El oficialismo se prepara para aprobar hoy en el Senado la reforma del Impuesto a las Ganancias impulsada por el ministro de Economía y candidato presidencial, Sergio Massa. El FdT tiene asegurado el quórum en la Cámara Alta y los votos necesarios para su aprobación.
La Cámara de Diputados le dio la semana pasada media sanción al proyecto que elevaría el mínimo no imponible a 15 salarios mínimos y liberaría de la obligación tributaria a cerca de 800.000 trabajadores.
El Gobierno deberá enfrentar un costo aproximado de $3 billones, dado que sólo seguirán pagando unos 80 mil asalariados en todo el país. Claro que el impacto de la baja de recursos no recaerá sólo sobre la Nación, sino que impactará también en los fondos coparticipables a las provincias.
Además de Ganancias, y con la presencia de Cristina Kirchner encabezando la sesión, se debatirán también hoy la Ley de Alquileres, entre otros proyectos.
Qué dice el proyecto de Massa
En principio, el proyecto se aprobaría sin cambios. Si los hubiera tendría que volver a Diputados y no se aprobaría antes de las presidenciales.
“El impuesto a las ganancias requiere una reforma integral que contemple la actualización de deducciones y escalas del impuesto a las ganancias en forma automática por la variación del IPC. No es razonable que un empleado que gana $1.000.000 tenga hoy -septiembre 2023- gravada una parte de su sueldo al 35 por ciento. Deberían aplicarse deducciones y escalas del impuesto actualizadas por IPC y amplias para que tribute un 5% o 10% y vaya elevándose la misma a medida que tenga un ingreso mayor. Pero tampoco es razonable que alguien que cobre un sueldo bruto de $1.980.000 (15 SMVM a octubre 2023) y que deberán actualizarse a enero 2024 para la reforma de ganancias, no tribute nada. Esta dentro del 10% de la población con mayores ingresos (se esta en ese decil teniendo ingresos por más de $ 280.000 según le EPH del INDEC a Junio 2023) y no tributa el impuesto más progresivo que existe”, analizó Domínguez.
Estás son las claves del proyecto:
– Nuevo mínimo: el punto más relevante es sin duda la eliminación de la cuarta categoría de Ganancias (para la mayoría de los casos). En su lugar se implementaría un impuesto cedular (se aplicaría a personas físicas sobre actividades específicas) para ingresos superiores a 15 salarios mínimos vitales y móviles (SMVM). Hoy cada sueldo mínimo tiene un valor de $118.000 brutos, una cifra que cambiará desde el mes que viene.
Ayer se reunió el Consejo del Salario Mínimo y se aprobó una suba a $132.000 mensuales, con lo que el mínimo de Ganancias desde octubre será de 1.980.000 millones de pesos.
“De esa forma queda de lado el primer anuncio del Gobierno ($1.770.000) , que nunca regirá. Aplica a las remuneraciones de octubre. O sea, para los sueldos de septiembre que se pagarán el mes que viene corre el piso anterior, de 700.875 pesos. El nuevo piso es para los sueldos de octubre que se paguen a fines de ese mes o comienzos de noviembre y los pagos quincenales. Las empresas que paguen en enero tendrán el tratamiento de la ley de Ganancias”, dijo en diálogo con Infobae Sebastián Domínguez, de SDC Asesores Tributarios.
“Es importante saber que el monto de casi dos millones es bruto, no neto”, destacó el especialista.
– Alícuota: actualmente los contribuyentes de Ganancias pagan una alícuota que va de 5% a 35%, dependiendo de la escala a la que pertenecen. Esa tasa se paga sobre el excedente de cada categoría.
El proyecto propone mantener el sistema de alícuotas progresivas, pero iniciando del 27% y llegando hasta el 35%.
Según Domínguez, “el SMVM que se considerará es el del 1 de enero y 1 de julio de cada año. Es decir, el del 1 de enero se aplicará al primer semestre y el del 1 de julio al segundo semestre. Dado la alta inflación actual y que las paritarias establecen aumentos de sueldos mensuales, lo razonable hubiera sido que se tome el SMVM vigente al primer día del mes de sueldos que se está pagando”.
– Aguinaldos: El salario anual complementario, o aguinaldo, estará exento del pago del tributo de forma permanente. Si bien ocasionalmente se exime del pago de Ganancias al SAC de julio o diciembre, la aprobación definitiva del proyecto haría el cambio de manera permanente.
– Cálculo del impuesto: para determinar cuánto pagará cada trabajador, la AFIP tomará como comienzo del período fiscal, el valor del SMVM vigente al 1° de enero de cada año. En la segunda mitad del año se actualizará el monto de referencia con el SMVM que entre en vigencia el primer día de julio.
– Quiénes continuarán pagando bajo el régimen anterior: el proyecto que logró media sanción en Diputados grava a cargos de alta responsabilidad en empresas, como directores de sociedades anónimas, CEOs, gerentes y subgerentes. También se incluyen las pensiones de privilegio y funcionarios políticos.
– Universo de contribuyentes: con los cambios que propone el proyecto presentado por el Ejecutivo, sólo pasarían a pagar Ganancias 88.000 contribuyentes, menos del 1% del total de las remuneraciones, jubilaciones y pensiones, de acuerdo con los cálculos oficiales.
– Costo fiscal: en función de las modificaciones planteadas en Ganancias, se estima que el Gobierno nacional dejará de percibir casi $3 billones. Como se trata de un tributo coparticipable, las provincias también se verán afectadas, con una pérdida cercana a $1,6 billones.
– Trato diferencial: Los empleados en relación de dependencia, jubilados y pensionados de las provincias de La Pampa, Río Negro, Chubut, Neuquén, Santa Cruz, Tierra del Fuego y el partido bonaerense de Patagones, tendrán un tratamiento especial. De acuerdo a lo que dicta el proyecto, los beneficiados tendrán un importe de mínimo no imponible 22% superior al del resto del país.
“La reforma beneficia a empleados que dejarán de tributar en impuesto a las ganancias a partir de 2024. Si bien es una buena noticia para ellos en particular, no lo es para la sociedad en general.
– Coparticipación. Como el impuesto a las ganancias es un impuesto coparticipable y las Provincias y CABA pierden recaudación, el Gobierno Nacional aceptó la propuesta de que le hicieron de coparticipar el impuesto al cheque y el impuesto país sobre el pago de importaciones de bienes y servicios. “Esto es cambiar la tributación de un impuesto progresivo de los que más tienen por impuestos regresivos que paga toda la población en los precios de los bienes y servicios que consumen”, expresó Domínguez.