En el debate en general y en el debate económico en particular, hubo notorias omisiones o al menos escasas referencias a temas que a priori se esperaba que recibieran mayor atención. Javier Milei apenas si mencionó una vez la palabra dolarización (“es la única forma de terminar con la inflación”, aseguró, sin explicar cómo la haría), no hubo más que enunciados genéricos sobre la necesidad de bajar la inflación, coincidencia general (salvo Myriam Bregman) sobre la necesidad de equilibrio fiscal) y la lucha contra la pobreza estuvo ausente del debate, salvo cuando los datos sobre ella se usaron como arma arrojadiza.
Los temas que dieron pie a los cruces más filosos entre los candidatos fueron los siguientes.
Inflación
El ministro de Economía Sergio Massa tuvo que responder en numerosas ocasiones por los altos índices de inflación y fue uno de los ejes de las críticas de los otros cuatro postulantes a presidente, durante el debate de este domingo en Santiago del Estero. También fue uno de los elementos sobre los que versaron las propuestas de los candidatos. Patricia Bullrich dijo que Juntos por el Cambio “viene a terminar con la inflación”, algo que fue cuestionado por Milei, que le hizo notar que hasta el momento no supo explicar cómo va a hacerlo.
“El dinero no alcanza, el dinero no te sirve, voy a borrar del mapa la inflación, sin atajo, sin cuentitos, tengo un grupo económico coherente y el liderazgo de Carlos Melconian”, sostuvo Bullrich durante el debate presidencial.
En otro pasaje, la ex ministra de Seguridad eligió polarizar también con el candidato de Unión por la Patria: “Massa, explicale a los argentinos cómo siendo el peor ministro de Economía podés ser el mejor presidente. Cómo podés dividirte con tanto cinismo. Aumentaste 40 impuestos, querés hacer una ley penal, llevate a [Martín] Insaurralde. Dale, llévatelo. Hiciste todo mal”. “Duplicaste el número de la inflación, del dólar, generaste 40,1% de pobreza y ahora queres decir que como presidente vas a ser distinto”, arremetió.
En tanto, Milei le pidió a Massa que explique “cómo va a evitar la hiperinflación en vez de contar un cuento de hadas” y dijo que “la moneda de los argentinos es impresentable”. Y en otro tramo, tras una pregunta de Massa a Milei sobre sus dichos contra el Papa Francisco, el libertario le espetó: “Dejá de chicanear y dedicate a bajar la inflación y a terminar el gobierno de manera decorosa, dale”.
“Tengo en claro que la inflación es un enorme problema de Argentina. También que los errores de este gobierno lastimaron a la gente y por eso, aunque no era parte hasta asumir como ministro de Economía, pido disculpas. Tengo claro además que Argentina tiene una enrome dificultad porque saca más dólares del país de los que trae, porque tiene parte de su economía en negro y porque además tiene problemas en el sistema tributario que limitan el desarrollo”, se defendió Massa.
Schiaretti, a su turno, dijo que “los dos últimos gobiernos destruyeron la economía nacional. La verdad es de que la causa de su destrucción es que siempre gastaron más de lo que les ingresa. El hilo conductor de toda la inflación en la Argentina fue siempre el déficit fiscal y lo digo yo que en Córdoba no tenemos déficit fiscal”.
Dolarización
La propuesta de Milei de propiciar de adoptar el dólar como única moneda de curso legal en la Argentina lo tuvo, fue la razón por la que el resto de los postulantes presidenciales eligieron cuestionarlo, principalmente Massa y Bullrich. Milei usó su minuto inicial planteando que uno de los pilares de su gobierno será el cierre del Banco Central, aunque eligió no hablar específicamente de la dolarización, pero sí aseguró que “la moneda de los argentinos es impresentable” y que “la dolarización es la única forma de terminar con la inflación”.
“Tuvimos dos hiperinflaciones sin guerra, podríamos quitarle tres ceros más a la moneda”, cuestionó Milei. Massa replicó que el modelo de Milei es usado en solo 3 países del mundo. Zimbawe, El Salvador y Ecuador”, “La Argentina tiene que entrar en un proceso de desarrollo. Gasoductos, venta de energía al mundo, exportación de valor agregado son el camino para acumular reservas y fortalecer nuestra moneda. Poner la bandera de otro país en las Malvinas o en el Banco Central, como plantea este señor, es simplemente renunciar a la sangre de nuestros caídos y a la soberanía para el desarrollo de nuestras empresas. El destino de las pymes está condenado si este señor gobierna la Argentina”, apuntó.
Más adelante, Milei le contestó al asegurar que “no importa cuántos países lo hacen (la dolarización). Si es así, en la Asamblea del año 1813 usted hubiese elegido la esclativud. La emisión monetaria es una estafa. Este gobierno nos roba USD 25.000 millones por año”, replicó. Bullrich metió baza. Aseguró que “de todos los países del mundom, hay muy pocos que no tienen Banco Central. Si yo les digo como se llaman ustedes ni siquiera saben donde quedan: Tuvalu, Micronesia y Kiribati. Todos paraísos fiscales. Eso significa que vamos a tener un paraíso fiscal en la Argentina. Le digo a todos los jóvenes. Te prometieron la dolarización. Pero sin dólares no se puede dolarizar. Está absolutamente claro, por eso lo importante no es lo que decís que vas a hacer sino lo que realmente estás en condiciones de hacer, un plan serio, concreto y eficiente”.
La deuda por las Leliqs
Ya superior a los $ 21 billones, se trata del principal obstáculo a la promesa de dolarización que Milei enarbola como su propuesta más distintiva. El propio candidato de La Libertad Avanza dijo en el debate que ese pasivo del BCRA triplica la base monetaria y sin embargo lo usó para plantearle dos veces a Bullrich que planea hacer al respecto. En una de ellas incluso afirmó que el déficit total era del 14% del PBI, y que ese déficit 9 puntos eran por las Leliqs. Tratándose de una cuestión técnica relativamente compleja, la candidata de JxC circunvaló la cuestión. “Usted no me va a decir lo que tengo que decir”, le respondió, se atuvo a su libreto de “solidez fiscal para teminar con la inflación” y contraatacó afirmando que quienes impiden que la Argentina crezca son “mafias” como las de “su amigo Barrionuevo”, por la alianza que libertario anudó con el dirigente del gremio de los gastronómicos.
Extrañamente, la cuestión de las Leliqs no le fue imputada a Massa, aunque el ministro fue lógicamente el que más críticas del resto recibió por la altísima tasa de inflación y una pobreza que ya supera el 40% de la población.
Acuerdo con el FMI
Bregman hizo pasar buena parte de sus cuestionamientos a Massa –pero también a los otros postulantes– en su rechazo al acuerdo con el Fondo Monetario, al que consideró una fuente de inflación y de aumento de la pobreza.
Massa recordó que el préstamo original fue tomado por el gobierno macrista en un dardo a Bullrich, mientras que esta le respondió asegurando que el aumento en el endeudamiento durante el mandato del Frente de Todos es “el más alto en 40 años”.
“En el ‘89 sufrimos una hiperinflación por hacer lo que decía el FMI; en el 2001 el país fue a la quiebra por hacer lo que decía el fondo; en el 2018 Macri lo volvió a traer, pero este Gobierno y Sergio Massa nos sometieron al FMI. Si llegamos al 60% de pobreza infantil no fue por enfrentar mucho al FMI, sino por seguir todas y cada una de sus recetas. Cuando se discutió el acuerdo en el Congreso, advertimos que era inflacionario y teníamos razón. Como ahora advertimos que si seguimos por este camino del FMI las consecuencias para el pueblo van a ser mucho peores. No hay salida, si no se desconoce esa deuda ilegal, ilegítima y fraudulenta”, dijo la candidata de izquierda.
Massa dijo que si fuese presidente propiciaría una rediscusión del acuerdo con el Fondo Monetario que “nos va a permitir dejar de ser mendigos para ser un país soberano” y advirtió que, en su momento, consideró que el formato que adoptó el programa financiero con el organismo era “inflacionario”.
El ministro de Economía sostuvo que la Argentina “heredó un acuerdo criminal con el FMI que es inflacionario” y dijo que “recién hace cuatro meses” se pudo cambiar, ante una pregunta de Schiaretti. “Quiero decirles que la deuda con el FMI la trajo Macri a la Argentina y fue la deuda más criminal de la historia argentina. La pobreza, Patricia, la dejaron en 40 y la tomaron en 25: 60% de aumento”, disparó.
Impuestos y Presupuesto
Milei le enrostró a Massa que, entre otras cosas, la inflación de los últimos doce meses fue del 120% y del 170% en el caso de los alimentos, amén de la “bomba” que de las Leliqs, a lo que Massa replicó que en el presupuesto 2024 que envió al Congreso la Argentina tenía la “chance” de un superávit si se animan a bajar el 4,8% de exenciones impositivas a sectores privilegiados vía lo que el presupuesto llama “gasto tributario”.
Milei aprovechó entonces para contragolpear diciendo que votó en contra de los presupuestos oficialistas porque tenían déficit y le señaló que Massa hablaba de recortar privilegios pero él, Milei, fue quien presentó una carta para frenar “contrataciones turbias”. Bullrich fue más directa y le apuntó a Massa diciendo que el presupuesto que presentó “es una vergüenza”. “Presentás lo que vas a gastar y después una lista para que nosotros digamos lo que hay que tachar. Asumí la responsabilidad, hacete cargo que presentaste un presupuesto con déficit y con 70% de inflación y que nos están llevando a la hiperinflación”, lo cruzó.
Federalismo
Fue el tema recurrente del gobernador cordobés, Schiaretti, candidato presidencial de Hacemos País, que se diferenció del resto diciendo que eran todos del AMBA y que él representaba el interior, que paga más caro el boleto de colectivo y las tarifas de luz y gas.
Bullrich intentó congraciarse con él recordando que durante una huelga policial el kirchnerismo había dejado “sola” a la provincia mediterránea, pero Schiaretti replicó que el gobierno de Macri había cumplido apenas 20% de las cosas que prometió a Córdoba. También Massa también buscó halagar a Schiaretti recordando su amistad con José Manuel de la Sota, pero obtuvo como respuesta que no se trataba solo de reducir subsidios, sino de “terminar con los privilegios” y le recordó que el actual gobierno había condonado USD 120 millones en deudas a las distribuidoras eléctricas del AMBA. “Yo quiero redistribuir para ser equitativos. Vengo a proponer lo que ya hicimos en Córdoba, con equilibrio fiscal, fuera de la grieta y achicando el costo de la política. La legislatura cordobesa es la de menor costo por habitantes del país. Nací y vivo en mi lugar. Los demás representantes son todos del AMBA y de la rosca política y nos imponen impuestos confiscatorios”, respondió.