En el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA), los organizadores de tradicional coloquio que se hace todos los años en Mar del Plata, creen que el país está en un situación parecida a la de la Selección argentina de fútbol después de perder con Arabia en el primer partido del Mundial de Qatar. Complicada, pero con esperanzas si se cambia y se hacen las cosas bien.
Tan es así que el lema esta edición 59 del encuentro empresarial que se hace la semana próxima es “Argentinos: Volvámonos a ilusionar. Hagamos que valga la pena”. Conceptos como “equipo”, “darla vuelta” y “se puede”, todo con tono mundialista, están en la boca de los ejecutivos de IDEA todo el tiempo. No cantan “Muchachos”, pero casi.
Como ocurre en todos los “coloquios electorales” habrá propuestas y mucho run run en los pasillos. No es para menos en un contexto económico más que crítico marcado por la incertidumbre, la falta de dólares, una presión cambiaria en aumento y las consecuencias del impacto de la reciente devaluación y el salto inflacionario. Se espera una asistencia récord de más de 1.000 personas.
También hay expectativa por los candidatos. Están todos invitados, pero la única que confirmó por el momento es Patricia Bullrich. Cerca de Sergio Massa dijeron horas atrás en Neuquén que no asistiría y Javier Milei, quien protagonizó un muy nutrido almuerzo privado el año pasado en el evento, mantiene el misterio sobre su presencia. En IDEA creen que todo terminará de definirse luego del debate del domingo y de cómo queden parados y las necesidades que tengan cada uno de los tres presidenciables. El presidente Alberto Fernández sí confirmó presencia.
Durante el Coloquio, se presentarán 20 propuestas para el desarrollo de la Argentina, un aporte del sector empresario frente a los grandes desafíos que tendrá por delante el nuevo Gobierno que asuma a partir del 10 de diciembre: estabilizar la macroeconomía y, al mismo tiempo, realizar transformaciones para revertir el estancamiento de la actividad, disminuir la pobreza y volver a generar empleo privado de calidad.
Se trata de una suerte de lista de propuestas para el gobierno que viene, aunque en IDEA se apuran a decir que no elaboraron un plan. “Buscamos puntos de consenso básicos sobre un rumbo a seguir que son el resultado del trabajo de más de medio año llevado adelante por 67 CEOs junto a expertos en cada temática y del diálogo con referentes del arco político, sindical y social”, explicó Santiago Mignone, presidente del 59° Coloquio y ejecutivo de PwC.
Las 20 propuestas de IDEA
40 años de democracia y desafíos pendientes
1. Mejorar sustancialmente la cultura política democrática.
2. Fortalecer las instituciones para que sean más eficaces.
3. Mejorar la eficacia del funcionamiento del Gobierno.
Sectores de alto impacto
4. Generar condiciones macroeconómicas propicias para el desarrollo de los sectores de alto impacto: estabilidad fiscal, acceso a divisas, eliminación de las restricciones a las importaciones y reducción progresiva de los derechos de exportación.
5. Avanzar con ciertos ajustes regulatorios específicos de cada sector.
Generar empleo para una Argentina sostenible
6. Modificar el esquema de multas laborales.
7. Modificar el esquema de capitalización de intereses en juicios laborales.
8. Generar incentivos a la contratación.
9. Actualizar los convenios colectivos de trabajo (CCT).
De asistencia a oportunidad: transformando planes sociales en empleo
10. Confeccionar un registro único y público de beneficiarios de programas sociales.
11. Mejorar el programa de Puente al Empleo.
12. Incentivar la implementación de programas de Primer Empleo.
La sustentabilidad es negocio
13. Promover la transición hacia modelos de negocios sostenibles.
14. Fomentar la implementación de mesas sectoriales.
La urgencia del gasto público
15. Reordenar el sistema previsional de manera equitativa y sostenible.
16. Racionalizar y reducir los subsidios energéticos.
17. Eficientizar el desempeño de las empresas públicas.
Impuestos para una Argentina competitiva
18. Simplificar el sistema impositivo y mejorar la competitividad de las empresas.
19. Ampliar la base tributaria a través del combate a la evasión impositiva.
20. Nueva Ley federal de coparticipación de impuestos.
“Son más de 65 empresarios que durante 6 meses trabajaron en grupos armando propuestas. Al menos tres veces nos juntamos todos para compartir lo que estábamos haciendo. Eso habla del compromiso a la hora de abordar temas en los que no necesariamente somos expertos. El objetivo es quienes sea gobierno a partir del 10 de diciembre, aunque no estén de acuerdo con nosotros e instrumenten todo, pero por lo menos tengan una ayudita que venga del lado de los empresarios”, dijo Daniel González, director Ejecutivo de IDEA y ex presidente de YPF, en diálogo con Infobae.
“Cada uno de los títulos los vamos a desarrollar en el Coloquio. Por ejemplo, no vamos a hablar de bajar la alícuota de Ganancias, pero sí diremos que tal impuesto es un incentivo equivocado, o que se solapa con otros”, agregó.
– Hablan de “eficientizar el desempeño de las empresas públicas”. ¿Qué creen que debe pasar con este tipo de compañías?
– Planteamos qué empresas estatales realmente tienen necesidad de existir como tales, si hay alguna razón estratégica que las justifique. Nos metemos también en la gobernanza, en que sus gobiernos corporativos deberían asegurar absoluta transparencia, más que los privados, incluso. Hay que analizar el tema de la rentabilidad: si son deficitarias alguien está pagando. Eso no quiere decir que todos los años ganen, las empresas privadas a veces tampoco lo hacen, pero hay que hablar de estos temas.
– En términos macro, ¿qué plantean?
– No estamos presentando un plan de estabilización. Sí decimos que hay muchas medidas puntuales, como fomentar el empleo, que tienen sentido si la macro está ordenada. Con desorden y más de 10% de inflación mensual es muy difícil que se genere inversión genuina relevante. Por eso hay que lidiar con el gasto público de una manera que no se viene haciendo hasta ahora. Trabajamos también el tema previsional, que es una bomba de tiempo. Siempre con la lógica de que no vamos a afectar derechos adquiridos. Y tenemos una propuesta concreta para los subsidios energéticos. Insisto, no es un plan, sólo decimos que es insostenible para un Estado sin financiamiento genuino seguir gastando de la forma que lo estamos haciendo.