A pocos días de que el INDEC difunda la estimación oficial de pobreza correspondiente al primer semestre del año, proyecciones privadas basadas en las estadísticas que el propio organismo difundió ayer sobre la distribución del ingreso en la Argentina arrojan cifras alarmantes. La población por debajo de la línea de pobreza en la primera mitad del año superó el 40%, de acuerdo a dos de los economistas especializados más respetados en esta área.
“Casi seguro por encima de 40% pero por debajo de 41%. Mi estimación (conservadora) sería 40.3%”, anticipó Leopoldo Tornarolli, investigador del CEDLAS en materia de asuntos pobreza y desigualdad, quien con los datos del Informe de Distribución del Ingreso publicados ayer confirmó una tendencia que ya advertía desde hace meses.
Una estimación similar es la del director de la Maestría en Econometría de la Universidad Di Tella e investigador del Centro de Investigación de Finanzas de esa casa de estudios, Martín González Rozada, quien tras analizar los últimos datos oficiales de ingresos, corrigió levemente su estimación previa y proyectó 40,1% de pobreza para el primer semestre. Todos los meses, en base a los datos de la Encuesta Permanente de Hogares y los valores de la canasta básica, Rozada actualiza el dato más sensible para cualquier gestión económica. Si bien existe un margen de error, su cálculo es que el mínimo que se informará el próximo miércoles es de 40% con un techo de hasta 43% de la población.
A ese resultado se llegó tras un primer trimestre con cifras algo más favorables, por debajo de 39%, y un empeoramiento notorio en los siguientes tres meses, en los que habría superado 41% al calor de la aceleración inflacionaria y un menor dinamismo de la actividad económica. De ahí que Tornarolli abrió un interrogante para el segundo semestre, cuando impactarán de lleno los peores índices de inflación en más de 30 años. “El efecto en la pobreza de devaluación y nueva aceleración de inflación recién lo conoceremos en diciembre”, advirtió.
Para esa fecha solo puede esperarse el corolario de la foto que ya sacó el INDEC en los primeros seis meses de 2023. Según informó ayer, la mitad de los hogares de la Argentina vivieron en el primer semestre con un ingreso menor a los $200.000 mensuales. Durante el segundo trimestre del año, además, el organismo estadístico informó que aumentó el nivel de desigualdad en el país.
En el informe “Evolución de la distribución del Ingreso”, el organismo estadístico también publicó que el coeficiente de Gini, que mide el ingreso per cápita familiar, fue de 0,417 para el segundo trimestre cuando en el mismo trimestre de 2022 el valor fue de 0,414, “lo que muestra un leve aumento de la desigualdad en la comparación interanual”, según mencionó.
La publicación incluyó una serie de cuadros en los que se destaca el ingreso promedio con el que vivieron durante ese período los diez deciles en lo que el Indec divide a la población. Contando hasta el decil 5 inclusive, los hogares vivieron, durante el segundo trimestre, con un ingreso menor a los $200.000 mensuales mientras que el 30% del total, lo hizo incluso con una remuneración inferior a los $140.000 por mes.
“En el caso de los hogares, los ingresos laborales representaron el 76,1% de los ingresos totales, mientras que los ingresos no laborales alcanzaron el 23,9% restante. El peso de los ingresos no laborales fue mayor para los deciles de ingreso total familiar más bajos: 64,8% en el decil 1 y 15,1% en el 10″, indicó el informe.
Es con esos datos que los analistas especializados pueden anticipar incidencia de pobreza e indigencia que publicará el Indec el próximo miércoles.