Todo producto se que vende dentro de la Argentina tiene que ser transportado en algún momento o depende de la logística en algún punto de su elaboración. Por eso, cada peso que se encarece el costo de trabajo para los transportistas, influye tarde o temprano en el valor que pagan los consumidores finales.
Esta semana, tras la suba del dólar y los cambios vertiginosos en la economía post electoral, los costos de las empresas de transporte de carga se dispararon. Según un informe de la Federación Argentina de Entidades Empresarias de Autotransporte de Cargas (Fadeeac), el aumento relativo producido en los precios fue del 17,04% entre el 1 y el 18% de agosto. La mayor parte de esa suba, por supuesto, se registró en los últimos siete días, tras el salto del dólar oficial (22,4% de ajuste) y el incremento del 12,5% en el precio de los combustibles en boca de expendio.
Qué subió y cuánto
De acuerdo al estudio elaborado por Fadeeac, el ítem que mayor peso tiene dentro de los costos generales de los camiones que se movilizan por las rutas argentinas es el combustible. En su caso, tendiendo en cuenta la evolución de las tarifas que pagan los transportistas (no son las mismas que pagan los conductores particulares), el costo del combustible se encareció 17,89% en lo que va de agosto.
Fue más pronunciado el incremento que sufrieron los lubricantes, que en muchos casos son importados o fabricados con insumos provenientes desde el exterior. Asimismo, se ajustaron un 24,35% los neumáticos, un 23,12% las reparaciones y 24,2% el material rodante (el costo de las unidades 0 km en concesionarias).
Por ahora, se encareció también un 15,54% el costo de personal (conducción), pero no se descartan nuevas subas en ese ítem durante los próximos días, teniendo en cuenta la presión de los gremios para la reapertura de paritarias.
En la lista de ítems que componen los costos generales de las empresas de transporte de cargas, hubo dos rubros que no sufrieron ningún cambio en las últimas semanas, pese a la suba del dólar y la acelerada suba de las demás partes del presupuesto mensual. Se trata de los seguros (se ajustan a póliza vencida) y los costos de “patentes y tasas”.
No fue ese el caso del costo financiero (acceso al crédito), que tuvo un aumento del 17,06%, asociado a la suba de tasas establecida por el Banco Central (aumentó de 97% a 118% la tasa de referencia.
Por último, el costo de los peajes, aunque conforman el ítem con menor peso relativo en los costos de las firmas de logística y distribución, fueron los que más aumentaron en lo que va del octavo mes del año. De acuerdo a la Fadeeac, los peajes ahora son en promedio 38,3% más caros que hace apenas dos semanas.
De esta manera, los costos totales de las empresas de transporte de cargas ya acumulan un incremento del 87,26% en los primeros ocho meses del año. Aún es pronto para hacer una comparación con el Índice de Precios al Consumidor (IPC) general, dado que la inflación del octavo mes del año se conocerá recién el 14 de septiembre. Sin embargo, es válido recordar que en el período enero-julio la inflación fue de 60,2%, por lo que los costos de las empresas de logística parecen estar subiendo a mayor ritmo que el general del mercado.
En lo que respecta al impacto en precios, se debe recordar que el Gobierno nacional informó un acuerdo con algunas de las empresas más representativas de los rubros de “alimentos y bebidas” para realizar tres ajustes máximos del 5% durante los próximos tres meses. No obstante, hay miles de productos que no están sujetos al convenio y miles de comercios que tampoco participan del trabajo. De hecho, algunas consultoras privadas estiman una inflación de dos dígitos para agosto (más del 10%) e incluso septiembre. De cualquier manera, habrá que esperar a las estadísticas oficiales para conocer cómo fue el comportamiento de los precios tras la suba del dólar y el encarecimiento de la distribución.
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