La Unión Industrial Argentina (UIA) manifestó este martes “fuerte preocupación” por el acceso a dólares para financiar importaciones de insumo para el sector, una situación que calificaron como de “gravedad”.
La Junta Directiva la principal central fabril advirtió sobre “la gravedad de la situación por la falta de acceso a divisas para el pago de insumos necesarios para la producción”. “El departamento de Comercio y Negociaciones Internacionales abordó las dificultades que se presentan en el comercio exterior para el sector productivo por la imposibilidad de obtener divisas para pagos en el exterior y la creciente deuda comercial”, expresaron a través de un comunicado.
“Esta deuda aumentó en los últimos tres años 16.000 millones de dólares alcanzando los 38 mil millones de dólares en la actualidad. Este incremento está originando complicaciones en el crédito privado que las empresas tienen con sus proveedores y podría ocasionar mayores tensiones en las cadenas productivas”, continuó la UIA.
“La deuda comercial (por importaciones) aumentó en los últimos tres años 16.000 millones de dólares alcanzando los 38 mil millones de dólares en la actualidad”, planteó la UIA
“También se plantearon los problemas para el pago de servicios claves como licencias de software, hardware hasta alojamiento en la nube, tal como plantearon desde el sector de la industria de Software (CESSI)”, aseguró la entidad que preside Daniel Funes de Rioja.
“Si bien la UIA mantiene diálogo constante con las autoridades y realiza gestiones de sectores prioritarios y casos críticos, las mismas no son suficientes frente a la presión sobre las cadenas de valor que impacta cada vez con mayor fuerza en la producción”, sostuvo la entidad fabril.
El “Monitor de Desempeño Industrial” que elabora la central fabril y que mide y a la vez sirve también como una suerte de predictor de tendencias de la actividad productiva de la industrial “volvió a encontrarse por debajo de 50 por quinta vez consecutiva; se ubicó en el valor más bajo de la serie, indicando un panorama de mayor complejidad para el segundo semestre del año”, dice un punto clave del informe. El panorama industrial sigue siendo difícil, dice el informe, pues “se agudizaron las tensiones registradas en la producción y las ventas, así como las referidas al entorno macroeconómico”.
Las empresas relevadas adjudicaron sus dificultades al “entorno macroeconómico” y, en particular, reportaron el impacto del reciente aumento del impuesto PAIS sobre los precios de insumos y bienes finales, así como crecientes dificultades en la gestión de permisos de importación de bienes (SIRA) y servicios (SIRASE), que les dificultan contar con los bienes y servicios necesarios para la producción.
El 71% de las empresas indicó dificultades en la aprobación de solicitudes y 80% observó alargamiento de los tiempos de aprobación de las SIRA, según una encuesta de la Unión Industrial
En cuanto a restricciones a las importaciones de bienes (trámite SIRA): el 71% de las empresas indicó dificultades en la aprobación de solicitudes y 80% observó alargamiento de los tiempos de aprobación de las SIRA. Además, 77% indicó mayores dificultades para el pago a proveedores.
Peor aún les fue a quienes necesitan importar servicios: 87% acusó dificultades con los tiempos de aprobación y 84% con la aprobación de solicitudes. Y a la hora de pagar, solo el 20% de las empresas dijo que pudo pagar sin inconvenientes los servicios tras la espera de 60 días. Una de cada dos empresas directamente no pudo realizar los pagos. Y también hubo dificultades en la aprobación de los fletes de exportación.
El informe concluyó: “Con posterioridad al cierre de la encuesta, la incertidumbre cambiaria se acentuó, en el marco de la suba del tipo de cambio y de la tasa de interés. Persiste un clima de elevada incertidumbre para la producción, con dificultades en torno a la disponibilidad de insumos, la suba de costos y la situación de la demanda y la gestión de liquidez de las empresas”.