En la esquina de la Avenida Las Heras y República de la India, en la zona también conocida como Palermo Zoo, emerge un edificio de 94 años de antigüedad que guarda una relación directa y dos similitudes con el Palacio de los Patos, situado a pocas cuadras, en Ugarteche y Cabello. Ambos se construyeron por encargo del empresario Alfredo Miguel Chopitea y fueron diseñados a distancia por el arquitecto francés Henri Aziere.
Se considera una especie de “hermano menor” del Palacio cercano, también inaugurado en 1929, el año en que se inició la gran depresión económica global tras el colapso la bolsa de valores de Nueva York.
Por entonces se erigieron estructuras que hoy son auténticas joyas arquitectónicas integradas al paisaje urbano de Buenos Aires. Originalmente diseñados para alquiler, estos departamentos de lujo ofrecían una calidad ligeramente inferior a la del Palacio Estrugamou, pero no tenían mucho que envidiarle.
Además, contaban con menor metraje. Actualmente, hay varios departamentos en venta que superan los 150 metros cuadrados, mientras que en otros edificios de alta gama de la década de 1920, las dimensiones solían exceder los 250 m2 cubiertos.
Este edificio tiene otra particularidad, hace unos 40 años, seguidores de Soda Stereo, el grupo integrado por Gustavo Cerati (fallecido en 2014), Zeta Bosio y Charly Alberti, pintaron en el frente que da a República de la India al 2700 el primer graffiti en reconocimiento a esta histórica banda del rock argentino.
Ninguna ventana igual
El “gemelo menor” de estilo francés, ubicado frente al Ecoparque (ex Jardín Zoológico) porteño y el Jardín Botánico, presenta una particularidad que, aunque no única, sí es original para la zona: desde la vereda se puede apreciar que ninguna ventana es igual a otra.
Las aberturas, de diversas formas, fueron traídas de Europa, al igual que otros materiales utilizados en la construcción del inmueble. Se conservan las celosías y herrajes originales.
Maximiliano Epper, quien residió hasta hace poco en el edificio, dijo a Infobae: “El edificio cuenta con 5 pisos y patios internos, algunos con un aire andaluz. Cada nivel tiene tres departamentos, excepto la planta baja que alberga cuatro unidades y la portería, sumando un total de 19 viviendas”.
Epper recuerda su infancia en una zona que era más tranquila y destaca la singularidad de las ventanas: “De hecho -dice- en el cuarto piso donde vivía con mi familia, hay una ovalada que no se encuentra en ningún otro departamento”.
Hace algunas décadas, hace memoria Epper, jugaba con amigos vecinos y armaban un circuito de pistas y autitos de Scalectrics que se extendía de departamento a departamento a través de los pasillos del edificio, algo que les resultaba “sumamente divertido”.
El diseño
El edificio es otro exponente de la escuela francesa y sus diversas corrientes arquitectónicas. El trabajo del arquitecto francés Henri Aziere se inscribe en un estilo único.
“Primero, porque Aziere, al igual que René Sergent (responsable del Palacio Atucha, entre otros) y hasta Le Corbusier (autor de la Casa Curutchet en La Plata), diseñaron proyectos de obras que nunca vieron personalmente, ya que no vinieron a la Argentina. Segundo, por la excesiva especulación constructiva que se generaba debido a normativas difusas del Municipio porteño. Este es el caso de la Casa de los Pavos Reales de Gianotti, el Pasaje de la Piedad de los Canale, las casas de renta de García Núñez y el Palacio de los Patos, diseñado por Aziere, quien fue contratado en París por Chopitea para este proyecto y para el edificio de Las Heras y República de la India”, explicó a Infobae el arquitecto Fernando Lorenzi, experto en patrimonio histórico y del estudio INFILL.
El edificio en la Avenida Las Heras y República de la India cuenta con 3.300 m2 cubiertos y un patio central. Está bajo protección patrimonial por el Gobierno porteño.
“La estética del edificio es claramente afrancesada y particularmente desprovista de ornamentación y de una cúpula, que sería esperable en esa esquina. Sin embargo, compensa con las vistas desde las unidades, que se benefician del verde del Jardín Botánico y del Ecoparque. La arquitectura es correcta y está bien implantada”, dijo Lorenzi.
Cómo son las viviendas
Actualmente, varias unidades están en venta y ofrecen 4 o 5 ambientes, adecuados para familias numerosas o ensambladas. Las expensas oscilan entre $70.000 y $80.000 por mes.
Analía Brenna, de Re/Max Desafío, informó a Infobae: “En este momento, hay departamentos en venta de hasta 5 ambientes con hall y toilette de recepción. Son viviendas luminosas, construidas con materiales de alta calidad”.
Al ingresar al edificio y tomar el ascensor de jaula, se accede a un imponente y luminoso living comedor con pisos de pinotea.
“Este espacio conserva sus vitraux originales, una chimenea y un balcón corrido. Desde aquí, hay triple circulación hacia las habitaciones, todas con vistas al Jardín Botánico, pisos de pinotea y placares empotrados. Tanto por el pasillo de distribución interno como por la entrada de servicio, se llega a la cocina, que da al jardín de invierno del edificio, y también a la dependencia”, añadió Brenna.
El edificio también dispone de un ascensor de servicio. La mayoría de las viviendas cuentan con cocinas renovadas. Algunas unidades requieren refacciones en los baños y pintura en general.
Los precios de venta varían, con algunas unidades partiendo desde los USD 420.000 y otras desde los USD 500.000; en general, las cotizaciones dependen del estado de conservación de la vivienda.
Iuri Izrastzoff, de la inmobiliaria Izrastzoff, señaló a Infobae: “Son departamentos de alta categoría con techos altos, y su ubicación es ahora más privilegiada que cuando se construyeron. Están cerca de áreas de servicios, parques y paseos gastronómicos”.
Otro inmueble disponible para la venta cuenta con un comedor situado en la ochava, ofreciendo vistas despejadas. Dispone de tres dormitorios, uno de ellos en suite, y los otros dos en semi suite.
Los departamentos no incluyen cocheras. Algunos propietarios o inquilinos optan por alquilar estacionamientos cercanos. El costo de adquirir un espacio para estacionar en la zona ronda los 30.000 dólares.
“La ventaja es que todos los departamentos ofrecen buena conexión con el exterior, gracias a sus amplios balcones. Si se modernizan las cocinas o los baños con materiales actuales, la vivienda aumentará rápidamente su valor. Quien compre allí accederá a una propiedad de categoría en una zona muy consolidada de la ciudad de Buenos Aires”, concluyó Izrastzoff.