Dos cámaras vinculadas a las cirugías cardiovasculares se sumaron al reclamo por los problemas para importar insumos médicos, en este caso “vitales” para las intervenciones. Distintos sectores manifestaron en los últimos meses situaciones similares y el contexto se agravó con la devaluación. En los últimos días surgió una nueva polémica en el sector: más de 30 asociaciones médicas anunciaron un nuevo “honorario médico ético mínimo” para la consulta profesional de 6.000 pesos.
Esta vez el reclamo estuvo encabezado por el Colegio Argentino de Cirujanos Cardiovasculares (CACCV) y la Asociación Civil de Cirugía Vascular y Angiología de la Argentina (ACCVAA) desde donde advirtieron “la difícil situación que atraviesan y enfrentan para el ingreso de materiales vitales para el desarrollo de las diversas o múltiples terapéuticas intervencionistas por un lado y las difíciles respuestas que los profesionales debemos dar a nuestros pacientes y sus familiares por las demoras, cambios en turnos, etc., por el otro”.
Las entidades agregaron que “la escases de recurso económicos en divisas de nuestro país es la base real de esta situación, pero además, debemos sumar el complejo entramado burocrático y hasta a veces disuasorio de los mismos, las dificultades en cambios arancelarios, etc., sumados a un dificultosos proceso burocrático descentralizado y desordenado para la toma de decisiones y en particular en la visualización de priorizaciones y respuestas a las necesidades primarias”.
“En los hechos las respuestas se ligan indistintamente y según las circunstancias a un devenir entre las Aduanas y el Ministerio de Economía y viceversa, todo ello en un marco de escasa inserción y desamparo decisorio del Ministerio de Salud de la Nación”, aseguraron.
“Esta situación no puede continuar, pues se encuentra en juego el patrimonio constitucional de la Salud de nuestra población adulta y pediátrica. La Salud no es una variable de ajuste económico o financiero”, detallaron las entidades.
“Las autoridades responsables en el ingreso de materiales de intervencionismos médico sea terapéutico o diagnostico o en general para actos médicos, deben hacerse cargo y evitar el desamparo de nuestros pacientes y de sus angustiadas familias. Como profesionales de la salud nos hacemos cargo de nuestras responsabilidades médicas y éticas para con nuestros pacientes. Las autoridades también deben hacerse cargo de sus responsabilidades ordenándose y priorizando las necesidades para de esta forma definitivamente normalizar esta grave situación”, cerró el reclamo de los cirujanos cardíacos.
Problemas
El sector viene reclamando por falta de insumos y problemas para importar desde el año pasado. En diciembre pasado, el CACCV, que es una “institución científica que agrupa a la mayoría de los cirujanos de la especialidad”, informó “a la opinión pública y a las autoridades nacionales y provinciales sobre “una grave y peligrosa situación por el faltante de insumos básicos e imprescindibles para realizar cirugías cardiovasculares”.
En ese momento, Fernando Cichero, director médico y jefe de Cirugía Cardiovascular del Hospital Roca, dijo en diálogo con Infobae que “hay un faltante en todos los insumos importados para cualquier cosa que uno necesite. La situación actual es dispersa porque hay empresas de válvulas, de oxigenadores, de prótesis, de endoprótesis y cada una acusa diferentes problemas en la importación”.
“Se está caminando por la cornisa”, según Cichero. “Lo que hizo el CACCV es un llamado de atención para que no nos veamos en la disyuntiva de llegar a suspender de forma indefinida las cirugías”, afirmó.
Otros reclamos
Ayer, un comunicado firmado por la Cámara Argentina de Insumos, Implantes y Equipamiento Médico (Cadiem) y otros siete entidades, expresó que “dado el actual escenario de público conocimiento en relación a las dificultades en la obtención de permisos de importación (SIRA) y a la imposibilidad de acceder al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) para el cumplimiento de obligaciones con proveedores del exterior, el grupo de Cámaras que nuclea a empresas importadoras y proveedoras del Sector Salud tenemos la responsabilidad y obligación de alertar sobre el alto riesgo de desabastecimiento de reactivos de diagnóstico, productos médicos, insumos, instrumentos, repuestos y materia prima para la elaboración local”.
Detallaron una situación “preocupante” por:
– Graves demoras en la aprobación de los permisos de importación (SIRA).
– Imposición de plazos de pago de 120 hasta 365 días, los cuales son rechazados por la mayoría de los proveedores del exterior.
–Falta de definición y/o cambio de fecha de acceso al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC).
– Inexplicables reducciones de los índices de Capacidad Económica Financiera (CEF) asignados a las empresas, que las inhabilita para cargar nuevas solicitudes de importación. A esto se suma la gran cantidad de errores e inconsistencias que presentan los sistemas informáticos de la AFIP al momento de tramitar pagos. Pese a las entrevistas mantenidas con funcionarios a quienes expusimos esta problemática, actualmente la situación continúa sin cambios, agravándose día a día.
Y cerraron diciendo: “Entendemos que la única forma de que se pueda evitar el desabastecimiento de material considerado esencial para el Sistema Sanitario, es volver a las condiciones existentes antes del 12 de mayo, cuando las SIRAs se aprobaban en 48 horas y para los pagos se respetaban las fechas convenidas con el proveedor. Asimismo, reiteramos nuestra propuesta de que sean tenidos en cuenta los números de CUIT del importador junto a la habilitación expedida por ANMAT”.