El anuncio de créditos a monotributistas que hizo el Gobierno días después de la devaluación de agosto como parte del paquete de medidas para paliar el impacto en los ingresos comenzó a tomar forma en los últimos días, entre las miles de solicitudes que acumularon los bancos públicos y privados, que empezaron a habilitar los préstamos por hasta 6 millones de pesos. El Ministerio de Economía, mientras tanto, analiza nuevas medidas para los próximos días.
La línea de créditos subsidiada para quienes forman parte del régimen simplificado fue anunciada por el ministro de Economía Sergio Massa hace tres semanas, como parte de un paquete general de anuncios, algunos días después del salto cambiario y el primer efecto en el ritmo de inflación. Se trata de préstamos que están garantizados por un fideicomiso público de manera tal de que los monotributistas terminen por pagar una tasa de interés muy por debajo de la inflación.
Las consultas de monotributistas en condiciones que acceder a los préstamos comenzaron a arreciar en los bancos desde los primeros días de septiembre. En algunas sucursales los oficiales de cuenta tuvieron, en esos días, poca información para darles a sus clientes, aunque el lanzamiento de los préstamos no dependía de ninguna normativa ad hoc que tuviera que publicar la Secretaría de Desarrollo Productivo, que encabeza José Ignacio de Mendiguren, ya que se trataba de una línea ya existen a la que se le ampliaba su alcance.
Fuentes de esa cartera aseguraron que a principios de esta semana se habían concretado unas 2.700 operaciones por una suma cercana a los $6.000 millones (2,2 millones de pesos en promedio) en un puñado de entidades que fueron las que comenzaron a habilitar los préstamos en primer lugar, entre ellas Nación, Ciudad, Credicoop y Banco de Corrientes.
También aseguraron que el Banco Provincia inició en los últimos días su propia campaña para promover los préstamos, que el Banco de Córdoba lo ofrece con trámite 100% online, el Banco de Rosario lo habilitó desde ayer miércoles y que dos de los grandes bancos privados como Santander y BBVA lo tienen vigente desde las últimas horas.
Desde el Banco Nación aseguraron que, hasta las 13 de este jueves habían otorgado casi 2.350 préstamos a monotributistas por un monto total de $5.120 millones, lo que implica una solicitud promedio de crédito por 2,18 millones de pesos por pedido. Para el caso del BNA, el trámite para concretar el préstamo es presencial. En el Banco Ciudad, por su parte, informaron que desde que se dio inicio al programa de préstamos ya tienen 10 mil solicitudes en proceso de aprobación.
Los créditos tienen una tasa de interés fija bonificada del 62,6% (tasa nominal anual) que es subsidiada por el fideicomiso Fondep y con garantías del Fogar. Tiene un plazo de repago de hasta 24 meses y cada categoría del monotributo tiene montos máximos a otorgar, que dependen del nivel de ingresos. Para las escalas A y B, el importe máximo es de $1,2 millones; para C, D y E, es de $2 millones; de la F en adelante, es de $4 millones. Es posible extender el límite un 50% más en caso de que se trata de microempresas “con historial positivo del Fogar”, explicaron.
“La cuota promedio de estos créditos, cada $500.000, es de $42.475″, ejemplificaron desde el Banco Ciudad, que también aclararon que “la calificación crediticia será en base a la categoría del monotributo vigente al 31/03/2023 y los solicitantes deberán presentar el certificado MiPyME, que se obtiene accediendo con CUIT y clave fiscal al sitio web de AFIP”.
Los créditos tienen una tasa de interés fija bonificada del 62,6% (tasa nominal anual) que es subsidiada por el fideicomiso Fondep y con garantías del Fogar. Tiene un plazo de repago de hasta 24 meses
En el caso de la entidad pública porteña, ya contaba en su cartera con préstamos para capital de trabajo de hasta $2 millones a un plazo de hasta 48 meses junto con microcréditos para quienes desarrollan una actividad formal o informal, para la compra de mercadería o equipamiento, a un plazo de hasta 60 meses y un monto de poco menos de 3 millones de pesos.
Desde la cartera industrial recordaron que los créditos para monotributistas deberán ser utilizados para “la compra de máquinas, herramientas y/o insumos, directamente relacionada con el desarrollo de la actividad”. Para ejemplificar: un contador que decide comprarse una notebook, un plomero que compra herramientas o un carpintero una amoladora. Los créditos, con esas condiciones, continuarán abiertos hasta el 30 de noviembre.
En paralelo al inicio de esa medida para monotributistas, el Ministerio de Economía analiza un nueva tanda de anuncios, algunas de ellas que ya fueron anticipadas, para trabajadores registrados como autónomos, para pymes y para monotributistas. También surgió con fuerza la posibilidad de una asistencia económica para trabajadores fuera del circuito formal, un espíritu similar al que tuvo el IFE durante la pandemia. No hay, por el momento, mayores detalles sobre qué alcance podría tener una medida de esa naturaleza.
Desde el Banco Nación aseguraron que otorgaron casi 2.350 préstamos a monotributistas por un monto total de $5.120 millones, lo que implica una solicitud promedio de crédito por 2,18 millones de pesos por pedido
“Quiero decirles a los autónomos que estén tranquilos, que en las próximas horas también vamos a tomar una decisión para beneficiar a los profesionales, comerciantes que trabajan y emprenden de manera autónoma y están esperando una respuesta”, dijo Massa hace algunos días.
Infobae había informado que se trataría de la puesta en marcha de un plan que llevará como nombre “Simple” y que estará orientado a los trabajadores Autónomos que se aplicaría en un primer momento para personas humanas -profesionales, prestadores de servicios, comerciantes– que no tengan ingresos mensuales superiores a los 15 salarios mínimos (1.770.000 pesos).
Por su parte, para los autónomos comerciantes, profesionales y que prestan servicios, el esquema “Simple” implicará que los que tengan ingresos de hasta 15 salarios mínimos mensuales puedan optar por este régimen simplificado que será un régimen distinto al de monotributo, con un único pago mensual que abarque seguridad social, IVA y Ganancias y cuyo pago se determinará como un porcentaje de la facturación.