La liquidación de divisas del agro volvió a decepcionar en septiembre: en lo que va de 2023 entraron la mitad de dólares que el año pasado

Las cámaras del sector informaron que en los primeros nueve meses del año las exportaciones del sector sumaron USD 16.748,8 millones. En septiembre ingresaron USD 2.045,7 millones, con una baja del 75% respecto del mismo período del año anterior, cuando se registró un récord histórico por el primer dólar soja

El complejo cerealero-oleaginoso es el puntal de las exportaciones argentinas.

Las liquidaciones de las empresas agroexportadoras de Argentina cayeron 75% de forma interanual en septiembre, al totalizar USD 2.045,7 millones, informó este lunes un informe de la Cámara de la Industria Aceitera de Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).

En ese sentido, se debe subrayar que en septiembre de 2022 se aplicó por primera vez el esquema del “dólar soja” con un tipo de cambio de $200 que entonces fue un 33% más alto que el dólar mayorista vigente para el resto de operaciones de comercio exterior. Ese dólar más alto para el agro contribuyó a una liquidación mensual récord de USD 8.120,3 millones, un 198% por encima de septiembre de 2021.

En septiembre de 2023 las cámaras del sector agregaron que las empresas del sector liquidaron un 15% más respecto de agosto, con la vigencia del nuevo esquema del dólar soja, que se extenderá hasta el próximo 25 de octubre, después de las elecciones presidenciales del domingo 22.

Si se comparan los primeros nueve meses con el mismo período del año pasado, el sector cerealero-oleaginoso perdió ventas al exterior por un 50%: en 2023 ingresaron USD 16.748.8 millones entre enero y septiembre. “Comparado los primeros nueve meses con el año pasado, el sector cerealero-oleaginoso perdió valores de ventas al exterior por 17.065 millones de dólares”, estimaron desde CIARA-CEC.

Este descenso en las liquidaciones del agro es congruente con el retroceso notorio que experimentaron las reservas brutas del Banco Central, que restaron en 2023 unos USD 17.668 millones de dólares.

“El ingreso de divisas del mes de septiembre es el resultado de las operaciones realizadas bajo el Decreto 443/2023 (denominado ‘dólar soja´ que aplica un tipo de cambio especial para el sector) y el fuerte crecimiento de ventas de productores de soja que ascendió a más de 4 millones de toneladas”, explicó CIARA-CEC.

En medio de una fuerte pérdida de reservas del Banco Central, el Gobierno impulsó reiteradamente un tipo de cambio especial a los exportadores para que adelanten sus liquidaciones agropecuarias.

Vale recordar que el Gobierno oficializó la prórroga de la última edición del Programa de Incremento Exportador (PIE) para el complejo sojero, más conocido como “dólar soja” hasta el 25 de octubre, con el objetivo de fortalecer las reservas del Banco Central en un contexto de alta presión cambiaria por la suba de las cotizaciones libres y paralelas de la divisa norteamericana.

De esta manera, a través del decreto 492/2023 publicado en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo decidió extender la medida, que puso en marcha el pasado 5 de septiembre y que debía vencer el pasado sábado, hasta tres días después de llevadas a cabo las elecciones presidenciales del 22 de octubre. Hasta el momento, en el marco del PIE V o dólar soja 4 se negociaron 4,5 millones de toneladas y se liquidaron divisas por más de USD 2.045 millones.

“La mayor parte del ingreso de divisas en este sector se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y alcanza hasta los 90 días en el caso de la exportación de aceites y harinas proteicas”, dijo CIARA-CEC , entidades que representan el 48% de las exportaciones argentinas.

La campaña agrícola de Argentina fue afectada por la peor sequía en décadas, provocando severas pérdidas productivas, que en el caso de cultivos como la soja y el trigo implican mermas productivas de cerca de un 50% con respecto al año pasado. El país es el principal exportador mundial de aceite y harina de soja, el tercero de maíz y un proveedor global clave de trigo.