nacieron como temporales para solventar necesidades de financiamiento momentáneas, pero nunca fueron rediscutidos y las distorsiones continuaron acumulándose. Por ejemplo, el IVA que nació con una alícuota de 13%, primero aumentó hasta 16%, luego a 18% y hoy alcanza 21 por ciento.
“Competimos todo el tiempo por ver dónde alocamos las inversiones. Tenemos una carga tributaria récord, algo que combinado de una evasión de 35% hace al sistema imposible” (Berardi)
“Del precio final de una bebida no alcohólica, 48% son impuestos. Eso se puede dividir en tercios: impuestos indirectos, seguridad social e IVA. Los argentinos tienen falta de cultura fiscal y no es culpa de la gente, el Estado oculta cómo cobra impuestos como el IVA, los sanciona por exponer cómo lo hace”, dijo Olivero Vila.
Berardi, de Ternium, una de las empresas del Grupo Techint, dijo que comparando lo que pagó la empresa en Argentina con otros países de la región, si la empresa estuviera en Brasil hubiera pagado USD 122 millones menos y USD 145 millones en México. “Competimos todo el tiempo por ver dónde alocamos las inversiones. Tenemos una carga tributaria récord, algo que combinado de una evasión de 35% hace al sistema imposible”, aseguró.
Documento
IDEA publicó un documento sobre el tema titulado “Impuestos para una Argentina competitiva”.
“Alcanzar el equilibrio fiscal de manera urgente es una medida respaldada tanto por empresarios como por la mayoría de las fuerzas políticas predominantes. Si tenemos en cuenta los últimos 63 años de la Argentina, el país solo ha alcanzado un superávit fiscal en menos del 10% del tiempo, y esto generalmente ha ocurrido como respuesta a una crisis”, comienza el paper.
Según IDEA, hay dos hechos relevantes que distorsionan la recaudación tributaria y amplifican la presión tributaria del país. “El primero, tiene que ver con el nivel de informalidad laboral, que atenta contra los derechos esenciales de la ley laboral”, dijeron. Según datos de Cedlas, el el 34% de los trabajadores asalariados de la economía se encuentran fuera del régimen laboral formal, es decir que no reciben aportes ni contribuyen al sistema de pensiones público, el mismo nivel que hace 11 años. El segundo, corresponde a los niveles de evasión tributaria: alrededor del 34% en 2022, a mismos niveles que hace 7 años y equivalentes a 3,7% del PBI.
“La presión tributaria que recae sobre quienes invierten y producen de manera formal en la economía es considerablemente elevada”, resumió el documento que plantea tres propuestas:
1. Simplificar el sistema impositivo y mejorar la competitividad de las empresas. Sobre Ingreso s Brutos proponen gravar solamente el último eslabón de la cadena como primer paso hasta alcanzar la eliminación total del impuesto; eliminar el Impuesto a los débitos y créditos y las retenciones “para el incremental de las exportaciones, con el fin de fomentar el crecimiento de bienes y servicios exportados y, por ende, la entrada de divisas al país, limitar las Tasas municipales.
2. Ampliar la base tributaria a través del combate a la evasión impositiva. IDEA propone “generar vehículos tributarios innovadores que eviten el enanismo fiscal”. Por caso:
a) Generar crédito fiscal de IVA, computable durante un período fiscal determinado.
b) A su vez, crear un régimen de bloqueo fiscal para las Pymes que adhieran a ese régimen de transición, de modo que puedan regularizar la información de sus ventas sin tener perjuicios posteriores al someterse a inspecciones en los siguientes años.
c) Adhiriendo a una Ley Federal bajo la cláusula del progreso de nuestra Constitución Nacional, que otorgue estabilidad fiscal y limite la potestad de provincias y municipios para aumentar alícuotas impositivas o aplicar nuevos regímenes de retención.
“Creemos necesario ponerle límites al uso de efectivo y potenciar los pagos con medios digitales que han evidenciado un importante crecimiento y buena aceptación por parte de los usuarios, agregaron los empresarios.
3. Nueva ley federal de coparticipación de impuestos.
“La Argentina está frente a un contexto global favorable para su desarrollo, pero para poder aprovechar las oportunidades que el mundo le ofrece requiere reformas estructurales que la conviertan en un país más competitivo. La modernización impositiva forma parte de esas reformas impostergables y será uno de los desafíos del próximo Gobierno”, cerró el documento.